Maremoto en el puente de mando
Dos de cada tres grupos espa?oles cotizados han cambiado su c¨²pula directiva desde 2007
La crisis ha provocado la mayor sacudida en las c¨²pulas directivas de las compa?¨ªas cotizadas que se recuerda en la historia empresarial espa?ola reciente. Desde que en 2007 surgieran las primeras turbulencias econ¨®micas, 75 de las 116 empresas que forman parte actualmente del ¨ªndice general de la Bolsa de Madrid se han visto obligadas a realizar alg¨²n cambio en su puente de mando. La ca¨ªda de los beneficios, el recorte de los dividendos, la merma en la capitalizaci¨®n y la presi¨®n de los accionistas se han plasmado en un reguero de despidos, fichajes, ascensos y defenestraciones en las salas nobles de las corporaciones.
El baile de directivos se ha producido por igual entre las empresas de gran tama?o como en aquellas medianas y peque?as. En el Ibex 35 los cambios han afectado a 23 empresas, mientras que en el resto del mercado continuo los movimientos se han dado en 52 grupos.
¡°Las cifras de rotaci¨®n se corresponden a un periodo excepcional en el que no hay financiaci¨®n. Muchos planes estrat¨¦gicos se han ido al traste porque no hay dinero. Hay un gran desgaste en la direcci¨®n de las empresas y con los cambios se busca algo de impulso¡±, comenta Cefer¨ª Soler, profesor del departamento de direcci¨®n de personas de Esade. ¡°Sin embargo, no se puede echar la culpa de todo a la crisis. Cuando las cosas iban bien pocas compa?¨ªas se prepararon para un enfoque econ¨®mico completamente distinto. Los cambios en la direcci¨®n siempre es mejor hacerlos cuando hay estabilidad¡±, a?ade Soler.
Poder y reloj biol¨®gico
En los ¨²ltimos a?os se ha producido una de las sucesiones m¨¢s sonadas de las ¨²ltimas d¨¦cadas. En 2011, Pablo Isla, que hasta entonces ejerc¨ªa como vicepresidente y consejero delegado de Inditex, asumi¨® la presidencia del grupo textil despu¨¦s de que el fundador, Amancio Ortega, deciera dejar toda labor ejecutiva. En la compa?¨ªa gallega el relevo fue, hasta cierto punto, f¨¢cil, ya que el expresidente (de 76 a?os) es tambi¨¦n el m¨¢ximo accionista. En otros pesos pesados del mercado la situaci¨®n es m¨¢s compleja porque el capital est¨¢ muy fragmentado y no hay ning¨²n delf¨ªn oficial. Emilio Bot¨ªn y Alfredo S¨¢enz, presidente y vicepresidente del Banco Santander, tienen 78 a?os y 70 a?os, respectivamente; el m¨¢ximo ejecutivo de Telef¨®nica, C¨¦sar Alierta, tiene 67 a?os, y Francisco Gonz¨¢lez, presidente del BBVA, tiene 68 a?os.
¡°En Espa?a no se est¨¢n preparando bien los procesos de sucesi¨®n. Es una tarea que debe recaer en el consejo, pero no se est¨¢n abordando con tiempo. Los directivos bastante tienen con gestionar el d¨ªa a d¨ªa, y ven la sucesi¨®n como algo secundario. Se equivocan¡±, advierte Carlos Alemany, el cazatalentos que contrat¨® Amancio Ortega para fichar al sustituto de Jos¨¦ Mar¨ªa Castellano como consejero delegado.
Los inversores institucionales valoran mucho la calidad del management y si hay establecidos protocolos de sucesi¨®n. ¡°Los resultados de los consejos dependen mucho del perfil de sus miembros. El presidente est¨¢ obligado a atraer el mejor talento posible. El proceso de transici¨®n en las empresas no ha hecho m¨¢s que empezar. Una mayor profesionalizaci¨®n de los consejos pasa por incorporar consejeros con experiencia internacional, elevar el n¨²mero de mujeres cualificadas y por dar responsabilidades a gente joven con nuevas ideas¡±, subraya Jella Benner-Heinacher, presidenta de Euroshareholders, la mayor asociaci¨®n de accionistas europeos.
En el Ibex 35 hay 10 empresas ¡ªAbertis, Acerinox, Banco Sabadell, Ferrovial, Gamesa, Inditex, Mapfre, Mediaset, Red El¨¦ctrica y Sacyr¡ª que tienen l¨ªmites de edad para ejercer las funciones de consejero, presidente o consejero delegado. Sin embargo, otras muchas han modificado sus estatutos.
