El rescate estigmatiza a Espa?a
La rentabilidad del bono toca el 7% y la prima marca m¨¢ximos y baja en los dem¨¢s pa¨ªses El Gobierno culpa a las "circunstancias internacionales" de la situaci¨®n de la deuda
En su discurso de investidura, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, prometi¨® culminar la reestructuraci¨®n del sector financiero en los seis primeros meses del a?o. Pero cuando acaba el primer semestre, el sector financiero est¨¢ abierto en canal, las necesidades de saneamiento han conducido a Espa?a al rescate europeo y todos los indicadores de confianza se han deteriorado hasta el extremo. La solvencia espa?ola es casi la de un bono basura, la deuda p¨²blica va a superar por primera vez la media europea y las dudas han llevado a los inversores a huir de los activos espa?oles. La prima de riesgo y la rentabilidad del bono espa?ol a 10 a?os marcaron este jueves nuevos m¨¢ximos. Espa?a no ha logrado librarse del estigma del rescate, pese a que el ministro de Econom¨ªa, Luis de Guindos, y el propio Rajoy, se las promet¨ªan muy felices, para irritaci¨®n de los socios europeos.
La situaci¨®n no se hab¨ªa "resuelto", como dijo el domingo Rajoy antes de volar para ver el partido contra Italia de la selecci¨®n espa?ola de f¨²tbol. Hasta ahora, los mercados se hab¨ªan cerrado para la financiaci¨®n a largo plazo en los tres pa¨ªses rescatados: Grecia, Irlanda y Portugal. El Gobierno aspiraba a que Espa?a fuese la excepci¨®n, tanto porque el importe relativo del rescate espa?ol es mucho menor como porque est¨¢ destinado a sanear el sector financiero. Pero por ahora, los c¨¢lculos han fallado. Desde que el Eurogrupo, que re¨²ne a los ministros de Econom¨ªa del euro, dio su visto bueno al rescate de Espa?a el pasado fin de semana, la prima de riesgo se ha disparado y este jueves marc¨® un nuevo m¨¢ximo de la era euro en 552 puntos b¨¢sicos (5,52 puntos porcentuales).
La duda es si har¨¢ falta otro rescate, uno en toda regla, dado el estigma sobre Espa?a que la ha seguido castigando en el mercado
La prima de riesgo es la diferencia entre la rentabilidad que los inversores exigen al bono espa?ol a 10 a?os y al alem¨¢n, considerado un activo seguro, libre de riesgo. Y los mercados exigen cada vez m¨¢s intereses a los t¨ªtulos espa?oles. Toda la curva de tipos (el gr¨¢fico que une las rentabilidades exigidas a diferentes plazos) se ha deteriorado, lo que complica enormemente la estrategia de financiaci¨®n del Tesoro. La rentabilidad del bono a 10 a?os lleg¨® este jueves al 7%; a cinco a?os, el 6,2%, y a 2 a?os, el 5%. La situaci¨®n no est¨¢ resuelta. Rajoy no viaj¨® este jueves a ver a la selecci¨®n.
Hace solo dos semanas, Guindos presum¨ªa de que el Tesoro "est¨¢ perfectamente financiado" y de que las necesidades netas de emisi¨®n eran "extremadamente reducidas" porque solo hab¨ªa que emitir bonos por 3.000 millones, "m¨¢s all¨¢ de las renovaciones". El problema es que las renovaciones no son autom¨¢ticas y que los inversores extranjeros han huido de la deuda espa?ola en este arranque de a?o como nunca antes. Y esas renovaciones (o vencimientos) son de m¨¢s de 80.000 millones hasta fin de a?o. Una cifra superior a la que har¨¢ falta en el rescate para la banca.
Guindos reconoci¨® este jueves que la situaci¨®n "no es mantenible" en el tiempo, pero que el Gobierno ir¨¢ "tomando medidas" que ir¨¢n "reduciendo [la prima de riesgo] en los pr¨®ximos d¨ªas y en las pr¨®ximas semanas". El ministro de Econom¨ªa achac¨® la "volatilidad" y la "situaci¨®n de tensi¨®n" que se est¨¢ viviendo en los mercados a "circunstancias internacionales". "Es una semana complicada antes de las elecciones griegas y evidentemente el Gobierno es consciente de esa situaci¨®n", ha agregado.
