El paro que m¨¢s quema
El desempleo supera el 44% entre los menores de 30 a?os La evoluci¨®n de la cifra pone en peligro a casi un mill¨®n de j¨®venes con baja cualificaci¨®n
Ma?ana, lunes, una delegaci¨®n de eurodiputados llegar¨¢ a Madrid para examinar el plan de lucha contra el desempleo juvenil al que Europa va a destinar cerca de 1.000 millones de euros. Se encontrar¨¢n con una encuesta de poblaci¨®n activa (EPA) reci¨¦n salida del horno que dice que m¨¢s de seis millones de espa?oles est¨¢n en paro, m¨¢s del 27% del conjunto de la poblaci¨®n activa, unas cifras nunca vistas y que los analistas vaticinaban para finales de 2013.
Tambi¨¦n ver¨¢n c¨®mo el desempleo entre los menores de 25 a?os (el colectivo que les interesa) afecta ya a casi seis de cada diez, tras colocarse la tasa de paro en el 57,2%. Es un incremento superior a 30.200 personas sobre el trimestre anterior e ilustra una escalada que no encuentra freno desde 2007. Espa?a se ha situado a la cabeza del ¨ªndice de desempleo juvenil, duplicando con creces la media de los 27 (el 23,2%) y poniendo en riesgo el futuro de una generaci¨®n, seg¨²n alerta repetidamente la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT).
¡°Estas cifras son un drama¡±, opina Jos¨¦ Antonio Herce, socio de Analistas Financieros Internacionales (AFI), ¡°sobre todo el de los menores de 24 a?os, que est¨¢n estudiando y se desaniman a buscar trabajo ante su inexistencia¡±. Pero tambi¨¦n entre el colectivo de 25 a 29 a?os, cuya tasa de paro rond¨® el 36% en el primer trimestre de 2013, rozando los dos puntos de incremento sobre finales de 2012, como los menores. Son 1,8 millones de j¨®venes parados en total, el 44,5% de la poblaci¨®n activa menor de 30 a?os.
Los delegados del Parlamento Europeo se encontrar¨¢n tambi¨¦n con un Gobierno que tiene pocas estad¨ªsticas positivas que exhibir. Los resultados de la Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven 2013-2016, aprobada el pasado 22 de febrero tras su escenificaci¨®n con los agentes sociales, se traducen por el momento en que casi 20.500 j¨®venes se han dado de alta como aut¨®nomos desde entonces, seg¨²n el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
El secretario general de la Uni¨®n de Profesionales y Trabajadores Aut¨®nomos de Espa?a (UPTA), Sebasti¨¢n Reyna, mantiene que los ¨²nicos datos favorables que ha arrojado la EPA del primer trimestre son los trabajadores por cuenta propia sin asalariados que se han dado de alta, 22.000, muy probablemente animados por la tarifa ¨²nica de 50 euros; y que coincide con los aportados por el ministerio de F¨¢tima B¨¢?ez, que prev¨¦ poner en marcha unas 213.000 acciones en los cuatro a?os de duraci¨®n de este plan, cuya dotaci¨®n presupuestaria es de 3.500 millones de euros y que ha arrancado con 100 medidas.
La contundencia de Europa sobre la deuda es tal que no deja mucho margen de maniobra
El ministerio podr¨¢ exponer las medidas, aunque le resultar¨¢ muy dif¨ªcil presentar evoluciones positivas ante la contundencia de los datos del desempleo, la reducci¨®n de la poblaci¨®n activa y el desmesurado aumento que est¨¢ apunt¨¢ndose en los ¨²ltimos seis meses el volumen de inactivos, que desisten en su empe?o de buscar trabajo ante la desesperaci¨®n de no encontrarlo: ya son cerca de 2,8 millones de menores de 30 a?os. Porque, pese a que la pelota est¨¦ en el tejado del Gobierno, la contundencia de las decisiones europeas sobre la relajaci¨®n del pago de la deuda es tal que tampoco deja gran capacidad de maniobra. Al menos hasta que se celebren las elecciones alemanas de septiembre y la canciller Angela Merkel sea reelegida por unos votantes que no est¨¢n dispuestos a pagar por los desequilibrios de otros pa¨ªses. Si as¨ª fuera, se relajar¨ªa la presi¨®n sobre el d¨¦ficit, algo que podr¨ªa dar un respiro a la inversi¨®n, opinan los expertos consultados.
