La Kombi, la m¨ªtica furgoneta "hippie" de Volkswagen, se despide del mercado
Tras m¨¢s de 60 a?os recorriendo cientos de kil¨®metros a lo largo del mundo, Kombi, la m¨ªtica furgoneta "hippie" de Volkswagen, dejar¨¢ de producirse a nivel mundial despu¨¦s de que Brasil, ¨²nico pa¨ªs en mantener el montaje del modelo, haya anunciado el cese de su fabricaci¨®n en diciembre.
Considerado como un objeto de culto para muchos de sus fieles, la Kombi ha trazado durante d¨¦cadas el camino de numerosas familias y trabajadores en todo el mundo, especialmente en Brasil, donde durante m¨¢s de 30 a?os fue el ¨²nico veh¨ªculo de carga que circul¨® por sus carreteras.
"La Kombi es la furgoneta que construy¨® Brasil. Es un momento triste para los coleccionistas", explic¨® a Efe el presidente de la asociaci¨®n de Sao Paulo "Sampa Kombi Clube Volkswagen", Eduardo Gedrait, quien destac¨® la "fuerza", la "manutenci¨®n simple" y la "versatilidad" de este veh¨ªculo lanzado en 1950 en Alemania.
Ahora, 63 a?os despu¨¦s, la m¨ªtica furgoneta se despide del mercado debido a la nueva normativa brasile?a sobre seguridad en el transporte, que incluye, entre otras medidas, le exigencia de que todos los veh¨ªculos cuenten con sistema air-bag.
"No se puede luchar contra esa decisi¨®n. Hay que aceptarlo, el coche est¨¢ desfasado, tanto en confort, como en seguridad. En Alemania ese tipo de furgoneta no se fabrica desde 1979. Brasil consigui¨® con mucho esfuerzo mantenerlo hasta el momento", a?adi¨®.
Protagonista de numerosas pel¨ªculas, elemento inseparable de la est¨¦tica hippie y compa?ero de viaje de personajes conocidos, como el presentador brasile?o Her¨®doto Barbeiro, Volkswagen comenz¨® a escribir, con tres meses de antelaci¨®n, el epitafio de uno de sus modelos m¨¢s populares, junto con el conocido "escarabajo".
"Todo coche merece un anuncio de lanzamiento, pero s¨®lo un icono como la Kombi merece tambi¨¦n un anuncio de deslanzamiento", reza una llamada publicitaria realizada el pasado domingo por la compa?¨ªa automovil¨ªstica en una revista en la que anunciaba que "la ¨²ltima Kombi del mundo ser¨¢ fabricada al final de este a?o".
Brasil comenz¨® el montaje del modelo en 1957 y desde el momento se han producido en el pa¨ªs 1,5 millones de veh¨ªculos, seg¨²n los datos facilitados por Gedrait.
Antes de jubilar a la m¨ªtica furgoneta, Volkswagen anunci¨® el lanzamiento de una edici¨®n especial. En un primer momento estaba limitada a 600 unidades, pero seg¨²n confirm¨® el propio presidente del club tras conversar con personal de la planta de fabricaci¨®n, la compa?¨ªa lanzar¨¢ finalmente 1.200 debido a la alta demanda.
Aunque en Europa la producci¨®n de este veh¨ªculo se interrumpi¨® hace a?os, en el pa¨ªs latinoamericano sigue siendo habitual ver circular por el asfalto a este tipo de furgonetas, las cuales son utilizadas sobre todo por peque?os comerciantes y trabajadores de correo.
La "Sampa Kombi Clube Volkswagen", asociaci¨®n que re¨²ne a unos 350 amantes de este veh¨ªculo en Sao Paulo, llev¨® a cabo esta semana una concentraci¨®n de Kombis en el Samb¨®dromo del Anhembi, un evento que, seg¨²n su presidente, gan¨® fuerzas con el anuncio del fin de su producci¨®n.
Hasta all¨ª se desplaz¨® Otavio Costa, un ingeniero civil cuya pasi¨®n por este modelo le ha llevado a coleccionar en su garaje hasta once ejemplares personalizados.
"Tener una Kombi es para m¨ª una cuesti¨®n de estilo y personalidad. Me gusta mucho conducirla, es maravilloso, a pesar de ser inc¨®moda y ruidosa. Todo el mundo desea una, es un coche 'cool' y estiloso", dijo a Efe.
Las m¨¢s de 30 Kombis aparcadas en la concentraci¨®n son testigos de muchos kil¨®metros y an¨¦cdotas, y algunas, incluso, de muchos matrimonios.
"La experiencia de organizar matrimonios va m¨¢s all¨¢ de la cuesti¨®n financiera, es una satisfacci¨®n muy grande", coment¨® Leonardo Ramos, quien utiliza su coche para diferentes eventos, como para transportar a parejas de reci¨¦n casados.
El 31 de diciembre, Volskwagen parar¨¢ las m¨¢quinas de este legendario modelo, pero al menos, durante unas cuantas d¨¦cadas m¨¢s, la Kombi continuar¨¢ recorriendo las calles de Brasil como una aut¨¦ntica pieza de coleccionista.
"Los que tenemos una la vamos a guardar con llave", confes¨® Gedrait.
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