Renegar de la cienciolog¨ªa

Tom Cruise y Nicole Kidman pod¨ªan haber sido los Brangelina de la era pre-Google. Sus dificultades para tener hijos propios, cuando eran la ¨²nica pareja posible en la c¨²spide del star-system hollywoodiense, les llev¨® a adoptar a un par de encantadoras criaturas, Isabella, que actualmente cuenta 20 a?os, y Connor, un chaval mulato que inaugur¨® la fiebre entre las superestrellas por abrir el marco racial de adopci¨®n.

Esta misma semana, Isabella anunciaba al mundo que piensa casarse con su novio, Eddie Frencher, un m¨²sico de perfil bajo de Los ?ngeles practicante de la cienciolog¨ªa. Tom Cruise se aprest¨® a dar su benepl¨¢cito. Isabella hab¨ªa presentado a su enamorado p¨²blicamente tan solo un par de semanas antes, el 23 de enero, durante el fiest¨®n de celebraci¨®n del 17? cumplea?os de su hermano Connor. Y aqu¨ª es donde Tom seguro que tuerce el gesto.

Lleva un Cristo dorado del cuello como venganza p¨²blica hacia su padre

Ah, Connor. El adolescente parece bastarse solito para montarse las fiestas y, de paso, resolver su vida. Y lo ha hecho de una sola tacada, renaciendo bajo el nombre de DJ C-Squared. Lejos de acudir a uno solo de los 250 millones de d¨®lares atribuidos a la fortuna personal de su padre, Connor se cerr¨® el lounge privado del Staples Center de Los ?ngeles (donde juegan habitualmente los Lakers). Se busc¨® un videojuego de baile como sponsor (que adem¨¢s cedi¨® parte del cach¨¦ a una asociaci¨®n para ni?os desfavorecidos), disfrut¨® del partido de los Clippers contra los Mavericks (es un fan¨¢tico del deporte, tambi¨¦n del f¨²tbol y de Beckham) y puso su propia m¨²sica, faltar¨ªa m¨¢s. Como recompensa, le cayeron, entre otros regalos, un par de coches (cortes¨ªa de una cadena de concesionarios) y una mesa de pinchar nueva que le trajo el actor Jamie Foxx, ¨ªntimo de Tom Cruise. Hasta aqu¨ª, el sue?o de todo padre megamillonario que aspira a no tener a la prole mamando del bote a perpetuidad.

Pero algo nos dice que Connor se ha visto empujado por las circunstancias a realizarse prematuramente. Cuando Nicole y Tom se separaron, en 2001, el chaval, de seis a?os, eligi¨® permanecer con su progenitor mientras su madre se perd¨ªa en la inmensidad de Australia. A?os despu¨¦s supimos por la propia pelirroja que sus hijos adoptivos reniegan de ella y no la quieren ver. Connor prob¨® el cine, haciendo de sosias infantil de Will Smith en Siete almas. No pareci¨® estimularle la experiencia.

Con la aparici¨®n de Katie Holmes en su hogar, Isabella y Connor fueron trasladados a un internado de la cienciolog¨ªa. La placenta de Suri parec¨ªa hab¨¦rsele indigestado a Tom, que desde entonces, dicen los c¨ªrculos chismosos, trata a su hijo m¨¢s como un socio de negocios que como a su sucesor. ?l, por su parte, se ha tomado una venganza p¨²blica que luce colgando del cuello: una cara de Jesucristo dorada que permite intuir que este es tan solo su primer paso para matar a su no-padre. |