El paro y la crisis disparan el peso de la econom¨ªa sumergida en Serbia
![Obreros albano-kosovares trabajan en la construcci¨®n de un puente en Merdare (Kosovo). EFE/Archivo](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/BO33AKCNQXGGCW5NTHG2ZBZOVU.jpg?auth=0765e361a2fa5fe7d3b6ff476ca03ebad7f40175e55bb1acc0c194c02be70b42&width=414)
Con uno de cada cuatro serbios sin empleo y una crisis casi permanente desde hace 20 a?os, la econom¨ªa sumergida supone en Serbia un estimado tercio del total y constituye para muchas familias la ¨²nica opci¨®n para mantenerse a flote.
"La gente se ve obligada a trabajar en negro. No lo hacen porque les gusta, sino porque no tienen otra opci¨®n, otro trabajo, y necesitan trabajar", cuenta a Efe Sinisa, due?o de una peque?a carpinter¨ªa en Belgrado.
Obligado a cerrar hace a?os un negocio legal, Sinisa evita pagar los impuestos, no declara beneficios y ocupa a un empleado al que no tiene asegurado.
El salario medio de un serbio no alcanza los 400 euros mensuales, mientras que llegan pocas inversiones extranjeras que puedan impulsar la econom¨ªa y los sueldos.
"El poder adquisitivo es bajo. Nadie compra nada. Es decir, nadie gana nada. Uno se compra los zapatos cuando se le rompen los viejos. El mercado no existe, la producci¨®n tampoco", explica.
Como en muchos pa¨ªses en transici¨®n, la econom¨ªa sumergida supone en Serbia un obst¨¢culo para el desarrollo de las empresas y de una econom¨ªa de mercado, aunque supone un "factor de seguridad" para gran parte de la poblaci¨®n.
Una reciente investigaci¨®n de la Fundaci¨®n para el Desarrollo de la Ciencia Econ¨®mica de Serbia y del organismo estadounidense USAID, muestra que Serbia est¨¢ entre los pa¨ªses europeos con mayor econom¨ªa sumergida, con hasta un 30 por ciento de negocios ilegales.
Los sectores m¨¢s afectados son la construcci¨®n, con el 43 por ciento; la agricultura, con el 34 por ciento, y el transporte y la hosteler¨ªa, con el 33 por ciento cada uno.
Las causas, entre otras, son los elevados impuestos que cobran sobre el trabajo, tanto al empleado como al empleador, que entre los dos casi suponen el 70 por ciento del salario bruto entre aportaciones fiscales y a la seguridad social.
El trabajo en negro est¨¢ tan extendido en el pa¨ªs balc¨¢nico que apenas existe conciencia de que se est¨¦ cometiendo una infracci¨®n.
Seg¨²n los expertos, el objetivo a medio plazo de Serbia deber¨ªa ser reducir en 10 puntos porcentuales el peso de la actividad sumergida, hasta el nivel de otros pa¨ªses europeos.
Esa bajada, en un periodo de ocho o diez a?os, aportar¨ªa cada a?o unos 300 millones de euros a las arcas del Estado, equivalente al 1 por ciento del PIB.
Una meta que, sin embargo, dista mucho de lograrse, seg¨²n los datos de la Uni¨®n de Empresarios de Serbia.
Seg¨²n el presidente de esta patronal, Dragoljub Rajic, desde 2008 el comercio en tiendas legales ha bajado un 30,4 por ciento.
"Eso sucedi¨® por dos causas. Una, la ca¨ªda del poder adquisitivo de los ciudadanos; otra, que en este ambiente de pobreza, muchos empezaron a comprar en los centros de canales ilegales. Estos productos se consiguen por precios entre el 15 y 30 por ciento m¨¢s bajos", denuncia Rajic en declaraciones a Efe.
"Los ciudadanos tratan de comprar el m¨¢ximo posible de productos fuera del sistema de impuestos, con lo que hacen da?o a todos los que trabajan de forma legal", explica.
Otro problema, seg¨²n Rajic, son algunas leyes caducas y las altas cargas fiscales, "por lo que cada vez m¨¢s personas trabajan y ofrecen servicios en negro", a mitad de precio.
Seg¨²n el representante de los empresarios, el Estado serbio deber¨ªa acometer una reforma fiscal, mejorar las inspecciones y endurecer las sanciones contra los evasores.
El crecimiento de la econom¨ªa sumergida comenz¨® en Serbia en la d¨¦cada de los a?os 1990 con las guerras balc¨¢nicas, que aislaron al pa¨ªs internacionalmente y quebraron muchas antiguas empresas estatales de la ¨¦poca socialista.
"La econom¨ªa sumergida es la ¨²nica salida para muchos", asegura Sinisa, el carpintero belgradense, uno de tantos serbios que trabaja "en parte en negro, en parte en blanco".
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