Porque, incluso para quienes consideran apropiadas las acciones contenidas en el plan de lucha contra el desempleo juvenil, como Gayle Allard, profesora de econom¨ªa de IE Business School, ¡°es comparable a poner tiritas a un problema estructural¡±. ¡°No hay econom¨ªa que cree empleo sin crecimiento¡±, sostiene, en la esperanza de que a finales de 2013 empiecen a darse los primeros s¨ªntomas de que la econom¨ªa se levanta. ¡°No mucho, pero algo¡±, sostiene, consciente de que el consenso de los analistas prev¨¦ que el PIB caiga un 1,5% este a?o y la tasa de paro se sit¨²e en el 26,8%, que se ha rebasado en el primer trimestre del a?o y que solo podr¨ªa recortarse si la poblaci¨®n activa continuase cediendo terreno a pasos m¨¢s agigantados que los actuales, ya de por s¨ª elevados, seg¨²n Herce. ¡°Ojal¨¢ no supere el 27,5% a finales de a?o¡±, exclama el socio de AFI, que prev¨¦ que el desempleo entre menores de 25 a?os suba hasta el 60%.
Allard se?ala que con un aumento del PIB del 0,8% ya se puede generar trabajo, un objetivo quiz¨¢s m¨¢s alcanzable el a?o que viene, de concretarse las estimaciones recogidas por el panel de expertos que elabora la Fundaci¨®n de Cajas de Ahorros (Funcas), que fijan el crecimiento medio del PIB en el 0,7%. El Gobierno espera un 0,5%
¡°Para resolver el problema del desempleo juvenil no se puede esperar m¨¢s tiempo. Y las soluciones instrumentadas a corto plazo no sirven de nada. Tienen que ser a largo plazo, cuando tengamos crecimiento y haya una reforma seria de la educaci¨®n que reequilibre el exceso de universitarios y la escasez de estudiantes de formaci¨®n profesional, cuyas necesidades se van a duplicar en el futuro. Los j¨®venes necesitan un plan de choque con fondos suficientes y que provoque efectos desde el principio. Tenemos que ser conscientes de la gravedad del problema, del peligro que corremos de que haya una generaci¨®n perdida, de individuos que a los 30 o 40 a?os tengan trabajos precarios y malvivan dentro de una d¨¦cada¡±, opina Agust¨ªn del Valle, profesor de Econom¨ªa de la Escuela de Organizaci¨®n Industrial (EOI).
En su opini¨®n, los contratos con vinculaci¨®n formativa, los contratos en pr¨¢cticas o los de formaci¨®n introducidos por la Estrategia de Emprendimiento y Empleo Joven van en la buena direcci¨®n, pero no son suficientes. Algo que demuestra su escasa utilizaci¨®n. A falta de informaci¨®n del Ministerio de Empleo (que ha descartado facilitarla), empresas de trabajo temporal, como Adecco, los aut¨®nomos agrupados en UPTA o la empresa l¨ªder de b¨²squeda de empleo online, Infojobs, niegan que haya aumentado su utilizaci¨®n a la vista de sus propios datos.
Desmitificar algunos mantras
A Luis Garrido, catedr¨¢tico de Sociolog¨ªa de la UNED, le gusta hablar con propiedad, como ide¨®logo de la EPA que fue en su d¨ªa. E intentar desmontar mantras que se instalan en el imaginario popular. No cree que Espa?a vaya a tener una generaci¨®n perdida, ya que las estratosf¨¦ricas tasas de paro, que superan el 57% para los m¨¢s j¨®venes, apenas afectan a una quinta parte de quienes tienen menos de 25 a?os.
El segundo mito con el que trata de acabar Garrido es ese que se est¨¢ extendiendo entre la poblaci¨®n, preocupada por un ¨¦xodo masivo de j¨®venes. Con los ¨²ltimos datos disponibles, de los 114.400 que empezaron a vivir en otros pa¨ªses en 2012, tan solo 3.900 son espa?oles y est¨¢n en edad de trabajar. Las salidas de espa?oles aut¨®ctonos en edad laboral han sido de 28.600 personas, y los retornos de 24.700. Los datos no muestran tal ¨¦xodo por ahora.
