Expolio patrimonial y espionaje, grandes preocupaciones latinas en la Unesco

La necesidad de reforzar la lucha contra el tr¨¢fico il¨ªcito de bienes culturales y el espionaje masivo por internet fueron hoy dos de los principales temas abordados por los miembros latinoamericanos del Consejo Ejecutivo de la Unesco, en su segunda sesi¨®n plenaria.

En declaraciones a Efe y en su discurso ante los 58 miembros de ese ¨®rgano rector, el embajador del Ecuador, Lautaro Pozo Malo, denunci¨® "la interceptaci¨®n arbitraria" de las comunicaciones internacionales, violadora de "la soberan¨ªa", del principio de no intervenci¨®n en los asuntos interiores de los Estados y del derecho humano a la privacidad.

El embajador cubano, Juan Antonio Fern¨¢ndez Palacios, critic¨® por su parte el "escandaloso e indiscriminado sistema de espionaje masivo que implementa Estados Unidos" y apoy¨® la iniciativa de Brasil para que el Consejo y la Unesco aborden la cuesti¨®n de "privacidad y ¨¦tica en Internet".

Un "imperativo moral" dadas las competencias de la Organizaci¨®n de la ONU para la Educaci¨®n, la Ciencia y la Cultura, si "desea mantener su pertinencia en tanto que organismo internacional encargado "de promover la libertad de expresi¨®n y la libre circulaci¨®n de las ideas", subray¨® la embajadora brasile?a, Maria Laura da Rocha.

Hoy fue el d¨ªa en el que tomaron la palabra los seis miembros hispanoamericanos del Consejo, Espa?a, M¨¦xico, Per¨², Venezuela, Ecuador y Cuba, mientras que Brasil lo hizo ayer, en el primer pleno de su 192 sesi¨®n, que concluir¨¢ el pr¨®ximo d¨ªa 11.

En relaci¨®n con el tr¨¢fico de bienes il¨ªcitos, el embajador ecuatoriano resalt¨® la importancia de "mejorar la aplicaci¨®n" de la Convenci¨®n de 1970, que se ha mantenido "inm¨®vil" durante d¨¦cadas y que "solo reuni¨® a los Estados firmantes en dos ocasiones en 40 a?os".

Mientras tanto, se calcula que si el comercio de bienes culturales en el mundo "moviliza anualmente 40.000 millones de d¨®lares (29.600 millones de euros), el il¨ªcito mueve 6.000 millones de d¨®lares (4.440 millones de euros)", explic¨®.

Su amplitud es tal que ocupa "el tercer puesto de las actividades criminales mundiales, tras el tr¨¢fico de estupefacientes y de armas", dijo a Efe el embajador de Per¨², Manuel Rodr¨ªguez Cuadros, quien pidi¨® al pleno que la Unesco impulse una "alianza mundial contra el tr¨¢fico il¨ªcito de bienes culturales".

De momento, a diferencia de lo que ocurre con otras convenciones culturales, indic¨® Pozo Malo, esta no cuenta con una estructura importante en la Secretar¨ªa (tercer ¨®rgano rector de la Unesco, junto con el Consejo y la Conferencia General), por lo que el a?o pasado se cre¨® un Comit¨¦ Subsidiario.

Nuevo organismo de gesti¨®n que tiene 18 miembros y que "hemos obtenido con el liderazgo de Per¨², M¨¦xico y Ecuador, en representaci¨®n de Am¨¦rica Latina", para que por primera vez la Convenci¨®n tenga un ¨®rgano responsable de su aplicaci¨®n", subray¨® Rodr¨ªguez Cuadros.

En la actualidad, lament¨® su colega ecuatoriano, la Convenci¨®n estipula todav¨ªa que el pa¨ªs de origen de los bienes supuestamente il¨ªcitos debe haberlos inventariado previamente y probar su propiedad.

Algo de todos modos absolutamente "imposible con las piezas arqueol¨®gicas", tan abundantes y dif¨ªciles de proteger, muchas de ellas a¨²n por descubrir y por supuesto por inventariar, pero vitales para preservar la historia, la cultura y la identidad de los pueblos, se?al¨® el diplom¨¢tico ecuatoriano.

Reforzar el programa intergubernamental de Ciencias Sociales y Humanas MOST fue el tercer tema clave abordado por algunos pa¨ªses latinos, entre ellos Ecuador, Cuba y Brasil -principal donante voluntario de la Unesco y d¨¦cimo como contribuyente regular, seg¨²n record¨® su embajadora,

Sin embargo, destac¨® Pozo Malo, la reciente propuesta de creaci¨®n de un Centro de Transformaciones Sociales y Di¨¢logo Intercultural, ir¨ªa en la direcci¨®n opuesta, al "juntar en una sola instituci¨®n esos complejos procesos sociales con un di¨¢logo relacionado con el ¨¢rea cultural y la comunicaci¨®n.

Por Mar¨ªa Luisa Gaspar