China reestructurar¨¢ el gigantesco sector de la empresa p¨²blica
El Gobierno chino presenta un plan para privatizar parcialmente unas compa?¨ªas que emplean a 30 millones de personas y combinan activos de 14 billones de euros
China ha desvelado su esperado plan para la privatizaci¨®n -parcial- de sus empresas p¨²blicas. La reforma de este sector, que emplea a cerca de 30 millones de personas y acumula activos por valor de unos 100 billones de yuanes (unos 14 billones de euros), estaba prometida desde hace al menos dos a?os y es, seg¨²n los analistas, una de las m¨¢s necesarias para permitir la transici¨®n de la econom¨ªa china a un modelo sostenible.
El plan de reforma llega en momentos en los que la econom¨ªa china, la segunda del mundo, da se?ales de debilidad y el Gobierno de Xi Jinping se esfuerza por reactivar unos indicadores que, desde la actividad industrial a las exportaciones, muestran tendencia a la baja. El objetivo de crecimiento para este a?o se sit¨²a en torno al 7%, despu¨¦s de que el a?o pasado alcanzara el 7,4%, el m¨¢s bajo en dos d¨¦cadas. Las dudas sobre la fortaleza econ¨®mica del pa¨ªs precipitaron este agosto fuertes sacudidas en las Bolsas de todo el mundo, donde aun ahora persiste la incertidumbre.
El documento de 20 p¨¢ginas ofrece m¨¢s una gu¨ªa, o una declaraci¨®n de intenciones, que un listado de medidas concretas. Sus objetivos, seg¨²n ha apuntado Zhang Xiwu, vicepresidente de la Comisi¨®n para la Supervisi¨®n de Activos Estatales (SASAC, la SEPI china), son permitir la propiedad mixta de estas compa?¨ªas para facilitar que se conviertan en ¡°entidades competitivas¡±. Pero la agencia estatal de noticias Xinhua precisa que continuar¨¢ en todo caso el control del gobierno. El fin de la reforma, asegura, es ¡°cultivar un gran n¨²mero de empresas con un pilar estatal que cuenten con capacidad de innovaci¨®n y puedan competir internacionalmente¡±.
Es una tarea complicada. En todo el pa¨ªs existen unas 155.000 empresas de propiedad p¨²blica, aunque la mayor¨ªa dependen de los gobiernos locales. SASAC controla 110, las mayores e implantadas en r¨¦gimen de monopolio o cuasi monopolio en sectores que el Gobierno considera estrat¨¦gicos, desde la banca al petrolero, pasando por las telecomunicaciones y la producci¨®n de acero. Entre ellas se encuentran gigantes como China Mobile, la mayor empresa telef¨®nica por n¨²mero de suscriptores del mundo, el Banco de China o Air China, la compa?¨ªa a¨¦rea de bandera.
Desde su posici¨®n de dominio en el mercado, han disfrutado de un trato privilegiado, que ha incluido tanto pol¨ªticas oficiales favorables como subsidios y muchas mayores facilidades a la hora de recibir pr¨¦stamos ¡ªlos grandes bancos chinos son tambi¨¦n compa?¨ªas estatales¡ª con respecto a las empresas privadas. Esto les ha convertido en muchos casos en gigantes burocr¨¢ticos e ineficaces.
Su reforma era algo que estaba anunciado desde 2013, cuando el r¨¦gimen chino acord¨® una serie de medidas para facilitar la transici¨®n a un modelo econ¨®mico m¨¢s orientado hacia el mercado, aunque siempre bajo el control del r¨¦gimen.
Entre los principios que ofrece el plan se encuentra la promesa de que se facilitar¨¢ la entrada parcial de una gama de inversores privados, mediante la compra o intercambio de acciones o la venta de activos en los mercados de capital. Tambi¨¦n se permitir¨¢ a las compa?¨ªas p¨²blicas ¡°experimentar con la venta de acciones a sus empleados¡±.
Se intentar¨¢ profesionalizar la gesti¨®n de estas firmas, con la contrataci¨®n de directivos especializados y la introducci¨®n de un sistema de retribuciones salariales flexible seg¨²n los resultados que obtenga la empresa. Sus consejos de administraci¨®n tendr¨¢n m¨¢s capacidad para tomar decisiones y se aumentar¨¢ el escrutinio para evitar la apropiaci¨®n de fondos p¨²blicos.
Continuar¨¢ asimismo un proceso que ya ha comenzado a alentarse desde el Gobierno, la fusi¨®n de estas compa?¨ªas. Este a?o ya se hab¨ªan unido los dos principales fabricantes de trenes de alta velocidad y, seg¨²n Xinhua, ¡°se espera que los gigantes estatales administrados por SASAC acometan procesos masivos de fusiones y compras¡±, aunque el plan no aporta detalles al respecto.
Seg¨²n el documento, durante el proceso las compa?¨ªas p¨²blicas se dividir¨¢n en dos clases, entidades con fines comerciales y firmas dedicadas a fines sociales. El petr¨®leo, gas, electricidad, ferrocarriles y telecomunicaciones han quedado designados como sectores adecuados para la inversi¨®n privada de manera parcial.
El plan del Consejo de Estado (el Ejecutivo chino) y el Comit¨¦ Central del Partido Comunista no establece un calendario, m¨¢s all¨¢ de asegurar que para 2020 se habr¨¢n logrado reformas clave. Pese a que sus objetivos no son especialmente dr¨¢sticos, tendr¨¢ que avanzar con enorme cuidado. Dado el peso de estas compa?¨ªas en la econom¨ªa y el empleo del pa¨ªs, un fracaso en la reforma podr¨ªa tener enormes consecuencias pol¨ªticas y en la calle. Y ese mismo peso las convierte en gigantescos lobbys dispuestas a emplear sus excelentes conexiones en los c¨ªrculos de poder en contra de cualquier cambio que pueda restarles influencia.
El profesor Hu Xingdou, del Instituto de Tecnolog¨ªa de Pek¨ªn, advert¨ªa que en el ¨¢mbito de las reformas ¡°hemos visto mucho ruido y pocas nueces hasta ahora, no hemos visto efectos reales. Al contrario, las empresas estatales se est¨¢n fortaleciendo cada vez m¨¢s mediante las fusiones. Si esta situaci¨®n sigue, la econom¨ªa china ir¨¢ empeorando y las reformas apenas conseguir¨¢n efectos¡±.
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