De Madrid a Guadalajara, ?pagando?
La R-2, uno de los peajes que el Gobierno va a rescatar, fue la primera de las radiales que se abri¨® y la ¨²tima en caer Deja un agujero de 450 millones
Viernes por la tarde. Plena hora punta de salida de Madrid. Ni siquiera en estas condiciones ideales, con el fin de semana por delante, la autopista R-2, que une la capital con Guadalajara, puede presumir del te¨®rico gran potencial que se le atribuy¨® cuando fue inaugurada en 2003.
Se calcul¨® que circular¨ªan unos 21 coche por minuto pero lo hacen cuatro
Apenas circulan algunos coches y ni asomo de colas en los peajes. ¡°Esta carretera es para quien pueda permit¨ªrsela; muy poca gente pasa por aqu¨ª¡±, explica un empleado de la ¨²nica gasolinera que hay en la v¨ªa. La cafeter¨ªa que hab¨ªa al lado de la estaci¨®n de servicio tuvo que cerrar hace unos meses por falta de clientes. Tras cobrar el importe del peaje hasta Guadalajara, una trabajadora de la concesionaria, Henarsa, explica: ¡°Si la autov¨ªa A-2 est¨¢ aqu¨ª al lado, es gratuita y encima tiene tres carriles, ?qui¨¦n va a pagar para ir por la radial?¡±.
Los expertos del Ministerio de Fomento que calcularon en su d¨ªa las previsiones de tr¨¢fico para la R-2 no pensaron igual. Seg¨²n sus estimaciones, la autopista iba a absorber un 30% de los 100.000 veh¨ªculos que circulaban a diario por la A-2, la alternativa libre de peaje. Unos 21 coches por minuto. La realidad ha demostrado que sus pron¨®sticos no pod¨ªan estar m¨¢s equivocados. En 2013 utilizaron esa v¨ªa una media al d¨ªa de 5.928 usuarios, cuatro por minuto, lo que supone un descenso del 24% respecto al a?o anterior y un desplome del 46,2% respecto al m¨¢ximo de tr¨¢fico contabilizado en 2007, seg¨²n Fomento.
Tambi¨¦n fallaron los estudios de tr¨¢fico de las otras tres radiales, fraguadas durante el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar para descongestionar los accesos a Madrid. Todas han acabado solicitando el concurso de acreedores. Tambi¨¦n hay que incluir en este club a otras v¨ªas de peaje de la ¨¦poca: la autopista que une la capital con el aeropuerto de Barajas, la Madrid-Toledo, la Oca?a-la Roda, la Cartagena-Vera y la circunvalaci¨®n de Alicante. Rescatarlas costar¨¢ al Estado al menos 2.400 millones de euros, tras aplicar una quita del 50% sobre la deuda, seg¨²n la ¨²ltima propuesta del Gobierno que analizan las concesionarias y la banca.
La R-2 fue la primera radial en abrirse al tr¨¢fico y la ¨²ltima en tirar la toalla, en septiembre pasado, con una deuda financiera de 450 millones. Como el resto de peajes en quiebra, la R-2 naci¨® al calor del mayor periodo de bonanza econ¨®mica que haya conocido Espa?a. En esa ¨¦poca de vacas gordas fueron ideados muchos de los grandes proyectos de obra civil fracasados, como los aeropuertos de Ciudad Real (inversi¨®n de 450 millones), Castell¨®n (190 millones) y Murcia (200 millones).
En 2003, Aznar la calific¨® como ¡°una de las obras m¨¢s importantes¡±
El proyecto de la R-2 fue aprobado en 1997, con Rafael Arias Salgado como ministro de Fomento, y fue adjudicado por su sucesor, Francisco ?lvarez Cascos, en 2000 a Henarsa, la sociedad concesionaria que deb¨ªa construir y explotar la v¨ªa. En el momento del concurso de acreedores, estaba participada por Abertis, ACS, Acciona y Globalv¨ªa (firma concesional de FCC y Bankia). ¡°Esta es una de las obras de infraestructuras m¨¢s importantes de los ¨²ltimos a?os¡±, afirm¨® Aznar en la inauguraci¨®n en 2003. ¡°Ya no somos el viejo pa¨ªs atrasado que se queja, sino un pa¨ªs moderno y pr¨®spero¡±, proclam¨®. La inversi¨®n alcanz¨® los 563 millones para 62 kil¨®metros de peaje, con un plazo de la concesi¨®n de 24 a?os.
Dos a?os despu¨¦s ya estaba claro que las expectativas de esta autopista no iban a cumplirse. En mayo de 2005, Henarsa lleg¨® a poner en marcha una campa?a de promoci¨®n que consist¨ªa en repartir cupones entre las empresas cercanas para realizar trayectos gratis con el objetivo de que los usuarios comprobaran ¡°las ventajas¡± de circular por esta v¨ªa.
Para las previsiones de tr¨¢fico tuvo peso el crecimiento futuro de Barajas
La pol¨¦mica rodea a los estudios de previsi¨®n de tr¨¢fico de estas v¨ªas. Los expertos destacan que fueron elaborados en un momento de grandes expectativas econ¨®micas y que nadie parec¨ªa tener en cuenta la posibilidad de una crisis como la que se desencaden¨® a?os m¨¢s tarde. Para calcular la demanda futura de tr¨¢fico de la R-2 ¡°se utilizaron las proyecciones de construcci¨®n de viviendas, localizaci¨®n de poblaci¨®n y empleo de la Comunidad de Madrid¡±, explica en su tesis doctoral el ingeniero Carlos Urs¨²a, disponible en Internet, y centrada en las radiales. ¡°Es rese?able la importancia y protagonismo que el estudio de tr¨¢fico da al futuro desarrollo del sistema aeroportuario en torno a Barajas¡±, a?ade sobre la R-2. La construcci¨®n de la terminal 4 iba a ampliar considerablemente la capacidad del aeropuerto, pero el tr¨¢fico a¨¦reo tambi¨¦n se desplom¨® con la crisis.
Adem¨¢s, la idea de hacer peajes en paralelo a autov¨ªas gratuitas result¨® ser poco acertada; todas las radiales se basan en esa filosof¨ªa y, menos en momentos de vacaciones con mucho tr¨¢fico, los conductores han optado por circular gratis aunque el tr¨¢fico sea m¨¢s denso. ¡°Casi nunca usamos la R-2, solo algunos fines de semana para salir de Madrid, pero a la vuelta el domingo iremos por la A-2 porque no vale la pena pagar el peaje¡±, cuenta una pareja que ha parado para poner gasolina en la estaci¨®n de servicio.
Las expropiaciones deb¨ªan sumar unos 40 millones y al final costaron 430
Con el paso de los a?os, las cuentas de la concesionaria Henarsa se han ido hundiendo poco a poco ¡ªperdi¨® 16 millones de euros en 2012, ¨²ltimo ejercicio depositado en el registro mercantil¡ª, ante la falta de ingresos por peajes y otro coste inesperado: el de las expropiaciones. En la R-2 la partida para este fin estaba prevista en 40 millones pero ascendi¨® a 430. Se expropi¨® a tres euros el metro, pero luego las compensaciones se dispararon porque los jueces valoraron el terreno r¨²stico como urbanizable: la ley del suelo en vigor, la misma que alent¨® la burbuja inmobiliaria, permit¨ªa incluir las expectativas de revalorizaci¨®n en el valor del bien, lo que provoc¨® que se disparara.
En el total de las autopistas de peaje en crisis, el coste de las expropiaciones se calcula entre 1.200 y 1.800 millones.
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