El dinero que el BCE presta a la banca espa?ola equivale a cerca del 30% del producto interior bruto (PIB) espa?ol
La incertidumbre ante las elecciones griegas es sin duda un factor desestabilizador. Pero este jueves, la expectativa de una victoria de los partidos tradicionales provoc¨® una mejora de los mercados. As¨ª, mientras que la prima de riesgo espa?ola marc¨® este jueves un nuevo m¨¢ximo de la era euro, la de Italia y otros pa¨ªses se redujo, lo que resta fuerza a los argumentos del Gobierno. El diferencial exigido a la deuda espa?ola frente a la italiana marc¨® este jueves su m¨¢ximo del ¨²ltimo a?o. Mientras que la rentabilidad de sus bonos a 10 a?os ha ca¨ªdo en lo que va de a?o del 7,1% al 6,1%, la de la espa?ola ha pasado del 5,1% al 7%. Parece que los factores no son solo nacionales.
El Gobierno no aprovech¨® ese momento del arranque de a?o en que los mercados estaban abiertos ¡ªgracias a la masiva inyecci¨®n de liquidez del Banco Central Europeo¡ª para captar dinero con que sanear a la banca. En aquel momento la tesis era que apenas har¨ªa falta dinero p¨²blico. Luego, a Rajoy le fall¨® el plan de inyectar directamente deuda p¨²blica en los bancos para recapitalizarlos, dada la oposici¨®n del BCE. Para entonces, el mel¨®n de Bankia estaba abierto (en la primera intervenci¨®n bancaria de la historia reciente comandada por el Gobierno y no por el Banco de Espa?a), las reformas financieras dificultaban la subasta de las otras entidades nacionalizadas y las estrategias alternativas de saneamiento del sector financiero hab¨ªan saltado por los aires. El rescate era inevitable.
Ahora, la duda es si har¨¢ falta otro rescate, uno en toda regla, dado el estigma sobre Espa?a que la ha seguido castigando en el mercado. Economistas y analistas creen que los tipos de inter¨¦s que el mercado exige a Espa?a son insostenibles. Muchos de ellos reclaman la actuaci¨®n del BCE en el mercado secundario. Pero a los expertos se unen los pol¨ªticos. Pero el problema es que los pol¨ªticos tampoco paran de pedir al BCE que act¨²e. Rajoy lo ha sugerido en varias ocasiones y este jueves mismo lo hizo abiertamente el ministro de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Manuel Garc¨ªa Margallo. La regla de oro de la independencia de un banco central es no ceder a las presiones pol¨ªticas, as¨ª que cada declaraci¨®n es una piedra en el camino hacia el objetivo de que act¨²e.
En todo caso, no se puede decir que el BCE haya estado del todo pasivo. El dinero que presta a la banca espa?ola (con las v¨ªas de financiaci¨®n mayorista cegadas) equivale a cerca del 30% del producto interior bruto (PIB) espa?ol. Y los 100.000 millones que el Eurogrupo se ha comprometido a prestar a Espa?a suponen otro 10%.
As¨ª las cosas, a Espa?a le caen reprimendas desde Europa. La de este jueves, de la canciller alemana, Angela Merkel, enormemente irritada con Espa?a, a la que reprocha una d¨¦cada de irresponsabilidad que dio lugar a la burbuja del ladrillo, que ahora se desinfla con las ca¨ªdas de precios de los pisos m¨¢s agudas de la democracia. Margallo, que provoc¨® el enfado de Merkel con una declaraci¨®n poco diplom¨¢tica en la que le acusaba de llegar siempre un cuarto de hora tarde para arreglar las crisis, replic¨® este jueves a la canciller y responsabiliz¨® parcialmente de que Espa?a haya vivido por encima de sus posibilidades a la banca del n¨²cleo de Europa, por financiarlo.
El problema ahora es el contrario. Los inversores no financian a Espa?a y por eso ha necesitado el rescate. El presidente del Bundesbank, el todopoderoso banco central alem¨¢n, advierte de que las condiciones del rescate ser¨¢n amplias y que la ayuda solo permite ganar tiempo. Y la presi¨®n sobre el Gobierno espa?ol para aplicar nuevos recortes de gasto (el BCE los pidi¨® este jueves) y subidas de impuestos (con el IVA a la cabeza) se intensifica y puede hacerse invencible durante la negociaci¨®n de la letra peque?a del rescate, sobre todo si los mercados siguen dando la espalda a Espa?a. La cuant¨ªa final del mismo se sabr¨¢ el mes pr¨®ximo y las previsiones apuntan a un rango de 50.000 a 70.000 millones.
Margallo dijo este jueves que el futuro del euro se juega "en las pr¨®ximas horas". El domingo hay elecciones en Grecia y el lunes y el martes, reuni¨®n del G-20 en M¨¦xico. Zapatero consigui¨® que Espa?a fuera invitada a ese foro, entre otras razones, por la importancia de su econom¨ªa y la solidez de su sector financiero. Paradojas del destino.
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