Ayudas a la banca y coste para el contribuyente

En los casi seis a?os de crisis que llevamos, los Gobiernos de un buen n¨²mero de pa¨ªses han tenido que destinar ingentes cantidades de dinero p¨²blico a rescatar a sus bancos, lo que sin duda afecta al bolsillo del contribuyente. En algunos pa¨ªses, salvar a la banca ha supuesto que sus Gobiernos se han endeudado hasta las cejas, oblig¨¢ndoles a ellos y, por extensi¨®n, a los ciudadanos, a aceptar las duras condiciones que acompa?an a un rescate.

En Europa, la Comisi¨®n Europea facilita datos del montante de las ayudas p¨²blicas a la banca, as¨ª como las distintas modalidades. Adem¨¢s, ofrece informaci¨®n de la parte de las ayudas p¨²blicas que se dan por perdidas, lo que supone que incrementa el d¨¦ficit p¨²blico del pa¨ªs que las otorga.

Los datos disponibles para el periodo 2007-2012 muestran que la crisis ha impactado de diferente forma en los distintos pa¨ªses de la UE, por lo que el importe de las ayudas p¨²blicas y su repercusi¨®n en el d¨¦ficit p¨²blico tambi¨¦n difieren ampliamente entre pa¨ªses. As¨ª, en el caso de las inyecciones p¨²blicas de capital, y considerando el importe acumulado en todo el periodo de crisis, el rango de variaci¨®n va desde un valor m¨¢ximo del 28,2% del PIB en Irlanda (cuyo sector bancario quebr¨® y el Gobierno decidi¨® asumir toda su deuda) hasta un m¨ªnimo del 0,2% en Suecia, si bien hay que tener en cuenta que en varios pa¨ªses de la UE su importe es cero. Son de destacar como porcentaje del PIB, al margen de Irlanda, las inyecciones p¨²blicas de capital en Grecia (18,4 %), Portugal (11,1%), Alemania (10,8%) y Reino Unido (7,4%).

El grueso del dinero a recuperar corresponde a los tres bancos nacionalizados

?Y qu¨¦ hay de Espa?a? Los datos computan un total de 54.170 millones de euros, cifra que incluye las ayudas iniciales del FROB y las procedentes posteriormente del rescate europeo. Ese montante acumulado equivale al 5,2% del PIB en 2012.

En el caso de la repercusi¨®n de las ayudas sobre el d¨¦ficit p¨²blico, obviamente, la cifra m¨¢s elevada es la de Irlanda, cuyo importe acumulado equivale al 24,5% del PIB de 2012. Y la segunda en importancia, aunque a mucha distancia, es la de Espa?a, ya que la Comisi¨®n Europea da por perdidos 39.637 millones de euros, equivalentes al 3,8% del PIB en 2012. La cifra es mayor en el caso de la inyecci¨®n de capital que se considera d¨¦ficit, aunque el neto es menor al descontar ingresos que el Estado obtiene por otras ayudas concedidas, como comisiones por los avales destinados a la emisi¨®n de deuda bancaria o los intereses por pr¨¦stamos concedidos. De los 43.479 millones de euros de inyecci¨®n de capital que se consideran p¨¦rdidas, 18.302 corresponden a BFA-Bankia; 11.126, a CatalunyaCaixa; 7.601, a NovaGalicia; 5.498, al Banco de Valencia, y 953, a Unnim. En este ¨²ltimo caso, la p¨¦rdida la asumi¨® la banca a trav¨¦s del Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos (FGD), por lo que su inclusi¨®n en el d¨¦ficit p¨²blico se debe a que el FGD ha pasado a ser considerado parte del Estado desde 2012.

