La carrera por el Magreb m¨¢s prometedor
Marruecos presume de estabilidad mientras Argelia tiene todo por hacer y T¨²nez impulsa la apertura al exterior
Las recientes elecciones generales y presidenciales en T¨²nez, que en menos de un a?o ha cumplido con todos los tr¨¢mites constitucionales, legales y con las urnas para perfilarse como la start-up de las democracias nacidas tras la primavera ¨¢rabe, han situado de nuevo en el mapa de los negocios al Magreb. La cartograf¨ªa dibuja una regi¨®n enorme, llena de particularidades, oportunidades... Pero tambi¨¦n retos y problemas.
El Magreb es un ¨¢rea regional emergente, con un mercado potencial de unos 85 millones de personas, pero casi incomunicado entre s¨ª. El comercio entre Marruecos, T¨²nez y Argelia apenas alcanza el 4%. Las fronteras f¨ªsicas y pol¨ªticas est¨¢n cerradas, sobre todo entre los dos grandes vecinos, y esos recelos y su consiguiente proteccionismo en los sectores estrat¨¦gicos perjudican su desarrollo econ¨®mico. El Magreb mira sobre todo hacia Europa para sus exportaciones e importaciones y para diversificar su potencial, y Espa?a, el vecino m¨¢s pr¨®ximo, tiene mucho trecho por explorar.
En T¨²nez, por ejemplo, con apenas 12 millones de habitantes y pocos recursos naturales, los tres a?os transcurridos desde que comenz¨® este proceso democr¨¢tico han producido mucha desesperanza. El paro se ha situado en torno al 10% (el triple entre los j¨®venes) y los m¨¢s formados tienen la tentaci¨®n, como sucede tambi¨¦n en Marruecos y Argelia, de la emigraci¨®n. El anterior gobierno, formado por una troika heterog¨¦nea de partidos, con los islamistas de Ennahda siempre vigilantes, se ha ocupado sobre todo de asentar las instituciones b¨¢sicas. Y en la calle la gente se queja de que las ciudades y las m¨ªticas playas tunecinas est¨¢n muy sucias porque no se sabe gestionar su limpieza.
El lema de la nueva sensaci¨®n pol¨ªtica tunecina, Beji Caid Essebsi, el l¨ªder de Nida Tounes, ha sido tan simple como efectivo: que el Estado se modernice y funcione. Y abrirse y cooperar m¨¢s con Europa. Josep Perpinya, el responsable del Grupo Romero y de la firma de consignaci¨®n mar¨ªtima y log¨ªstica Green Tunisie, que lleva 18 a?os en el pa¨ªs, emplea a 130 personas y tiene en proyecto su quinta empresa, incide en la necesidad de la apertura a la inversi¨®n extranjera y de la liberalizaci¨®n tras la indispensable etapa cubierta de la estabilidad pol¨ªtica: ¡°T¨²nez es un pa¨ªs emergente que merece la pena, con mano de obra barata y muy cualificada, pero todav¨ªa con una Administraci¨®n muy proteccionista y un claro problema de conexiones log¨ªsticas¡±.
Los tres pa¨ªses son un amplio mercado pero con muchas trabas pol¨ªticas
Los programas electorales, en el furor de la posrevoluci¨®n, han prometido de todo pero a¨²n no se sabe qu¨¦ gobierno se podr¨¢ conformar y ni siquiera cu¨¢ndo empezar¨¢ a funcionar. Mientras tanto, el anterior Ejecutivo acaba de modificar una ley que permite a las empresas extranjeras (de Espa?a apenas hay asentadas 70) aumentar su participaci¨®n en la propiedad hasta el 60%.
El tema de la propiedad es el gran caballo de batalla de las empresas extranjeras cuando se quieren meter en Argelia. Una disputa permanente. ¡°El Estado argelino es mucho m¨¢s proteccionista a¨²n que el tunecino y menos abierto¡±, se?alan expertos y economistas en Argel. Pero Argelia s¨ª es una potencia enorme en un ¨¢mbito concreto, con enormes recursos en hidrocarburos. Y ese caramelo es su salvaci¨®n y tambi¨¦n muchas veces su perdici¨®n. ¡°El pa¨ªs tiene una dependencia casi total del petr¨®leo y el gas y ante la ca¨ªda del precio y el freno en la capacidad de producci¨®n de los yacimientos existentes se est¨¢ entrando en una zona oscura¡±, concluyen los analistas.
