Volkswagen amenaza a Alemania
El esc¨¢ndalo de las emisiones ataca no solo a la mayor empresa alemana, sino que tambi¨¦n supone un riesgo para todo el pa¨ªs, muy dependiente del autom¨®vil. Wolfsburgo, alma de la compa?¨ªa, observa preocupada los acontecimientos
Cuando a los seis a?os viaj¨® por primera vez a Par¨ªs, Gabriele Paschek pregunt¨® a sus padres por qu¨¦ all¨ª los coches eran tan antiguos y feos. En su ciudad, ella solo ve¨ªa modelos nuevos. Y todos de la misma marca. Paschek es de Wolfsburgo, el lugar donde naci¨® Volkswagen y donde, se mire por donde se mire, todo recuerda a lo mismo. Nada m¨¢s llegar a la estaci¨®n de tren, aparecen la V y la W que decoran la gigantesca f¨¢brica de autom¨®viles. En esta ciudad de 122.000 habitantes, 60.000 personas trabajan Volkswagen. Aqu¨ª se vive con especial preocupaci¨®n el esc¨¢ndalo de la empresa que hasta la semana pasada era sin¨®nimo de la tecnolog¨ªa, el buen hacer y la seriedad de los alemanes.
"El Gobierno est¨¢ con Volkswagen. Es una parte fant¨¢stica de Alemania". Probablemente la canciller Angela Merkel no suscribir¨ªa hoy estas palabras que pronunci¨® en Wolfsburgo en 2008 frente a 20.000 empleados de la compa?¨ªa. Entonces no pod¨ªa sospechar que la empresa pasar¨ªa en pocos meses de conquistar la corona mundial de ventas ¡ªsuper¨® a su rival Toyota en el primer semestre de este a?o¡ª a una crisis descomunal que le expone a la humillaci¨®n, el descr¨¦dito y unas sanciones que prometen ser millonarias.
Un escarabajo de 1949 preside la entrada del sindicato IG Metall. Es el mayor de Alemania, con m¨¢s de 86.000 afiliados en Wolfsburgo, ciudad fundada en 1938 por el r¨¦gimen nazi para alimentar la producci¨®n de autom¨®viles. El l¨ªder del sindicato, Hartwig Erb, fuma un cigarro con cara de preocupaci¨®n en un peque?o recinto antihumos del edificio. "Es incre¨ªble lo que est¨¢ en juego. Es incre¨ªble", dice a modo de saludo.
Esta crisis puede da?ar m¨¢s a la econom¨ªa que la de Grecia, seg¨²n ING
Su biograf¨ªa es muy parecida a la de tantos otros por aqu¨ª. Antes de dar el salto al mundo sindical, trabaj¨® dos d¨¦cadas para la planta de automoci¨®n, al igual que dos hijos suyos. Algunos de los nuevos contratados siguen los pasos de sus padres, abuelos y bisabuelos. Cuatro generaciones dedicadas a los coches. "Aqu¨ª todos nos identificamos no solo con la empresa, tambi¨¦n con el producto. La decepci¨®n es enorme", explica el sindicalista.
"Wolfsburgo es Volkswagen y Volkswagen es Wolfsburgo", repiten muchos de los consultados. Pero si la primera parte de esta ecuaci¨®n es ajustada, la segunda no tanto. Porque que el gigante que emplea a 600.000 personas y que tiene 119 plantas en cuatro continentes excede con mucho el ¨¢mbito de esta peque?a localidad.
La empresa emplea a 60.000 personas en una ciudad de 122.000 habitantes
'German engineering'
Volkswagen y Alemania han funcionado durante a?os casi como sin¨®nimos. "Isn't it time for German engineering?" ("?No es la hora de la ingenier¨ªa alemana?"), preguntaba la empresa en un anuncio emitido en EE UU en el que se repet¨ªa machaconamente la palabra "alem¨¢n". Y el Gobierno se enorgullec¨ªa de la compa?¨ªa que Merkel consideraba "una parte fant¨¢stica" de su pa¨ªs. Esta identificaci¨®n mutua puede resultar muy da?ina para el pa¨ªs que en los ¨²ltimos a?os, ya sea con la crisis griega o la de los refugiados, se ha presentado como el adalid del respeto a las normas, a la ortodoxia y a los valores comunes.
