Un surfista alem¨¢n, entre los m¨¢s de 4.000 extranjeros que cobran el PER

Un total de 4.332 trabajadores extranjeros de diversas nacionalidades cobran el subsidio especial agrario vigente en las comunidades de Andaluc¨ªa y Extremadura, de los que el 81% procede de Marruecos, si bien existen 355 beneficiarios de otros pa¨ªses africanos, y algo m¨¢s de cien provienen de la Uni¨®n Europea (UE), entre ellos un surfista de origen alem¨¢n, seg¨²n confirman fuentes del Ejecutivo.

Tras Marruecos, destacan los pa¨ªses africanos de Argelia, con 92 perceptores del Plan de Empleo Rural (PER), Senegal (66), Guinea Bissau (42) y Mauritania (31), entre otros. El segundo colectivo de extranjeros con mayor n¨²mero de beneficiaros proviene de Estados miembros de la UE, entre los que sobresalen Portugal, con 52, Francia (21) y Alemania (18).

Precisamente, las fuentes consultadas destacaron el caso de un surfista de nacionalidad alem¨¢n, afincado en Tarifa (C¨¢diz), que tras montar una empresa para ense?ar la pr¨¢ctica de este deporte, la abandon¨® y se apunt¨® al PER.

Los pa¨ªses sudamericanos suman unos 104 beneficiarios del subsidio agrario, de los que 35 proceden de Ecuador, 20 de Colombia, 15 de Cuba, 13 de la Rep¨²blica Dominicana, 10 de Per¨², ocho de Brasil y seis de Argentina. El n¨²mero de asi¨¢ticos que perciben el PER alcanza aproximadamente a 40 personas, la mayor parte de nacionalidad paquistan¨ª. Tambi¨¦n hay registrados beneficiarios procedentes de Rusia, las antiguas rep¨²blicas sovi¨¦ticas y Bosnia-Herzegovina, que en conjunto, son m¨¢s de 30 beneficiarios.

Los inmigrantes y el PER

Las fuentes consultadas destacaron que en los ¨²ltimos 16 a?os se han producido cambios notables en el sistema. As¨ª, el n¨²mero de beneficiarios creci¨® un 22% en este periodo, provocando un importante aumento del gasto, especialmente en las provincias con mayor actividad agraria y mayor presencia de inmigrantes (Almer¨ªa, Huelva y C¨¢ceres), y todo ello, precisaron las mismas fuentes, a pesar de que la poblaci¨®n ocupada en el campo se ha reducido en m¨¢s de un mill¨®n de personas.

As¨ª, de 299.534 beneficiarios registrados en 1985 se ha pasado a 365.154, cuadruplic¨¢ndose el gasto en prestaciones del PER, mientras que el coste del subsidio por desempleo del R¨¦gimen General de la Seguridad Social se multiplic¨® por 2,52.

Asimismo, las mismas fuentes hicieron hincapi¨¦ en los importantes cambios que ha registrado este sistema por sexos y por edades. De hecho, en los ¨²ltimos 16 a?os el n¨²mero de mujeres perceptoras se ha quintuplicado mientras que los beneficiarios varones se han reducido a la mitad, y los j¨®venes han perdido terreno frente a las personas de mayor edad.

Del total de perceptores existentes al cierre del pasado a?o, la mayor parte obtuvo seis meses de prestaci¨®n por trabajar 35 jornadas, si bien el 16% obtuvo la prestaci¨®n para todos los meses del a?o.

Pr¨¢cticas fraudulentas

Seg¨²n fuentes del Gobierno, las razones para llevar a cabo la reforma del antiguo PER se basan, principalmente, en la existencia de pr¨¢cticas fraudulentas en el sistema, ya que se da la paradoja de que el gasto est¨¢ aumentando cuando la poblaci¨®n ocupada agraria ha decrecido en m¨¢s de un mill¨®n de personas y cuando hay una mayor presencia de inmigrantes.

Las mismas fuentes indicaron que el n¨²mero de beneficiarios se aumenta "artificialmente" ya que un d¨ªa de trabajo en el sector agr¨ªcola y 35 jornadas trabajadas otorgan derecho a un subsidio de al menos seis meses, lo que permite la entrada de "personas extra?as" al sector agrario.

As¨ª, se entiende que se est¨¢n incorporando al subsidio personas que no son realmente trabajadores eventuales agrarios, d¨¢ndose la posibilidad de que un mismo trabajador pueda conseguir subsidios para allegados y familiares, mediante el traspaso de la titularidad de la prestaci¨®n, sin que ello tenga efectos sobre su cuant¨ªa.

El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales ha propuesto, en el marco de la reforma de protecci¨®n por desempleo, la desaparici¨®n paulatina del PER agrario. Esta reforma, no obstante, contempla el mantenimiento de los derechos adquiridos, aunque no habr¨¢ nuevas incorporaciones. Los jornaleros andaluces y extreme?os que queden excluidos podr¨¢n optar por incorporarse a un nuevo sistema de car¨¢cter contributivo para todo el territorio nacional, con cotizaci¨®n obligatoria seg¨²n las jornadas reales.

En este nuevo sistema, las prestaciones tendr¨¢n una escala de un d¨ªa de cobertura por cada cuatro d¨ªas de ocupaci¨®n cotizada. Para tener derecho a esa prestaci¨®n, al igual que el resto de trabajadores, se exigir¨¢ reunir un a?o de cotizaci¨®n en un plazo de seis a?os.