Raimunda de Pe?afort, una juez frente al maltrato

Raimunda de Pe?afort Lorente (Granada, 1952) naci¨® predestinada para dedicarse a la ley. Al bautizarla con el nombre del patrono de los abogados, su padre quiso que fuera letrada. Pero ella fue m¨¢s all¨¢: supo que quer¨ªa ser juez despu¨¦s de que uno de sus clientes sufriera una condena que a ella le pareci¨® injusta. Un c¨¢ncer de huesos ha acabado con la vida de la magistrada que a veces so?¨® con alcanzar el Tribunal Supremo. Sus cenizas se repartir¨¢n entre Guadix y Baza.

Lorente, Mundi para sus ¨ªntimos, fue una mujer de rompe y rasga. Con las convicciones por delante de los intereses. En 2005, dej¨® la prestigiosa Audiencia Nacional para hacerse cargo de un puesto m¨¢s modesto: se puso al frente de uno de los reci¨¦n nacidos juzgados de violencia sobre la mujer, el n¨²mero 1 de Madrid. Ganaba menos y ten¨ªa trabajo a espuertas; casi 3.000 denuncias antes de que acabara el primer a?o, una cifra que se sumaba a los juicios y que pese a la enorme carga de trabajo que supon¨ªan a ella le llevaba a decir: "esto demuestra lo necesarios que eran estos juzgados". Pero esta tarea le interesaba m¨¢s que otras de mayor relumbr¨®n. Mucho m¨¢s. Tanto que acab¨® por escribir un libro que aterrizar¨ªa hasta en las librer¨ªas de aeropuerto, Una juez frente al maltrato, una docena de historias ver¨ªdicas para poner su granito de arena contra esta manifestaci¨®n de la desigualdad.

No eran historias de su juzgado, donde buscaba ser "una juez de cabecera" y de donde sal¨ªa cada d¨ªa "con 20 dramas en la cabeza", sino historias de casas de acogida que hab¨ªa conocido mucho antes de acceder al cargo. Ya desde su etapa de abaogada estuvo muy concienciada con el problema del maltrato a las mujeres. Lorente estaba orgullosa tambi¨¦n de haber sido la primera juez que pidi¨® la extradici¨®n de un progenitor por llevarse a sus hijos al extranjero, lo que luego se llamar¨ªa "secuestro parental". Lo hizo en 1999. Pero era una mujer nada dada a los extremismos y dec¨ªa que por eso se sent¨ªa a gusto en la Asociaci¨®n Francisco de Vitoria (la m¨¢s centrista de las asociaciones judiciales) Am¨¦n de juez, Raimunda de Pe?afort Lorente, licenciada tambi¨¦n en Filosf¨ªa y Letras, era amiga de escribir novela. En 2003, A la luz de un sue?o qued¨® finalista del Premio Vargas Llosa. Hizo incursiones en el periodismo, como cuando relat¨® en EL PA?S sus vivencias como juez de violencia.