B¨¢?ez recurre al d¨¦ficit del sistema de pensiones para defender la reforma

Antes de que acabe el a?o, el Ministerio de Empleo utilizar¨¢ 6.418 millones del Fondo de Reserva para pagar las pensiones que se sumar¨¢n a los 4.500 millones que us¨® en junio. El dato lo dio este martes la responsable del departamento, F¨¢tima B¨¢?ez, nada m¨¢s comenzar su discurso de defensa de la reforma de la Seguridad Social en su comparecencia en el Congreso. A la primera cifra le siguieron otras: en los casi dos a?os que el PP est¨¢ en el Gobierno se han empleado 23.631 millones del fondo; hasta 2016 el d¨¦ficit acumulado del ¨®rgano previsor sumar¨¢ 36.500 millones; la afiliaci¨®n desde que ha comenzado la crisis ha ca¨ªdo un 16%; y en 2050, tres de cada 10 espa?oles ser¨¢n mayores de 65 a?os.

En apenas un minuto, la ministra dibuj¨® un panorama nada halag¨¹e?o. ¡°Ilustran claramente las amenazas de car¨¢cter econ¨®mico a las que se enfrenta en el medio plazo el sistema p¨²blico de pensiones¡±. A partir de entonces habl¨® de la necesidad de la reforma para ¡°garantizar la viabilidad econ¨®mica del sistema a largo plazo¡±, obvi¨® ¡ªen la primera intervenci¨®n¡ª la petici¨®n del Consejo Econ¨®mico y Social de que de marcha atr¨¢s (petici¨®n que fue recordada por toda la oposici¨®n), e insisti¨® en claro que est¨¢ dispuesta ¡°a hablar de todo, tambi¨¦n de ingresos¡±. Incluso, abri¨® la posibilidad de establecer qu¨¦ porcentaje del PIB se debe gastar en pensiones (el 10,2% en los presupuestos de 2014).

Tambi¨¦n se emple¨® a fondo B¨¢?ez en defender que la reforma no supondr¨ªa una p¨¦rdida de poder adquisitivo. Aunque dej¨® claro que esa no es su primera prioridad: ¡°Es la sostenibilidad del sistema¡±. Y eso, a tenor de las previsiones econ¨®micas y demogr¨¢ficas, si no se introducen otras fuentes de financiaci¨®n del instituto p¨²blico, se traducir¨¢ en unas importantes devaluaciones de las pensiones en el futuro.

Y por aqu¨ª llegaron las mayores cr¨ªticas de la oposici¨®n, que un¨¢nimemente rechaz¨® el proyecto de ley de reforma. ¡°Han hecho lo contrario que tendr¨ªan que hacer¡±, le espet¨® el portavoz del PNV, Emilio Olavarria, que hizo un ruego: ¡°No focalice el debate solo sobre los gastos¡±. Tambi¨¦n fue muy cr¨ªtico ?lvaro Anchuelo, de UPyD: ¡°Su llamada al di¨¢logo est¨¢ viciada. Nos pide dialogar con un resultado predeterminado¡±. Anchuelo, en la siguiente intervenci¨®n, lleg¨® a dudar de que B¨¢?ez tenga margen alguno para negociar.

Conforme transcurr¨ªa la sesi¨®n las cr¨ªticas crecieron. Carles Campuzano, de CiU, acus¨® al Ejecutivo de romper el Pacto de Toledo. Y le lanz¨® una advertencia: ¡°Lo m¨¢s razonable es que el d¨ªa que ustedes pierdan la mayor¨ªa, otra mayor¨ªa la cambie¡±.

Las formas y plazos empleados por el Gobierno en esta reforma, tambi¨¦n han disgustado a Joan Coscubiela, de Izquierda Plural. El diputado catal¨¢n aprovech¨® su ¨²ltima intervenci¨®n para lanzar una oferta de pacto a B¨¢?ez que pasa por ¡°aparcar¡± la propuesta de reforma y ampl¨ªe el calendario para negociarla. ¡°Le cojo el guante¡±, respondi¨® B¨¢?ez, pero ya no fue m¨¢s all¨¢. No se retract¨® de lo que hab¨ªa dicho minutos antes, cuando afirm¨® que la reforma tiene que estar aprobada antes de acabar diciembre.

El momento de mayor dureza lleg¨® con el PSOE. ¡°Nos resulta repudiable el contenido casi igual que las formas¡±, comenz¨® Valeriano G¨®mez, antecesor de B¨¢?ez al frente del Ministerio. A partir de ah¨ª, se elev¨® el tono del debate. Como CiU, advirti¨® de que cuando cambie la mayor¨ªa parlamentaria, cambiar¨¢n la reforma. En su r¨¦plica, G¨®mez se encendi¨® y elev¨® mucho la voz, casi grit¨®: ¡°No podemos estar de acuerdo con una f¨®rmula que consagra la p¨¦rdida de poder adquisitivo¡±.

La respuesta de B¨¢?ez tambi¨¦n fue dura. No desaprovech¨® el pasado de G¨®mez. Le record¨® la congelaci¨®n de pensiones de 2011, ech¨® mano de la herencia recibida y zanj¨® el debate con contundencia: ¡°Siento mucho que de todos los diputados del PSOE, tenga que ser usted quien tenga que hacer este debate¡±.