Lo que s¨ª se comprueba, se?ala el catedr¨¢tico, es que la edad de la juventud se prolonga, pues est¨¢ en relaci¨®n con el trabajo, el domicilio propio y la pareja; es decir, con la independencia. Seg¨²n las estad¨ªsticas, son pocos, muy pocos, quienes viven fuera del hogar paterno, con lo que quiz¨¢s fuese m¨¢s aconsejable llevar el concepto de juventud adulta hasta los 34 a?os.
Garrido ha analizado a los j¨®venes de entre 20 y 34 a?os. Y sus conclusiones son las siguientes. Aquellos de entre 20 y 24 a?os que trabajaban en 2000 se han reducido a la mitad. Entre este colectivo nunca hubo m¨¢s de un 8% que dispusiese de casa propia y m¨¢s de un 6% que tuviese casa y pareja. Los j¨®venes de entre 25 y 29 a?os son otro cantar. Su ocupaci¨®n ha bajado tanto en hombres como en mujeres (en menor proporci¨®n). Pero mientras que un 23% de ellos iniciaba 2000 con casa, hoy ya solo es un 21,5% quienes la poseen. Tambi¨¦n han bajado los j¨®venes con pareja. Justo al contrario que en el caso de las mujeres, que han aprovechado la crisis para independizarse. Han pasado del 23% al 29% las que cuentan con casa y del 21% al 23% las que tienen tambi¨¦n pareja. Una evoluci¨®n que se acrecienta en el caso de las mujeres entre 30 y 34 a?os, de ellas, cerca del 60% trabaja (frente al 57% de 2000), mientras la ocupaci¨®n de los hombres de esta franja ha ca¨ªdo, lo mismo que su posesi¨®n de domicilio propio y pareja, que para las f¨¦minas ha subido del 40% al 53% y del 35,8% al 46,4%.
Del Valle recuerda que en la crisis de los a?os ochenta, cuando los ¨ªndices de paro eran similares a los actuales, tambi¨¦n se habl¨® de una generaci¨®n perdida que el futuro no vio nacer. Pero esta crisis es m¨¢s prolongada y ya ha destruido mucho m¨¢s empleo, las dos terceras partes entre menores de 30 a?os, indica.
El colectivo joven es el m¨¢s afectado por la crisis, con las tasas de actividad y empleo que m¨¢s han ca¨ªdo y la tasa de paro que m¨¢s ha crecido desde 2007, se?ala Carlos Mart¨ªn, economista de Comisiones Obreras (CC OO). Sin embargo, desde su punto de vista, es m¨¢s acuciante centrar las acciones y los fondos p¨²blicos en los colectivos m¨¢s vulnerables para que el grado de desigualdad (en cuyo avance Espa?a se ha puesto a la cabeza europea) deje de aumentar. Y estas personas son las que cuentan con menos formaci¨®n (especialmente mayores de 45 a?os), que corren el riesgo de convertirse en paro estructural. En el caso de los menores de 30 a?os, cerca de un mill¨®n de personas tienen un nivel de estudios bajo. Una cifra muy parecida constituyen los que engrosan el paro de larga duraci¨®n en el primer trimestre del a?o. ¡°Hay que definir un programa de recualificaci¨®n para estos desempleados con urgencia¡±, defiende.
Mart¨ªn critica al Gobierno porque cree que este ha impulsado la estrategia contra el paro juvenil porque Europa ha destinado fondos para evitar la escalada del desempleo que vive este colectivo en la UE. ¡°El plan se ha montado para gastar ese dinero. Sin ning¨²n estudio previo. El Ministerio de Empleo est¨¢ perdido y lo demuestra aprobando un plan que incluye nada menos que cien medidas, que son meramente paliativas¡±, afirma.
En Comisiones Obreras est¨¢n preocupados porque el dinero de las bonificaciones, ¡°cuyo fin es proteger a los colectivos m¨¢s vulnerables¡±, se destine a los menores de 30 a?os, que no lo son precisamente por su edad y su capacidad de remontar en el futuro. Algo en lo que coincide Juan Jos¨¦ Dolado, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad Carlos III.