Del 3,8% del PIB de repercusi¨®n de las ayudas bancarias al d¨¦ficit p¨²blico espa?ol, 3,6 puntos porcentuales corresponden a 2012, que es lo que la Comisi¨®n a?adi¨® al d¨¦ficit p¨²blico hasta llegar al 10,6% con las ayudas a la banca. La cifra hubiera sido a¨²n mayor si una parte de las p¨¦rdidas no las hubieran asumido los titulares de h¨ªbridos (participaciones preferentes y deuda subordinada), esos productos tan denostados por miles de personas que han visto perder una parte muy importante de sus ahorros.

Si bien las inyecciones p¨²blicas de capital en la banca espa?ola no son excesivas en comparaci¨®n con otros pa¨ªses europeos, ya que se sit¨²an en torno a la media y por debajo de pa¨ªses como Irlanda, Alemania, B¨¦lgica, Holanda, Portugal, Reino Unido, etc¨¦tera, su repercusi¨®n en el d¨¦ficit p¨²blico es muy superior, lo que implica que suponen un mayor coste para el contribuyente al darse por perdidas. As¨ª, con la excepci¨®n de Irlanda, en el resto de pa¨ªses, el impacto de las ayudas en el d¨¦ficit p¨²blico es inferior. En Alemania, por ejemplo, a pesar de la enorme cuant¨ªa del capital p¨²blico inyectado a sus bancos (10,8% de su PIB), la Comisi¨®n solo da por perdido el 1,6% del PIB.

Recuperar todas las ayudas me temo que ser¨¢

Solo el tiempo dir¨¢ qu¨¦ parte de las ayudas pueden recuperarse, y de eso depender¨¢ sobre todo el devenir futuro de la econom¨ªa espa?ola. El grueso de las ayudas a recuperar corresponde a los tres bancos nacionalizados en manos del FROB (BFA-Bankia, CatalunyaCaixa y NovaGalicia), en los que el Estado tiene de plazo cinco a?os para venderlos. Si entonces, por fin, hemos entrado en la tan deseada senda de la recuperaci¨®n, en ese caso ser¨¢ m¨¢s probable que se pueda recuperar un mayor porcentaje de las ayudas p¨²blicas. Pero con las duras condiciones que les ha impuesto el MoU y con un negocio a la baja fruto del proceso de desapalancamiento que tiene que realizar la econom¨ªa espa?ola y del incierto cuadro macroecon¨®mico, recuperar todas las ayudas me temo que ser¨¢ misi¨®n imposible.

Desgraciadamente, la historia no termina aqu¨ª, ya que, adem¨¢s de las ayudas p¨²blicas en forma de inyecci¨®n de capital, los Estados asumen lo que se conoce como pasivos contingentes, como la concesi¨®n de avales a la emisi¨®n de deuda bancaria. Este es el caso de la deuda con la que el banco malo (Sareb) ha pagado a los bancos los activos transferidos por un importe de, aproximadamente, 50.000 millones de euros y que ha sido avalada por el Estado. El total de estos pasivos contingentes asciende en Espa?a en 2012 a 105.000 millones de euros, cifra que incluye, adem¨¢s de la deuda de la Sareb, la deuda bancaria avalada por el Estado. La Sareb tiene un plazo de 15 a?os para vender todos sus activos, por lo que confiemos en que en ese plazo sea capaz de recuperar toda esa deuda, ya que, de lo contrario, la p¨¦rdida acabar¨ªa recayendo en el bolsillo de los contribuyentes, engrosando el d¨¦ficit p¨²blico.

Lo que est¨¢ claro es que las crisis bancarias s¨ª afectan, y mucho, al bolsillo de los contribuyentes, y que al menos este a?o lo seguir¨¢n haciendo en Espa?a. Lo que ya es seguro es que al d¨¦ficit p¨²blico de 2013 habr¨¢ que incorporar los 245 millones de euros que se dan por perdidos en el rescate del Banco Gallego y los 525 millones de euros en participaciones preferentes que suscribi¨® el FROB del Banco CEISS.

Joaquin Maudos es catedr¨¢tico de An¨¢lisis Econ¨®mico, investigador del Ivie y colaborador del CUNEF