De vino de segunda fila a objeto de deseo

Hubo un tiempo cuando se dec¨ªa que los vinos tintos de Toro se cortaban con un cuchillo; cuando las uvas de esa zona viajaban sin carn¨¦ y de noche para formar parte de los vinos de otras denominaciones de origen desde Rioja a Galicia, pasando por el propio Duero, para completar sus necesidades de materia prima; que, en definitiva, eran vinos de segunda fila.

Hoy todo eso ha cambiado y muy especialmente desde 1987, cuando obtuvo su reconocimiento como denominaci¨®n de origen como una apuesta del entonces ministro de Agricultura, el zamorano Carlos Romero

A partir de esa d¨¦cada, Toro se ha convertido en una de las denominaciones de origen que ha registrado un mayor crecimiento. En materia de superficies, la DO se extiende ya sobre una superficie de casi 6.000 hect¨¢reas, casi en su totalidad en la provincia de Zamora y una parte reducida en Valladolid, con un claro predominio de cepas viejas fundamentalmente de la variedad tinta de Toro

El auge de la denominaci¨®n de origen ha dado lugar a que en la actualidad ya funcionen en la misma m¨¢s de sesenta bodegas de diferente condici¨®n, tanto por su volumen de negocio como por la procedencia de los empresarios o inversores.

En la denominaci¨®n de origen hay bodegas instaladas en la zona ¡°de toda la vida¡± y que se han transformado para poder competir. En este grupo se hallan bodegas como la cooperativa Covitoro, con ense?as como Cerme?o; Bodega Fari?a, con su marca Colegiata, o Frutos Villar, con Muruve.

En un segundo grupo se encuentran los inversores extranjeros como M?et Hennessy tras la compra de la bodega Numanthia o Domaine Magrez Espagne.

La DO ha pasado de vender su uva fuera a ser la elegida por las grandes bodegas

Hay un tercer grupo de bodegas construidas o adquiridas por algunos de los grupos nacionales m¨¢s importantes instalados en el sector que no han querido dejar de tener en su oferta los caldos de esta tierra. Estos son los casos de Vega Sicilia con la bodega Pintia; F¨¦lix Sol¨ªs, a trav¨¦s de su empresa Pagos del Rey, adquiriendo la cooperativa Bajoz, que hab¨ªa sido una de las bodegas pioneras en la constituci¨®n de la denominaci¨®n de origen, o el grupo Matarromera con la bodega Cyan.

Finalmente, en la denominaci¨®n de origen se han levantado bodegas por parte de empresarios de ¨¦xito procedentes de otras actividades y que llegaron al vino, en la mayor parte de los casos, con excedentes empresariales, dinero de caja, pero sin un fondo de comercio para la actividad. Es un fen¨®meno que se ha desarrollado tambi¨¦n en la ¨²ltima d¨¦cada en otras zonas vitivin¨ªcolas de prestigio, bodegas que en la actualidad, caso de Ribera del Duero, se hallan en muchos casos en venta tras desarrollar pol¨ªticas de precios a la baja para dar salida a sus producciones con graves perjuicios para el resto de las bodegas.

En Toro hay empresarios de la zona como Queser¨ªas Chill¨®n que ya apostaron por su bodega propia. Otros, como Luis Mateos, uno de los pioneros de la denominaci¨®n, que acab¨® en manos del viejo grupo Rumasa y que, como hizo en otras denominaciones, la rebautiz¨® con el nombre de un marqu¨¦s, en este caso Marqu¨¦s de Olivara. Pero el caso m¨¢s significativo de estos desembarcos lo constituye la bodega Valbusenda, construida hace cinco a?os en Peleagonzalo. Valbusenda figura en las referencias sobre el sector como una bodega donde no se han escatimado recursos y que buscar¨ªa un sitio entre las grandes del vino. La realidad, sin embargo, es que la bodega, con una superficie propia de 15 hect¨¢reas, que compra uva producida por agricultores en otras 80 hect¨¢reas y que tiene capacidad para elaborar un mill¨®n de litros, ser¨ªa la justificaci¨®n para la construcci¨®n de un gran complejo hotelero y de turismo enol¨®gico de alto nivel.

Para la escenificaci¨®n de este proyecto se pusieron de acuerdo dos empresarios de ¨¦xito en el mundo de las plantas medicinales. Por un lado, un zamorano de Ferreras de Abajo, Sim¨®n Garc¨ªa Taboada, hijo y nieto de personajes con esa sabidur¨ªa popular para conocer y curar bas¨¢ndose en las propiedades de las mismas hierbas hasta levantar un imperio con ventas en todo el mundo y la creaci¨®n de Herbolarios Garc¨ªa Taboada o Zamodiet. El otro socio de la aventura enotur¨ªstica y en el negocio de las hierbas es F¨¦lix Revuelta, fundador y presidente de Natur House.

Las hierbas medicinales deben ser un buen negocio despu¨¦s de impuestos. En la construcci¨®n de este gran complejo tur¨ªstico, los dos empresarios no han escatimado gastos, con una inversi¨®n de m¨¢s de 25 millones de euros, de los que solo 9 fueron para la bodega.