Dolado hace un retrato de los menores de 30 a?os, un colectivo de siete millones de personas, de las cuales cuatro millones forman parte de la poblaci¨®n activa y el resto son estudiantes (casi dos millones) y ninis, que ni estudian ni trabajan. De los cuatro millones que participan en el mercado laboral, explica, 2,2 millones conservan su empleo y 1,9 millones se han quedado sin trabajo desde 2007. ¡°Y cerca de un mill¨®n de estos j¨®venes apenas si cuentan con formaci¨®n (no han acabado la etapa de secundaria obligatoria) porque dejaron sus estudios al calor del boom de la construcci¨®n de la primera d¨¦cada del siglo. Ellos son el verdadero problema. Ya que los formados protagonizar¨¢n un proceso de migraci¨®n masiva que todav¨ªa no se refleja en las estad¨ªsticas. Los j¨®venes con estudios b¨¢sicos necesitan formaci¨®n dual, no solamente formaci¨®n, sino empleo asociado a formaci¨®n para poder mejorar su cualificaci¨®n al tiempo que disponen de unos pocos recursos¡±, afirma tajante. A sabiendas, eso s¨ª, de lo costoso que es para las empresas contratar a aprendices.
No en vano, recientemente la CEOE recomendaba a sus empresarios que se abstuvieran de apuntarse al impulso que el Gobierno pretende dar a la formaci¨®n dual por resultar muy cara su implantaci¨®n para las compa?¨ªas. El Ejecutivo tiene que incentivar a los empresarios en esta l¨ªnea en lugar de hacerlo a trav¨¦s de las bonificaciones a la contrataci¨®n, que se ha demostrado que son pan para hoy y hambre para ma?ana, opinan Dolado y Herce.
Combatir la dualidad laboral es una de las principales propuestas
¡°Es necesario flexibilizar la entrada a los programas educativos, especialmente la formaci¨®n profesional, y dise?arlos sobre todo para las necesidades de este colectivo, con menor h¨¢bito de estudio, incrementar las pr¨¢cticas, reconociendo la experiencia laboral...¡±, aboga Elisabet Motell¨®n, profesora de Econom¨ªa Laboral de la UOC.
El catedr¨¢tico de la Universidad Carlos III considera que la soluci¨®n al desempleo juvenil (que tradicionalmente ha duplicado la tasa general) es acabar con la dualidad del mercado laboral, uno de los objetivos de la reforma llevada a cabo en febrero del pasado a?o, que no se ha producido. Salvo si se mira la tasa de temporalidad, actualmente en el 22,12%, frente a porcentajes por encima del 35% en 2007. La crisis se ha cebado con los contratos temporales, mayoritariamente de j¨®venes. Para ello propone, una vez descartado por el Gobierno el contrato ¨²nico por considerarlo inconstitucional, la existencia de dos contratos, con indemnizaciones por despido crecientes en funci¨®n de la antig¨¹edad, uno para despidos procedentes y otro para improcedentes. Adem¨¢s de a trav¨¦s de una reforma de las prestaciones por desempleo, de manera que sean m¨¢s generosas que en la actualidad (su cobertura ha pasado del 78,4% al 63,4% actual, seg¨²n CC OO), pero duren menos tiempo, hasta a?o y medio en vez de dos a?os. ¡°Justo lo contrario de lo que ha hecho el Gobierno¡±, dice el catedr¨¢tico.
Dolado no cree en la generaci¨®n perdida, al igual que Allard. Son partidarios del ¨¦xodo de trabajadores bien formados (especialmente ingenieros) hacia otros pa¨ªses como salida para encontrar trabajo y mejor calidad de vida. Volver¨¢n a Espa?a con mayor experiencia y formaci¨®n. Aunque no hay que olvidar, se?ala la profesora de Econom¨ªa de IE, ¡°que Espa?a ha formado a unos j¨®venes que no pueden trabajar aqu¨ª, que no pueden independizarse ni formar hogares y ahorrar. Y el pa¨ªs lo va a pagar porque eso supone frenar el crecimiento econ¨®mico futuro¡±. Pero no le sorprende porque ¡°Espa?a lleva desperdiciando mucho tiempo a sus j¨®venes por culpa de las rigideces del mercado laboral¡± y tampoco cree que haya cambiado nada (salvo los despidos) tras la ¨²ltima reforma laboral. Como tampoco se ha dado el salto a una econom¨ªa de alta productividad.
La temporalidad y el abandono escolar, cree firmemente Agust¨ªn del Valle, son el origen del problema. Y donde se tiene que poner la soluci¨®n que, desde luego, pasa por la inversi¨®n. ¡°En econom¨ªa no existe la palabra austeridad. Solo existen las pol¨ªticas fiscales expansivas y contractivas¡±, zanja.
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