Argelia, que es cinco veces Espa?a y tiene 38 millones de habitantes ¡ªaunque un 80% del territorio es desierto¡ª, sobrevive gracias al petr¨®leo. Las exportaciones de hidrocarburos son casi el 98% del total, los ingresos en ese sector son el 80% del presupuesto y el 33% del PIB. La tasa de cobertura del pa¨ªs (diferencia entre exportaciones e importaciones) est¨¢ rozando el equilibrio y el fondo de reserva se calcula que aguantar¨¢ tres a?os para preservar la aparente paz social instaurada por el r¨¦gimen de Buteflika. El sector p¨²blico supone en Argelia el 52% y es el gran foco de atracci¨®n para cualquier inversor porque pretende poner en marcha, por ejemplo, un plan quinquenal de 2,5 millones de viviendas (37.000 millones de euros) y otro de infraestructuras (115.000 millones). Unas 70 empresas espa?olas han acudido a ese arriesgado panal. Las visitas de ministros espa?oles son frecuentes para mediar en m¨²ltiples conflictos. Por el plan de vivienda se interesaron una veintena de firmas espa?olas y al final solo ha quedado una, Ortiz. Otras, como OHL y FCC, est¨¢n hace a?os en los tribunales de arbitraje ante el impago de facturas de hasta 400 millones de euros por distintas obras.
Para evitar esa inseguridad jur¨ªdica, esa inestabilidad y burocracia es por lo que muchas compa?¨ªas espa?olas miran cada vez m¨¢s a Marruecos. El pa¨ªs presume de eso, en comparaci¨®n con sus vecinos. Hay un sistema pol¨ªtico y administrativo que funciona hace a?os, reglado, con tribunales y leyes que en teor¨ªa dejan poco margen para la improvisaci¨®n. Hay m¨¢s de 300 filiales de firmas espa?olas que han hecho el viaje (el primer destino en el mundo) y van en aumento. Es ya el tercer mercado de exportaci¨®n espa?ol tras la UE y EE?UU.
Los sectores atractivos abarcan todos los ¨¢mbitos, desde el agr¨ªcola al equipamiento automovil¨ªstico y textil, pero est¨¢ cada vez m¨¢s pujante el de las energ¨ªas renovables. Marruecos no ha encontrado a¨²n petr¨®leo y busca reducir su dependencia energ¨¦tica con renovables hasta alcanzar un 28% en 2020. Multinacionales como Abengoa, Acciona y Sener son ya socios fiables y con experiencia.
Abengoa, que lleva 30 a?os en el pa¨ªs y tiene unos 600 empleados, se ha infiltrado en todo el abanico de posibilidades de la energ¨ªa, el agua y el medio ambiente. Mont¨® en su d¨ªa con ¨¦xito la supercentral termosolar de ciclo combinado de Ain Ben Mathar (470 MW) y ahora planea una gran desaladora en Agadir.
Germ¨¢n Bejarano, adjunto al presidente de Abengoa, explica las razones: ¡°Marruecos es un mercado serio, con un capital humano desarrollado, ingenieros formados en Francia, Estados Unidos o Espa?a, y con una contrataci¨®n p¨²blica que se ha sofisticado en sus necesidades y demandas en infraestructuras, que cumple los contratos al pie de la letra, y donde se opera con total seguridad jur¨ªdica y buena base legal¡±.
Esa es la versi¨®n oficial. En privado, una treintena de empresarios del club Averroes y de otro grupo instalado en el norte del pa¨ªs reclamaron hace pocas semanas en una cena al embajador de Espa?a su mediaci¨®n para evitar las recurrentes trabas burocr¨¢ticas del Gobierno de Rabat.
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