Algo huele a podrido en la City
El esc¨¢ndalo de Barclays cuestiona la ¨¦tica de todo el sector financiero Unas 20 entidades est¨¢n siendo investigadas en varios pa¨ªses por manipular el l¨ªbor

"Hubo un periodo para los remordimientos y las disculpas y creo que ese periodo se tiene que acabar¡±, declar¨® el 11 de enero de 2011 Bob Diamond, consejero delegado de Barclays, cuando compareci¨® ante la Comisi¨®n del Tesoro de la C¨¢mara de los Comunes que investigaba los abusos de la banca en el marco de la crisis financiera. La realidad parece haber demostrado que la banca, y en particular la brit¨¢nica, y m¨¢s en concreto Barclays, tiene a¨²n muchas cosas de las que arrepentirse y pedir perd¨®n.
En tan solo una semana, el Royal Bank of Scotland (RBS) y su filial NatWest han dejado sin acceso a sus cuentas ¡ªes decir, a su dinero¡ª a millones de clientes durante varios d¨ªas por un problema inform¨¢tico; Barclays ha aceptado pagar una sanci¨®n multimillonaria por manipular durante a?os el ¨ªndice que fija los tipos de inter¨¦s a que se prestan dinero los bancos; y de nuevo Barclays, adem¨¢s de HSBC, RBS y Lloyds, han aceptado compensar con 7.500 millones de euros a miles de ¡°clientes no sofisticados¡± a los que vendieron productos financieros muy arriesgados, a sabiendas de que no eran plenamente conscientes de los riesgos que asum¨ªan, un caso semejante al de las participaciones preferentes en Espa?a.
Algo huele a podrido en la banca brit¨¢nica y, por extensi¨®n, en la City de Londres. El caso de la manipulaci¨®n del interbancario ha explotado como una aut¨¦ntica bomba por varios motivos. Porque es un fraude que puede haber afectado a millones de consumidores en todo el mundo; porque revela una premeditaci¨®n y un cinismo extraordinarios; porque afecta al sector econ¨®mico m¨¢s desprestigiado en los ¨²ltimos a?os, los banqueros; o porque su impacto en la opini¨®n p¨²blica afecta tambi¨¦n a la vida pol¨ªtica.
Pero no solo eso: sus consecuencias en la banca est¨¢n a¨²n por ver. Barclays, que entre el jueves y el viernes se ha desplomado casi un 18% en la Bolsa de Londres, es solo la punta del iceberg, el primer caso investigado, pero hay una veintena de entidades que est¨¢n siendo escrutadas en varios pa¨ªses. Adem¨¢s, no est¨¢ claro el impacto que el caso puede acabar teniendo en esos bancos si se presentan reclamaciones por particulares afectados, y no est¨¢ descartado que los responsables tengan que afrontar responsabilidades criminales.
Cambio en la regulaci¨®n
No se sabe tampoco qu¨¦ impacto puede acabar teniendo en forma de endurecimiento de la legislaci¨®n reguladora, tanto europea como nacional, dado el hartazgo enorme de la opini¨®n p¨²blica y la intensa presi¨®n que hay ya sobre el Gobierno brit¨¢nico ¡ªpodr¨¢n seguir otros, a medida que bancos en otros pa¨ªses acaben siendo tambi¨¦n declarados responsables¡ª para que ponga coto de una vez a los abusos de la banca.
Es importante tener en cuenta que los bancos son vistos por muchos ciudadanos como los verdaderos responsables de la crisis financiera que ha llevado a la actual depresi¨®n. Para los ciudadanos que han perdido o temen perder sus empleos, que se han quedado sin vivienda o se han arruinado, es dif¨ªcil comprender por qu¨¦ los Estados destinan miles de millones a salvar la banca a costa de recortar los servicios p¨²blicos o renunciar a estimular el crecimiento econ¨®mico. Y la resultante de eso es que los banqueros siguen atribuy¨¦ndose jugosos bonos como recompensa, lo que ha provocado ya varios levantamientos en las juntas de accionistas de grandes compa?¨ªas financieras. Adem¨¢s, ahora, esto.
En s¨ªntesis, los investigadores en Estados Unidos y Reino Unido han concluido que Barclays manipul¨® durante a?os el l¨ªbor, ¨ªndice que marca el tipo de inter¨¦s de los pr¨¦stamos interbancarios de la City. Antes de la crisis financiera, manipulaban el ¨ªndice al alza para poder aplicar tipos de inter¨¦s m¨¢s rentables. Cuando la crisis financiera cuestion¨® la fiabilidad de los bancos, Barclays, sobre el que hab¨ªa enormes sospechas de que ten¨ªa problemas de liquidez, manipul¨® la informaci¨®n que suministraba para la formaci¨®n del ¨ªndice con la intenci¨®n de reducir el tipo de inter¨¦s y no dar la impresi¨®n de que necesitaba dinero.
Un mercado billonario
El l¨ªbor es importante porque no solo se utiliza para el interbancario. Es tambi¨¦n el ¨ªndice de referencia para multitud de transacciones financieras globales por valor de 350 billones de d¨®lares (276 billones de euros) en productos financieros de todo tipo. El ¨ªndice se fija en funci¨®n del tipo de inter¨¦s que los bancos dicen que est¨¢n dispuestos a pagar por comprar dinero, en lugar de regirse de acuerdo a un mercado real de operaciones.
Eso abre las puertas a su manipulaci¨®n. En el caso de Barclays, esa manipulaci¨®n estaba perfectamente organizada, hasta el punto de que el banco estableci¨® barreras entre departamentos para que no pudieran hablarse unos con otros y no trascendiera que estaban suministrando informaci¨®n falsa.
El caso del l¨ªbor puede no ser el ¨²nico ejemplo de manipulaci¨®n. A juicio de lord Turner, presidente del regulador brit¨¢nico, la Autoridad de Servicios Financieros (FSA), ¡°ser¨ªamos tontos¡± si pens¨¢ramos que pr¨¢cticas semejantes no se han aplicado a otros productos financieros. El primer ministro brit¨¢nico, David Cameron, ha anunciado una investigaci¨®n independiente sobre la manipulaci¨®n del interbancario, pero se resiste a ordenar una investigaci¨®n sobre el conjunto de las pr¨¢cticas financieras semejante a la que se ha puesto en marcha sobre la prensa a ra¨ªz de las escuchas ilegales del desaparecido tabloide News of The World.
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