Davos debate sobre el d¨ªa despu¨¦s en la pol¨ªtica monetaria
Los expertos discrepan sobre los efectos de las medidas de los bancos centrales
Halcones y palomas volvieron a encontrarse ayer en Davos. El debate que enfrenta en el seno de los bancos centrales a los partidarios de un papel reducido de las autoridades monetarias en la gesti¨®n de la crisis y quienes abogan por aplicar toda la artiller¨ªa necesaria para estabilizar la situaci¨®n econ¨®mica se reprodujo ayer en el Foro Econ¨®mico Mundial.
Ahora que buena parte del mundo empieza a ver m¨¢s cerca la recuperaci¨®n, surgen muchas preguntas sobre los retos de la nueva realidad, un territorio incierto en el que cobra un papel relevante la pol¨ªtica monetaria y cuyo debate viene animado desde fuera de la cumbre por Jap¨®n y Alemania.
El antiguo presidente del Bundesbank, Axel Weber, tampoco ha dejado de ser un halc¨®n porque haya pasado al sector privado de la mano de UBS ¡ª¡°b¨¢sicamente pienso lo mismo¡±¡ª. Weber alert¨® de que las actuales pol¨ªticas apenas son una patada hacia delante. ¡°Salir de la crisis haciendo m¨¢s grande el problema no va a funcionar. Los bancos centrales pueden comprar tiempo pero no fijar los problemas¡±, apunt¨®. ¡°Estamos viviendo a expensas de generaciones futuras. Estas pol¨ªticas son insostenibles¡±, remarc¨® Weber.
Del lado de los halcones tambi¨¦n, e inesperadamente, Nouriel Roubini, el doctor cat¨¢strofe que predijo la crisis y que en un debate a puerta cerrada advert¨ªa de las consecuencias de las actuales medidas de relajaci¨®n cuantitativa. ¡°Hay riesgo de que un abandono lento de esas medidas puedan crear una nueva burbuja y provocar otra crisis. Hace diez a?os ten¨ªamos la receta de Greenspan y ahora la de Bernanke, pero ?cu¨¢les son sus consecuencias a largo plazo?¡±, seg¨²n dijo Roubini a puerta cerrada, comentaron algunos de los asistentes al encuentro.
Los economistas creen que se podr¨ªa estar creando otra burbuja de liquidez
Pero a esta pol¨ªtica monetaria tambi¨¦n le salen defensores. ¡°Claro que hay riesgo de que haya un fuerte repunte de expectativas inflacionistas si la econom¨ªa se recupera y que suban con rapidez los tipos de inter¨¦s a largo plazo. Pero tan pronto como eso suceda la pol¨ªtica monetaria tradicional se pondr¨¢ en marcha y subir¨¢n de inmediato los tipos de inter¨¦s¡±, aseguraba Kenneth Rogoff, profesor en Harvard.
¡°Es verdad que navegamos aguas desconocidas pero las medidas de relajaci¨®n cuantitativa hasta el momento han funcionado¡±, defend¨ªa el antiguo secretario del Tesoro de EE UU, Larry Summers, a la carrera entre una reuni¨®n y otra. En contra de su costumbre, Summers pasa de puntillas sobre los nuevos objetivos para fijar la pol¨ªtica monetaria, como ha hecho la Reserva Federal de EE UU con objetivo de empleo. ¡°No es lo mismo para los pa¨ªses que tienen algo de crecimiento y tienen riesgo de deflaci¨®n que aquellos con tensiones en los precios pese a la ausencia de recuperaci¨®n¡±.
El debate monetario eclips¨® los intentos del sector financiero para defender las reformas emprendidas con la crisis. ¡°Es muy f¨¢cil decir que hay riesgos pero alguien tiene que estar detr¨¢s de las personas y de los Gobiernos. Si hubiera llevado al consejo del banco la financiaci¨®n de colaterales por 15.000 millones para Italia y Espa?a quiz¨¢s me hubieran dicho que no¡±, argumentaba Jamie Dimon, presidente y consejero delegado de JPMorgan.
Sin embargo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) critica que muchas de las causas que provocaron la crisis siguen sin resolverse. ¡°La rentabilidad de la banca es un tema clave pero no el ¨²nico. Antes de la crisis el sector era muy grande, demasiado grande, y todav¨ªa lo sigue siendo. Hay una parte muy importante de las operaciones financieras que permanecen opacas y con productos muy complejos¡±, aseguraba Min Zhu, vicepresidente del FMI, que record¨® que el sector sigue representando el 66% del PIB mundial.
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