El aumento del gasto p¨²blico da alas al avance del PIB en el inicio del a?o

La simbiosis de consumo privado y mejora del empleo sigui¨® dando fruto en el arranque del a?o. La inversi¨®n de las empresas para aumentar su capacidad productiva, ante la mejora de las condiciones financieras y de las perspectivas econ¨®micas, mantuvo el ritmo de avance con el que acab¨® 2014. Los datos de la construcci¨®n confirman que se recupera, aunque sea desde niveles ¨ªnfimos. Pero lo que marc¨® la diferencia para que el crecimiento trimestral del PIB alcanzara el 0,9%, como ha confirmado este mi¨¦rcoles el Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), fue el gasto p¨²blico.

El consumo de las Administraciones (medici¨®n de la contabilidad nacional que incluye gastos corrientes y salarios pagados) peg¨® un estir¨®n entre enero y marzo, justo en la antesala de la primera cita electoral del a?o, los comicios auton¨®micos y municipales del 24 de mayo. El avance sobre el trimestre anterior fue del 1,6%, un crecimiento del gasto que el INE no registra desde el arranque de 2008, cuando la crisis a¨²n apenas hab¨ªa dado la cara (y se celebraron otras elecciones, en este caso generales).

El primer dato sobre el gasto p¨²blico corriente, que explica cerca del 20% de la demanda interna espa?ola, confirma as¨ª la intuici¨®n de los analistas: sus previsiones, m¨¢s optimistas, guardan el as bajo la manga de un a?o plagado de citas electorales, lo que en Espa?a suele traducirse en una expansi¨®n del gasto de las Administraciones. En el dato del arranque de este a?o influye la recuperaci¨®n parcial de la paga extra de los funcionarios, pero el horizonte de m¨¢s comicios (catalanas y generales) despu¨¦s del verano hace m¨¢s probable que el control sobre el gasto ejercido en los ¨²ltimos a?os siga relaj¨¢ndose.

De confirmarse, el aumento del gasto p¨²blico puede comprometer el objetivo de reducci¨®n del d¨¦ficit (del 5,6% al 4,2% del PIB), aunque el Gobierno cuenta con que la expansi¨®n de los ingresos asociada a la recuperaci¨®n permita alcanzar la meta. Por lo pronto, en el primer trimestre el d¨¦ficit p¨²blico no baj¨®.

Fuentes de Econom¨ªa se?alan?que "sin conocer la composici¨®n del gasto p¨²blico en el primer trimestre del a?o (la publicar¨¢ Hacienda a finales de junio), no puede hablarse ni de un cambio de tendencia en el consumo p¨²blico ni de relajaci¨®n en el proceso de consolidaci¨®n fiscal"..

Adem¨¢s de confirmar el dato trimestral, el INE elev¨® algo (del 2,6% al 2,7%) su primera estimaci¨®n del crecimiento anual. El avance del PIB en el arranque del a?o sustenta las nuevas previsiones del Gobierno, que elev¨® su pron¨®stico sobre el crecimiento para 2015 hasta el 2,9%. Y los primeros indicadores del segundo trimestre, recopilados por el Banco de Espa?a, apuntan a que el ritmo de crecimiento se mantiene o incluso aumenta, lo que ha llevado a algunos analistas a hacer un vaticinio algo m¨¢s optimista incluso.

Los datos del INE corroboran tambi¨¦n que las bases en las que se apoya el crecimiento econ¨®mico del ¨²ltimo a?o y medio siguen ah¨ª: el consumo privado crece a buen ritmo (0,7%) aunque algo menos que en la segunda mitad de 2014) y tambi¨¦n mantiene el acelerador apretado la inversi¨®n (1,5% en tasa trimestral). El sector exterior vuelve a restar, pero algo menos, gracias al destacado comportamiento de la venta al exterior de servicios (m¨¢s del 9% trimestral) que no de las mercanc¨ªas (un 2,3% menos en la estimaci¨®n de la contabilidad nacional, pese a la mejora en marzo).

En la comparaci¨®n anual, el empleo aumenta (2,8%) a¨²n m¨¢s que el producto, lo que implica un m¨ªnimo descenso de la productividad. El coste laboral por asalariado registra un ligero repunte (hasta el 1% en tasa anual), pero aqu¨ª vuelve a influir la recuperaci¨®n parcial de la extra de los funcionarios.