El pionero fue el Banco Santander. Los acuerdos de fusi¨®n con el Central Hispano dec¨ªan que no se pod¨ªa ser consejero de la entidad con m¨¢s de 72 a?os. Ese art¨ªculo se suprimi¨® en 2002. En Telef¨®nica, hasta 2007 no se pod¨ªa ser presidente o consejero delegado con 65 a?os, ni consejero a partir de los 70. Ese mismo a?o, Endesa tambi¨¦n quit¨® los l¨ªmites de edad para presidente (70), consejero delegado (65) y consejero (70). Hasta 2007 Iberdrola ten¨ªa topes (70 a?os, para presidente y consejero, y 65, para consejero delegado). Por su parte, el BBVA borr¨® de sus estatutos en 2007 el art¨ªculo que dec¨ªa que no se pod¨ªa ser presidente con m¨¢s de 65 a?os, y en 2011 elev¨® la edad m¨¢xima para ser consejero de 70 a 75 a?os.
¡°M¨¢s que de limitar la edad para ejercer un cargo, yo ser¨ªa partidario de limitar el n¨²mero de mandatos de un consejero. Si un presidente sabe de antemano que no podr¨¢ ejercer su cargo m¨¢s all¨¢ de dos o tres mandatos, el consejo deber¨¢ preparar la transici¨®n. Los procesos de b¨²squeda de un delf¨ªn son complicados¡±, dice Jos¨¦ Ram¨®n Pin, profesor del IESE.
La mayor¨ªa de los gestores nunca hab¨ªan tenido que enfrentarse a una situaci¨®n tan dura, a una crisis con tantos frentes abiertos como la sequ¨ªa de cr¨¦dito, el desapalancamiento forzoso, la dificultad de acceso a los mercados de capitales, la menor demanda interna o la internacionalizaci¨®n como ¨²nica v¨¢lvula de escape. En este contexto son numerosas las empresas donde los cambios experimentados en los ¨²ltimos a?os no se limitan a un nombramiento aislado, derivando en el famoso m¨¦todo de prueba y error hasta dar con el nombre adecuado.
En Gamesa, por ejemplo, el presidente y consejero delegado al cierre del ejercicio 2007 era Guillermo Ulac¨ªa. Dos a?os despu¨¦s le sustituy¨® en el cargo Jorge Calvet y desde mayo de este a?o ocupa el puesto Ignacio Mart¨ªn de Nicol¨¢s. En Vocento tambi¨¦n se han turnado varios ejecutivos durante este periodo: Belarmino Garc¨ªa, Jos¨¦ Manuel Vara y Luis Enr¨ªquez Nistal. Otro tanto ha pasado por Cementos Portland donde por el despacho del m¨¢ximo directivo han pasado Jos¨¦ Ignacio Mart¨ªnez-Ynzenga, Dieter Kiefer y, desde comienzos de este a?o, Juan B¨¦jar.
En el caso de Ence su presidente y m¨¢ximo accionista, Juan Luis Arregui, ha probado con varios n¨²meros dos. En 2007 el consejero delegado de la papelera era Pedro Oyarz¨¢bal, luego lleg¨® Antonio Palacios y el que ocupa ahora el cargo es Ignacio de Colmenares. Amper, Deoleo, Ezentis, V¨¦rtice 360? o Indo tambi¨¦n han rotado dos o m¨¢s veces sus puestos de alta direcci¨®n desde que estall¨® la crisis.
¡°Los directivos tienen un estilo de gesti¨®n que no se adecua a todos los contextos. Hay ejecutivos muy competentes para una fase de estabilidad en la compa?¨ªa que, sin embargo, no encajan en fases de crecimiento o de crisis. Hay pocos profesionales todoterreno¡±, argumenta Jos¨¦ Ram¨®n Pin, profesor de IESE. Esta opini¨®n es compartida por Jos¨¦ Medina, presidente de Odgers Berndtson: ¡°El mundo es cada vez m¨¢s complejo y la competitividad entre empresas es mayor. Que un consejero delegado haya sido eficaz en los ¨²ltimos tres a?os no significa que lo vaya a ser para los pr¨®ximos tres¡±.
La casu¨ªstica de los cambios es sumamente amplia. Un gran n¨²mero de empresas ha tirado de cantera para renovar su directiva. Este es el caso de Bernardo Vel¨¢zquez en Acerinox, Javier San F¨¦lix en Banesto, Bernardo Calleja en Zardoya, Antonio Huertas en Mapfre, Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez-Pallete en Telef¨®nica, ?ngel Cano en BBVA, ?ngel del Valle en Duro Felguera, Mar¨ªa Dolores Dancausa en Bankinter, Francisco Reyn¨¦s en Abertis, Alex Cruz en Vueling o ??igo Echevarr¨ªa en Iberpapel. En otras compa?¨ªas, sin embargo, la soluci¨®n se ha buscado fuera; ah¨ª est¨¢n los ejemplos de Jos¨¦ Ignacio Goirigolzarri en Bankia o Jaime Carb¨® en Deoleo, entre otros.
