El recibo de la luz y la olla m¨¢gica

El recibo de la luz, ese papel que no se mira, que llegaba al buz¨®n cada dos meses, que ha pasado a ser mensual y que nadie recuerda que haya bajado nunca, se puede comparar con una gran marmita en la que se han arrojado tantos ingredientes que nadie los recuerda con detalle. Peri¨®dicamente, la olla hierve y algunos ingredientes, olvidados, llegan a la superficie. En ¨¦poca de bonanza, cuando la demanda el¨¦ctrica crece, la factura engorda y los c¨¦ntimos no cuentan, la marmita acepta todas las cucharas y da para alimentar muchas bocas. Pero en ¨¦poca de crisis, cuando los usuarios se ven obligados a controlar los gastos al m¨¢ximo, la cosa es distinta. La boca de la marmita se estrecha y cada ingrediente se examina con inter¨¦s cient¨ªfico.

De la factura el¨¦ctrica, menos de la mitad va destinado a pagar lo que se ha consumido (en torno al 45%)

?Qu¨¦ pagan los usuarios acogidos a la llamada tarifa de ¨²ltimo recurso (TUR)? La respuesta parece obvia: pagan la electricidad que consumen en un periodo determinado. Cierto. Pero solo a medias. Adem¨¢s de la electricidad, el usuario paga impuestos (18% de IVA, m¨¢s un 4,864% del denominado impuesto de electricidad), cubre el presupuesto de la Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa (CNE), paga la moratoria que compens¨® a las el¨¦ctricas por la paralizaci¨®n de la construcci¨®n de nucleares, soporta el pago de las primas a las renovables, financia los planes de calidad, cubre las rebajas en la factura que benefician a empresas que se ofrecen a desengancharse del sistema en caso de necesidad (interrumpibilidad) y aporta lo necesario para cubrir el d¨¦ficit de tarifa (la deuda que se crea cada a?o desde hace una d¨¦cada y que alcanza 24.000 millones en estos momentos). Adem¨¢s, el recibo compensa a las empresas el¨¦ctricas que prestan servicio en las islas, Ceuta y Melilla. Por resumir, y antes de entrar en materia: de la factura el¨¦ctrica, menos de la mitad va destinado a pagar lo que se ha consumido (en torno al 45%), el resto se va en impuestos (20%) y subvenciones diversas. En la marmita y sus impuestos entra hasta la cuchara de las comunidades aut¨®nomas que se financian en parte v¨ªa el impuesto el¨¦ctrico.

Tema tan complejo merece entre en detalle. Hasta el c¨¦ntimo. Tomemos un recibo? m¨¢s o menos tipo. Potencia contratada para el hogar equipado sin lujos (TV, horno el¨¦ctrico, placa, nevera. lavadora y lavavajillas m¨¢s iluminaci¨®n), 5,5 KW. Periodo de facturaci¨®n del 1 de febrero al 2 de marzo de 2012. Total factura: 59 euros. ?D¨®nde va cada euro? Menos de la mitad, 25 euros (el 42,3%) va a pagar la energ¨ªa consumida (12,3 euros, el 20,8% de la factura), el transporte (tres euros, el 5%) y la distribuci¨®n (9,7 euros, el 16,5%). La otra gran parte del pastel son las primas al r¨¦gimen especial, en el que entran las renovables, desde la energ¨ªa solar a la e¨®lica. A este apartado van 12,4 euros de los 59 pagados, un 20,9%. Quedan los impuestos (IVA del 18% m¨¢s impuesto a la electricidad), que se lleva 11,4 euros, un 19,4% de la factura.

En la p¨¢gina de Unesa hay una ¨²til calculadora que aclara el destino de cada euro del recibo

A estas alturas, mareado en porcentajes, el usuario-lector, puede creer que ha llegado al final, que la marmita rebosa. No. Cabe m¨¢s. El sector el¨¦ctrico acumula un d¨¦ficit de 24.000 millones de euros que no es sino otra factura aplazada y que hay que pagar a las compa?¨ªas. Pues bien, a amortizar esa deuda se destina ya un 9% del recibo medio, o lo que es lo mismo, 5,3 euros de los 59 pagados para cubrir un coste anual aproximado de? 2.200 millones por la deuda acumulada. ?Acabamos? Casi. En la marmita queda un resto de cinco euros (8,4%) con los que se alimentan otros conceptos: desde el presupuesto del ¨®rgano regulador del sistema, la Comisi¨®n Nacional de la Energ¨ªa (CNE), a los sistemas el¨¦ctricos de las islas (costes extrapeninsulares).

Aparentemente, el examen de los n¨²meros aclara el misterio del recibo. Pero solo en parte. ?Por qu¨¦? Porque hay ingredientes en la olla, como la determinaci¨®n de los precios de la energ¨ªa (se hace cada tres meses por subasta) que requerir¨ªan ex¨¢menes a¨²n m¨¢s detallados. Mientras llegan, cualquier usuario con inter¨¦s y ganas puede acudir a la p¨¢gina de las el¨¦ctricas www.unesa.net para examinar su factura. En la p¨¢gina hay una ¨²til calculadora que aclara el destino de cada euro del recibo. Es lo que ha hecho quien esto escribe.