Una huelga general de los sectores p¨²blico y privado paraliza Grecia
La huelga general de 24 horas convocada contra los recortes en salarios y pensiones termina con disturbios.- El Gobierno acusa a la UE de doble moral
La primera huelga general conjunta de los dos principales sindicatos griegos, que representan a la mitad de los cinco millones de trabajadores del pa¨ªs, se ha convertido en un bar¨®metro del apoyo real que el Gobierno socialista de Yorgos Papandreu tiene entre la ciudadan¨ªa a la hora de acometer el plan anticrisis para recortar el d¨¦ficit (12,7%) y la deuda p¨²blica (300.000 millones de euros).
A falta de datos oficiales ?los sindicatos convocantes hablan del 80%?, el seguimiento del paro ha sido masivo en bancos, colegios, institutos y universidades; oficinas de la Administraci¨®n y en el transporte colectivo, que ha incumplido algunos servicios m¨ªnimos. Se han cancelado tambi¨¦n los ferris entre islas y los vuelos dom¨¦sticos e internacionales, lo que supuso el cierre del espacio a¨¦reo. La actividad de los establecimientos comerciales ha sido irregular. S¨®lo la Bolsa de Atenas ha funcionado con normalidad, al contrario que la Acr¨®polis y el resto de monumentos arqueol¨®gicos del pa¨ªs, que cerraron.
Sin embargo, la asistencia a la manifestaci¨®n convocada en la capital griega por los dos sindicatos convocantes, la Confederaci¨®n General de Trabajadores Griegos (GSEE, sector privado) y Adedy (funcionarios) ?ambos afines al gubernamental Movimiento Socialista Panhel¨¦nico (Pasok)?, ha sido escasa, unas 20.000 personas seg¨²n fuentes policiales ?el doble, para los sindicatos?, sin contar unos centenares que han seguido la marcha del sindicato comunista Pame. Sal¨®nica, la segunda ciudad griega, ha sido tambi¨¦n escenario de movilizaciones callejeras. Al t¨¦rmino de la concentraci¨®n de Atenas, ante el edificio del Parlamento, se han producido incidentes aislados entre unos 50 encapuchados armados con piedras y artefactos explosivos de fabricaci¨®n casera y la polic¨ªa antidisturbios, que ha respondido con cargas y botes de humo.
"La crisis, que la paguen los ricos" y "El pueblo es m¨¢s importante que los mercados" fueron las consignas m¨¢s repetidas por los manifestantes. "Los trabajadores p¨²blicos se han convertido en chivos expiatorios a los que se acusa del d¨¦ficit de dos d¨ªgitos de Grecia y de la deuda p¨²blica", ha se?alado Spyros Papaspyros, secretario general de Adedy, el sindicato de funcionarios que ya convoc¨® su propia huelga general el pasado 10 de febrero.
"Las acciones de protesta de los trabajadores continuar¨¢n durante el mes de marzo", ha a?adido Papaspyros, sin descartar m¨¢s movilizaciones en primavera. Por su parte, Gianis Panagopulos, secretario general del GSEE, ha afirmado que "Europa tiene los ojos puestos en nosotros, hoy nos estamos manifestando por la esperanza y el futuro... para que se cancelen las medidas [de austeridad del Gobierno]. Los griegos sabemos que la situaci¨®n econ¨®mica es insostenible, pero estas medidas no son de recibo".
"Europa tiene los ojos puestos en Grecia"
A la ausencia de datos oficiales se ha sumado la falta de informaci¨®n sobre la jornada de huelga. La poderosa Uni¨®n de Editores de Prensa Diaria de Atenas ha secundado la convocatoria y las ediciones digitales de los peri¨®dicos y las agencias de noticias no suministraron ninguna informaci¨®n en 24 horas; tampoco han emitido informativos las televisiones y las radios. La huelga general, la segunda en dos semanas, ha coincidido con la presencia en Atenas del equipo de t¨¦cnicos de la Comisi¨®n Europea, el Banco Central Europeo (BCE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), que desde el martes realiza una inspecci¨®n preliminar del estado de las cuentas griegas antes del primer examen formal de las mismas, el pr¨®ximo 16 de marzo. En el ambiente flotaba tambi¨¦n el globo sonda lanzado la v¨ªspera por el vicepresidente del Gobierno, Teodoros Pangalos, que el martes adelant¨® que el empleo fijo para toda la vida en el sector p¨²blico tiene los d¨ªas contados.
Mientras tanto, el gubernamental Pasok y el principal partido de la oposici¨®n, Nueva Democracia (ND, centro-derecha), se han enzarzado en una pelea parlamentaria sobre a qui¨¦n atribuir la responsabilidad en la falsificaci¨®n de las estad¨ªsticas griegas.
A instancias del Gobierno, que el martes present¨® una proposici¨®n no de ley para crear un comit¨¦ de investigaci¨®n griego ?al margen del europeo? encargado de determinar qui¨¦n false¨® los datos (especialmente, los de d¨¦ficit y deuda p¨²blica), las pesquisas se centrar¨¢n s¨®lo en el periodo comprendido entre 2004 y 2009, es decir, el correspondiente al anterior Gobierno de ND. Este partido, que no se opone a la formaci¨®n del comit¨¦, pretende sin embargo que la investigaci¨®n se retrotraiga a 1981, a?o en que el Pasok lleg¨® por primera vez al poder.
El martes, con cuatro d¨ªas de retraso, el Gobierno de Atenas respondi¨® a la demanda de aclaraciones de la Comisi¨®n Europea sobre el uso de instrumentos financieros ?en concreto, permutas de divisas? con la ayuda de bancos de inversi¨®n para maquillar su nivel real de deuda p¨²blica.
El Gobierno griego acusa a la UE de doble moral
El vicepresidente del Gobierno socialista de Grecia, Theodoros Pangalos, ha acusado a la Uni¨®n Europea de falta de liderazgo y de utilizar distintas medidas dependiendo de qu¨¦ pa¨ªs est¨¦ en problemas. Pangalos asegura que Italia, Francia y B¨¦lgica usaron en su d¨ªa las mismas t¨¦cnicas para entrar en el euro. Conviene recordar que a Grecia se le acusa de haber ocultado sus cifras reales durante a?os.
"Simplemente pones una cantidad de dinero en el balance del siguiente a?o... es algo que ha hecho todo el mundo y Grecia no ha llegado tan lejos como, por ejemplo, Italia". Pangalos no se ha quedado ah¨ª y ha acusado a Alemania, el pa¨ªs que dirige el rescate de la econom¨ªa griega, de no tener legitimidad para criticar a los griegos despu¨¦s de la ocupaci¨®n de Grecia durante la II Guerra Mundial por los nazis y del robo del oro del banco central.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.