Espa?a sobrevive al desconcierto

No hay partido f¨¢cil. El te¨®ricamente m¨¢s complicado, contra Francia en el debut, result¨® el m¨¢s sencillo de la primera fase del Campeonato de Europa de balonmano, en Serbia. En cambio, Espa?a sufri¨® frente a Hungr¨ªa y no logr¨® m¨¢s que un empate y en el ¨²ltimo encuentro de su grupo alcanz¨® una victoria excesivamente sufrida dada la poca calidad de su rival, una Rusia venida a menos.

La victoria por tres goles, sin embargo, les bastaba a los espa?oles para asegurarse el pase a la segunda fase con tres puntos acumulados. Ser¨¢ el equipo que m¨¢s sume de su grupo.

Espa?a se mostr¨® superior a Rusia a lo largo de los 60 minutos. El partido pareci¨® inclinarse claramente para los de Valero Rivera cuando el equipo alcanz¨® una ventaja de siete goles (19-12) al poco rato de iniciarse la segunda mitad. Sin embargo, esta selecci¨®n todav¨ªa tiene algunas lagunas. Y fue precisamente cuando todo parec¨ªa decidido, cuando el equipo espa?ol atraves¨® los peores momentos del encuentro. Bastaron un par de patinazos de Sarmiento, dos p¨¦rdidas del bal¨®n impensables, para que los rusos se despertaran y los de Rivera perdieran por completo los papeles.

El marcador pas¨® en cuesti¨®n de cinco minutos, de 21-15 a 21-19. El desconcierto era entonces notable y el t¨¦cnico espa?ol opt¨® por llamar a los suyos a filas con un tiempo muerto. Aunque Rusia consigui¨® acercarse hasta un solo gol (22-21), la fil¨ªpica de Rivera logr¨® hacer reaccionar al equipo. Volvi¨® la calma, la seguridad de que eran superiores a sus rivales y de que no pod¨ªan perder el partido.

Era simplemente una cuesti¨®n de confianza. Alguien deb¨ªa recordarles que ten¨ªan la solvencia suficiente para recuperar la compostura, mostrar de nuevo su efectividad defensiva y acometer las acciones de ataque con m¨¢s movilidad, sin prisas por resolver. Las palabras de Rivera ofrec¨ªan confianza. Y el equipo reaccion¨®. El siete inicial de Rusia, adem¨¢s, acus¨® el agotamiento inicial mientras que Espa?a segu¨ªa fresca f¨ªsicamente. Cuando logr¨® asentarse de nuevo, no tuvo ya dificultad alguna para ganar el partido.

Rusia lo perdi¨® todo. No solo el partido, sino tambi¨¦n cualquier posibilidad de clasificarse para los Juegos Ol¨ªmpicos de Londres, puesto que no acceder¨¢ a ninguno de los grupos del Preol¨ªmpico. Espa?a, en cambio, dio un paso importante hacia las semifinales. Pero el siguiente partido, el primero de la segunda fase [probablemente contra Croacia el domingo], puede abrirle o cerrarle las puertas de las medallas.