En ocasiones el relevo ha sido producto de una guerra entre accionistas (Manuel Manrique sustituy¨® a Luis del Rivero en Sacyr), en otras por cambios en el Gobierno (el popular Jos¨¦ Folgado sustituy¨® al socialista Luis Atienza en Red El¨¦ctrica), a veces como resultado de una fusi¨®n (Antonio V¨¢zquez y Willie Walsh en IAG), por el aterrizaje de un nuevo due?o (Borja Prado y Andrea Brentan llegaron a Endesa tras el desembarco de Enel mientras que los bancos pusieron a Vitalino Nafr¨ªa y Eduardo Paraja en Metrovacesa), por decisi¨®n del principal accionista (salida de Gabriele Burgio de NH Hoteles), o bien por la entrada del Estado en el capital (Banco de Valencia, CAM).
¡°Las compa?¨ªas han reconocido que hay espacio para introducir mejoras en su ¨®rgano de direcci¨®n y esta tendencia continuar¨¢. En toda Europa podemos ver una transici¨®n hacia una mayor profesionalizaci¨®n de los consejos y una direcci¨®n m¨¢s diversificada¡±, explica Jella Benner-Heinacher, presidenta de Euroshareholders, la asociaci¨®n europea de accionistas.
Una de las tendencias que se aprecian en el mundo de la alta direcci¨®n, alentada por la presi¨®n de los inversores institucionales internacionales que demandan mejores pr¨¢cticas de gobierno corporativo, es la divisi¨®n de poderes en la c¨²pula. Los grandes fondos son contrarios a que el presidente asuma todo el poder y proponen la incorporaci¨®n un consejero delegado.
¡°Siempre debe existir un juego de contrapesos en la direcci¨®n. Hay gente en el puesto de mando que puede pensar que lo hace muy bien, pero al final los grandes fondos extranjeros, que son los que hacen oscilar el precio de la acci¨®n, quieren que se apliquen a rajatabla los principios de buen gobierno como condici¨®n para invertir su dinero¡±, se?ala Carlos Alemany, fundador de la empresa de b¨²squeda de directivos Alemany & Partners. El profesor Pin tambi¨¦n es partidario de un t¨¢ndem en la direcci¨®n. ¡°El presidente y el consejero delegado son papeles que se equilibran. El primero tiene una funci¨®n m¨¢s institucional, dirige el consejo y piensa en el largo plazo de la compa?¨ªa. Por su parte, el consejero delegado es que lidia con el d¨ªa a d¨ªa de la empresa¡±.
Abengoa es uno de los casos en los que se ha incorporado un consejero delegado. En 2010 Manuel S¨¢nchez Ortega pas¨® a desempe?ar esta funci¨®n en la compa?¨ªa andaluza (el presidente ejecutivo es Felipe Benjumea). Enag¨¢s tambi¨¦n ha fichado a un n¨²mero dos, Marcelino Oreja, que compartir¨¢ tareas ejecutivas con Antonio Llard¨¦n. Algo parecido ¡ªaunque no igual¡ª se da tambi¨¦n en Iberdrola. En abril de este a?o la el¨¦ctrica nombr¨® un director general (Jos¨¦ Luis San Pedro), aunque en su comunicado a la CNMV hizo hincapi¨¦ en que Jos¨¦ Ignacio S¨¢nchez-Gal¨¢n era ¡°el superior jer¨¢rquico¡± y conservaba ¡°todas sus facultades ejecutivas¡±.
Otras empresas donde se ha distribuido el peso del d¨ªa a d¨ªa son Indra (en 2011 se incorpor¨® Javier de Andr¨¦s como consejero delegado), Adolfo Dom¨ªnguez (ha fichado a Estanislao Carpio como director general) o Elecnor que nombr¨® a Rafael Mart¨ªn de Nicol¨¢s consejero delegado. En otras, sin embargo, el primer ejecutivo ha ganado m¨¢s peso ya que se ha prescindido de otros consejeros ejecutivos. Este ¨²ltimo es el caso de ?ngel Ron en Banco Popular, Pedro Ballv¨¦ en Campofr¨ªo, Antonio Pradera en Cie Automotive, Pedro Luis Fern¨¢ndez en GAM, Fernando Mart¨ªn en Martinsa y Juan Jos¨¦ Nieto en Service Point.
Los directivos, obviamente, no son los ¨²nicos que ven peligrar su trabajo con la crisis. Las compa?¨ªas cotizadas han acelerado los planes de ajuste que pasan, en la mayor¨ªa de los casos, por despidos. Con los datos del primer semestre de 2012, hasta 70 compa?¨ªas cotizadas destruyeron empleo en el ¨²ltimo a?o. Muchos de los directivos que han perdido su trabajo con la crisis cuentan al menos con el consuelo de las indemnizaciones incluidas en sus contratos blindados. En los ¨²ltimos meses, por ejemplo, NH Hoteles pag¨® 6,56 millones a Gabriele Burgio; Juan Carlos Torres se fue de Duro Felguera con 3,65 millones; en el caso de Jos¨¦ Manuel Vargas (Vocento) su finiquito estuvo valorado en 3,12 millones; Luis Atienza dej¨® la presidencia de Red El¨¦ctrica con una indemnizaci¨®n pr¨®xima a los 800.000 euros; y Diter Kiefer (Portland) recibi¨® 331.234 euros.
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