Abre en Madrid la primera librer¨ªa especializada en literatura gallega
Una pareja vinculada a Galicia apuesta por el negocio cultural de sus ra¨ªces
Diego Castelao y Mar¨ªa Carreira son hijos de emigrantes gallegos en Madrid. Los padres de ¨¦l, de Vedra (Santiago). Los de ella, de Castroverde, en Lugo. Nacieron, crecieron y se conocieron en la capital, donde ahora viven como pareja. Pero conservaron intactas las ra¨ªces paternas. Tal es el v¨ªnculo que les une a Galicia que su proyecto vital est¨¢ ¨ªntimamente relacionado con ella: acaban de montar la primera librer¨ªa especializada en literatura gallega de Madrid (con permiso de la de Sargadelos, que tiene una peque?a secci¨®n dedicada a libros gallegos y portugueses, pero m¨¢s orientada a artesan¨ªa).
Despu¨¦s de que ¨¦l perdiera su trabajo como educador social, decidieron invertir todos sus ahorros en su sue?o: su recuncho cultural en Madrid. Y lo hicieron. Aturuxo Tenda Galega es mucho m¨¢s que una librer¨ªa -en la que adem¨¢s se vende artesan¨ªa y m¨²sica-. Es un espacio cultural abierto, donde cualquier iniciativa interesante encuentra espacio si guarda relaci¨®n con Galicia.
El comercio aspira a ser un espacio abierto a todas las iniciativas culturales
La idea rond¨® siempre en la cabeza de Diego, pero el ¨²ltimo empuj¨®n surgi¨® entre libros. Mientras trabajaba en la caseta del Consorcio Editorial Galego en la madrile?a Feria del Libro se dio cuenta de que la gente ped¨ªa literatura gallega, y que no hab¨ªa una oferta competente en la capital. Y se decidi¨®. Una gran bandera de Galicia plantada al lado del mostrador da la bienvenida a los clientes. "Es nuestro amor por las ra¨ªces lo que nos llev¨® a embarcarnos en esta aventura", dice Mar¨ªa. A la izquierda, la m¨²sica: una cuidada selecci¨®n de discos en la que colabor¨® activamente el gaiteiro y amigo Daniel Bell¨®n. Cabe todo: desde la m¨²sica tradicional de Fuxan os Ventos o Milladoiro hasta grupos m¨¢s recientes, como Marful o Nova Galega de Danza. A la derecha, literatura. Todav¨ªa est¨¢n cerrando los ¨²ltimos pedidos, pero ya tienen una oferta variada: novela, poes¨ªa, cuentos infantiles, historia, cocina... En este caso les ech¨® una mano Carme Lamela, profesora de gallego en el madrile?o Espazo das Linguas Ib¨¦ricas. Solo unos pocos est¨¢n escritos en castellano, pero los due?os aseguran que no tendr¨ªan problema en a?adir m¨¢s obras de este tipo. Para ellos el conflicto ling¨¹¨ªstico simplemente no existe.
La artesan¨ªa ocupa la entrada de la tienda con diferentes objetos importados: cuero, cer¨¢mica, plata... Pero pretenden ir m¨¢s all¨¢, escaparse del souvenir y ofrecer productos de calidad.
La clientela es variada (gallegos, madrile?os y extranjeros) y pese al poco tiempo que lleva abierta la tienda, ya tienen fidelidades: "hay un gallego muy mayor que cada vez que pasa por aqu¨ª entra para echar un vistazo y charlar un rato en su lengua", cuenta Diego.
"En Madrid hay mucha gente trabajando por la difusi¨®n de nuestra cultura", explica el propietario, "pero son iniciativas personales que, como ¨¦sta, no tienen ning¨²n apoyo institucional". Por eso Aturuxo aspira a convertirse en una especie de centro vertebrador de todas aquellas actividades de este tipo que se celebren en Madrid. Ideas hay muchas: conciertos de m¨²sica, tertulias literarias, obradoiros de artesan¨ªa o presentaciones de libros.
Aunque ya atienden al p¨²blico, les falta cerrar los ¨²ltimos detalles, pero cuando est¨¦ todo listo celebrar¨¢n una gran fiesta de inauguraci¨®n. Habr¨¢ gaiteiros, escritores y alg¨²n que otro rostro conocido. A partir de ah¨ª ser¨¢ trabajar para mantener en pie un proyecto que ha costado mucho esfuerzo levantar. Aunque reconocen que no estuvieron solos. "Desde el principio nos sentimos muy arropados y animados por un mont¨®n de gente que nos ayud¨® a hacer realidad nuestra ilusi¨®n", asegura Mar¨ªa.
De momento, no tienen miedo al fracaso, sino todo lo contrario. Los dos coinciden al asegurar que, por lo menos, han cumplido su sue?o. Y tambi¨¦n han contribuido a la difusi¨®n de la cultura gallega en el exterior.
La red de colaboradores
Carme Lamela fue profesora de Diego Castelao en el Espazo de Linguas. Mar¨ªa S¨¢nchez recibe clases de gaita en los cursos de Daniel Bell¨®n. Muchos de los alumnos de estos dos maestros se intercambian. Unos van a gallego, los otros se apuntan a gaita. Y algunos acaban formando parte de una tertulia literaria de escritores gallegos en Madrid: el Grupo Bilbao, que se re¨²ne en el m¨ªtico Caf¨¦ Comercial con autores como Vicente Araguas, Xos¨¦ de Arxeriz y Ferm¨ªn Bouza.
Tambi¨¦n est¨¢ en esta red la escritora Silvia Bardel¨¢s que acaba de presentar su ¨²ltimo libro, Unha troita de p¨¦, y dedica todo su tiempo libre a otro proyecto de difusi¨®n cultural, la plataforma online Galicia en Madrid. Ellos, y muchos m¨¢s, han ido tejiendo una red de apoyos mutuos para sacar adelante sus proyectos de difusi¨®n de la cultura gallega en Madrid. Un "c¨ªrculo de conexiones", en palabras de Lamela. Reconocen la falta de apoyo institucional a sus iniciativas, pero comparten la ilusi¨®n por el inter¨¦s que despierta su trabajo en Madrid.
No es solo que haya un grupo tejiendo la red cultural gallega, sino "lo que es casi m¨¢s importante, mucha gente consumi¨¦ndola", dice Castelao.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.