Agricultura reduce el plazo m¨ªnimo de arrendamientos de cinco a dos a?os
La nueva norma para el suelo r¨²stico buscar¨¢ incrementar el tama?o de las explotaciones
El Gobierno prepara cambios en la Ley de Arrendamientos R¨²sticos. Quiere que haya m¨¢s movilidad en la tierra, y para ello el Ministerio de Agricultura un cambio en la norma que permita arrendamientos con un plazo m¨ªnimo de dos a?os. La ley actual data de 2005, del primer Gobierno de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y modificaba una norma aprobada apenas dos a?os antes, durante el final de los Ejecutivos de Aznar. Seg¨²n la norma vigente, los arrendamientos r¨²sticos deben tener un periodo m¨ªnimo de cinco a?os ¡ªtodo contrato por debajo de ese tiempo es nulo¡ª y puede prolongarse con pr¨®rrogas de otros cinco a?os, salvo que un a?o antes de finalizar el periodo, el arrendador avise de que finaliza el contrato.
Con la reforma se prev¨¦ rebajar ese periodo de cinco a otro que podr¨ªa ser de solo dos a?os para ofrecer m¨¢s seguridad al arrendador de que no va disponer de su tierra durante un periodo largo. Sin embargo, se contempla la libertad de pacto para que ambas partes puedan negociar y acordar cualquier otro periodo m¨¢s amplio para la duraci¨®n del contrato con el fin de garantizar y amortizar las inversiones que pueda hacer el arrendatario en medios de producci¨®n.
Adem¨¢s de aumentar la movilidad de las explotaciones, el objetivo de la reforma tambi¨¦n es dar seguridad jur¨ªdica tanto a los arrendadores como a los arrendatarios. Al mismo tiempo, el departamento de Miguel Arias Ca?ete busca incrementar el tama?o de las explotaciones para mejorar su eficiencia, productividad y competitividad. Por ¨²ltimo, tambi¨¦n se trata de adaptar la norma a las exigencias de la reforma de la Pol¨ªtica Agr¨ªcola Com¨²n y para la aplicaci¨®n de la pol¨ªtica de desarrollo rural.
Hoy no pueden ser arrendatarios de fincas r¨²sticas quienes por persona f¨ªsica o jur¨ªdica interpuesta sean ya titulares de una o de varias explotaciones agrarias que superen las 50 hect¨¢reas en regad¨ªo, las 500 en secano y las 1.000 hect¨¢reas si se trata de superficies de pastos. Cada Comunidad Aut¨®noma puede fijar otros techos, pero siempre inferiores a los marcados por la ley. En el caso de las cooperativas, esos l¨ªmites se multiplicar¨ªan por cada uno de los socios. La nueva disposici¨®n abordar¨¢ el establecimiento de este tipo de topes de superficie para lograr explotaciones de mayor tama?o. Otro de los puntos en la agenda ser¨¢ el arrendamiento de tierras por ciudadanos o grupos extranjeros.
La pol¨ªtica de los arrendamientos es una pieza clave en la pol¨ªtica agraria por las tierras y las personas implicadas. No hay datos oficiales al respecto, aunque actualmente, se estima que sobre una superficie de cultivo de unos 26 millones de hect¨¢reas, al menos, una tercera parte son tierras que se hallan arrendadas bajo diferentes tipos de contratos.
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