En Alemania, uno de cada siete puestos de trabajo depende directa o indirectamente de la automoci¨®n. Y de las cuatro mayores empresas, tres son de autom¨®viles. Volkswagen, BMW y Daimler facturaron el a?o pasado m¨¢s de 400.000 millones de euros. El pa¨ªs debe su bienestar al tubo de escape. "Tenemos que preocuparnos de que todo esto no desencadene en un debate sobre la industria de la automoci¨®n o sobre toda la econom¨ªa alemana", dijo el mi¨¦rcoles el ministro de Econom¨ªa y l¨ªder socialdem¨®crata, Sigmar Gabriel.
Pero estas palabras pueden llegar tarde. La Bolsa se ha ensa?ado con Volkswagen, que esta semana se dej¨® un 34%, pero tambi¨¦n con las otras dos grandes, con p¨¦rdidas cercanas al 9%. "Si las ventas caen, el impacto se notar¨¢ en todo el pa¨ªs. De repente, Volkswagen se ha convertido en un riesgo para la econom¨ªa alemana mayor que la crisis griega", se?al¨® a Reuters el analista jefe de ING, Carsten Brzeski.
"Esto es una cat¨¢strofe para las empresas del sector. Pero el problema es m¨¢s grande. Estamos ante la punta del iceberg. El Gobierno tiene una responsabilidad porque, pese a todas las evidencias, no tom¨® ninguna medida para evitar las manipulaciones. Simplemente, dej¨® hacer a la industria", asegura Oliver Krischer, el diputado de Los Verdes que esta semana despert¨® la ira del ministro de Transportes cuando le acus¨® de conocer con antelaci¨®n el mecanismo con el que Volkswagen enga?aba.
Mientras, en Wolfsburgo muchos prefieren no creer a los m¨¢s catastrofistas. En una tienda de bebidas cercana a la factor¨ªa, unos empleados comentan que, si la empresa lo necesita, est¨¢n dispuestos a hacer sacrificios. Recuerdan que le deben a Volkswagen casi todo lo que tienen. Y que deben estar agradecidos.
Seat tendr¨¢ que devolver las ayudas por eficiencia
El ministro de Industria, Energ¨ªa y Turismo, Jos¨¦ Manuel Soria, anunci¨® ayer en Las Palmas de Gran Canaria que el Gobierno exigir¨¢ a Seat que devuelva las ayudas recibidas en concepto de veh¨ªculo eficiente de aquellos autom¨®viles vendidos y afectados por el fraude en las emisiones contaminantes.
Soria se?al¨® que el Ministerio est¨¢ a la espera de que la compa?¨ªa automovil¨ªstica les indique el n¨²mero de veh¨ªculos fabricados y vendidos, tanto dentro como fuera de Espa?a, a los que se les hayan manipulado los datos de emisiones de sus motores.
Asimismo, ha indicado que el grupo Volkswagen le ha asegurado que mantendr¨¢ las inversiones previstas en Espa?a de 3.000 millones de euros anunciadas recientemente, y que el fraude en las emisiones contaminantes no afectar¨¢ ni a la actividad ni al empleo.
El director de la Agencia Tributaria, Santiago Men¨¦ndez, ya se?al¨® este viernes que estudiar¨¢ si tiene que reclamar por el Impuesto de Matriculaci¨®n en el caso Volkswagen, ya que los modelos que emiten menos de 120 gramos de di¨®xido de carbono (CO2) por kil¨®metro est¨¢n exentos de pagar este tributo en Espa?a.
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