?Qui¨¦n paga cuando se cierra un banco?
Los ministros de Econom¨ªa de los Veintisiete discuten las reglas para forzar a pagar a accionistas y grandes ahorradores en caso de crisis bancaria
Al comenzar la fase aguda de la crisis, Washington reuni¨® a sus grandes bancos con los dirigentes del Tesoro y de la Reserva Federal, su banco central: el Gobierno de Estados Unidos acab¨® inyectando miles de millones de d¨®lares en los gigantes de Wall Street ¡ªtras el fiasco de Lehman Brothers¡ª para disipar las dudas y a la vez dej¨® caer a centenares de peque?os bancos: cerr¨® (y cierra) bancos a docenas, a trav¨¦s de su mecanismo de liquidaci¨®n, que se dedica a bajar la persiana si la entidad no es viable y a devolver a los depositantes hasta 250.000 d¨®lares por cuenta. La crisis financiera europea es mucho m¨¢s resistente: miles de millones de euros gastados despu¨¦s, nadie sabe c¨®mo est¨¢n los bancos, ni qu¨¦ hacer con ellos en caso de una crisis bancaria. Para los bancos viables, pero que necesiten tapar agujeros, los ministros de Finanzas del euro aprobaron el jueves la recapitalizaci¨®n directa de entidades, pero con apenas 60.000 millones ¡ªrevisables si vienen curvas¡ª y con tantas restricciones como quer¨ªa Alemania desde el principio. El Ecofin ¡ªla reuni¨®n de ministros de Finanzas de los Veintisiete¡ª segu¨ªa discutiendo la noche del viernes qu¨¦ pasa si un banco no puede recapitalizarse y hay que cerrarlo. Solo una cosa est¨¢ clara: pese a que hay ruido de sables porque las capitales tienen puntos de partida distintos, el modelo de Chipre, con variaciones, se impone.
Cuando se cierre un banco, los primeros en pagar ser¨¢n los accionistas. Despu¨¦s los poseedores de deuda de peor calidad (como los preferentistas en el caso espa?ol) y m¨¢s adelante la deuda de mejor calidad. Y finalmente ser¨¢n los depositantes quienes sufran, pero solo por encima de 100.000 euros por cuenta.
Eso est¨¢ meridianamente claro. Pero el diablo est¨¢ en los detalles: Espa?a pretende blindar a los particulares y las pymes con dep¨®sitos de m¨¢s de 100.000 euros, tal y como figura en el ¨²ltimo borrador de la directiva que discuten los ministros. Fuentes europeas explicaron que lo m¨¢s probable es que se introdujera algo de flexibilidad en el acuerdo final, siempre que accionistas y bonistas paguen al menos por un 8% de los pasivos, aunque esa cifra est¨¢ bajo discusi¨®n. Varios Gobiernos, encabezados por Francia, Reino Unido y Suecia, presionaban para que los pa¨ªses tengan cierta discrecionalidad, al menos hasta una cantidad m¨¢xima. Pero esa flexibilidad no sale gratis: cuanto mayor sea el margen, m¨¢s dinero tendr¨¢ que ponerse sobre la mesa para salvar a los clientes a trav¨¦s del fondo de garant¨ªa de dep¨®sitos, al que en principio solo contribuir¨¢n los bancos.
Solo una cosa est¨¢ clara: pese a que hay confrontaci¨®n, el modelo de Chipre, con variaciones, se impone
Alemania, Holanda y Austria no eran partidarios de las excepciones: esos tres pa¨ªses pretenden que las reglas sean siempre iguales para todos, para conseguir una verdadera uni¨®n bancaria. Y quieren que esa directiva, que en principio deber¨ªa estar lista para 2018, se active antes, en 2015. Tras los calendarios y los tecnicismos hay algo fundamental: el dise?o equivocado de la directiva de cierres de bancos puede acabar provocando huida de capitales de unos pa¨ªses a otros. Y eso es lo ¨²ltimo que necesita la interminable crisis europea.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.