Furor por los pr¨¦stamos del lado oscuro
El sistema financiero paralelo come terreno a las entidades tradicionales Esta industria ofrece nuevas opciones de cr¨¦dito, pero puede generar una nueva crisis
Un dicho popular dice que si parece un pato, nada como un pato y grazna como un pato, entonces es un pato. Pero ?y qu¨¦ hay de una entidad que parece un banco y act¨²a como tal? Pues que en muchas ocasiones no es un banco, sino un banco en la sombra. Este sistema crediticio paralelo ha crecido a una velocidad de v¨¦rtigo en el ¨²ltimo lustro y equivale ya al 12% de todos los activos financieros que hay en el mundo. El shadow banking, como se conoce en ingl¨¦s a esta industria, ofrece nuevas v¨ªas de financiaci¨®n a las empresas y alternativas de ahorro a los inversores, pero su imparable crecimiento y el hecho de que su modelo de negocio escape a la supervisi¨®n ha encendido las alarmas por el riesgo sist¨¦mico que lleva aparejado. Una bomba de relojer¨ªa que, de estallar, podr¨ªa tener un efecto tan devastador como la crisis financiera de 2007.
El primer problema para entender el desaf¨ªo que plantea la banca en la sombra surge en su definici¨®n. ?Qu¨¦ es y qu¨¦ no es shadow banking? ¡°Existe una discusi¨®n importante sobre su definici¨®n y, por tanto, los tipos de actividad que incluye. Esto no es algo balad¨ª, ya que una definici¨®n m¨¢s amplia que otra implica diferencias sustanciales en relaci¨®n con el tama?o del problema¡±, reconoce Javier M¨¦ndez Llera, secretario general del Instituto Espa?ol de Analistas Financieros (IEAF).
El Financial Stability Board (FSB), organismo fundado en 2009 para promover la estabilidad financiera internacional, define esta industria como aquel ¡°sistema de intermediaci¨®n crediticia conformado por entidades y actividades que est¨¢n fuera del sistema bancario tradicional¡±. De acuerdo con este concepto ¡ªque incluir¨ªa fondos del mercado monetario, hedge funds, plataformas de crowdfunding, pr¨¦stamos personales, productos titulizados o acuerdos de recompra (repos)¡ª, los activos en poder de la banca en la sombra al cierre de 2014, ¨²ltimos datos disponibles, suman 36 billones de d¨®lares, cantidad que equivale al 59% del PIB de los 26 pa¨ªses que aportan datos al FSB.
Sin embargo, la ingenier¨ªa financiera avanza tan r¨¢pido que el per¨ªmetro de las actividades que engloba el shadow banking es complejo y cambiante en el tiempo. Por este motivo, el FSB tiene una segunda definici¨®n m¨¢s amplia de esta industria, que incluir¨ªa a los fondos de pensiones, aseguradoras y otras instituciones financieras como el capital riesgo, y seg¨²n la cual el tama?o alcanzar¨ªa 137 billones de d¨®lares.
En el periodo comprendido entre 2011 y 2014, los activos financieros en manos de la banca en la sombra crecieron a una tasa anual media del 6,3%, mientras que el tama?o del balance de la banca convencional solo lo hizo a un ritmo del 5,6%. ¡°Los motivos del auge del shadow banking son varios, pero hay uno que quiz¨¢s predomine, y es aprovechar las ventajas regulatorias frente a los intermediarios bancarios¡±, apunta Joaqu¨ªn Maudos, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad de Valencia. Los bancos convencionales est¨¢n sometidos a una regulaci¨®n m¨¢s estricta en t¨¦rminos de solvencia y liquidez, y hay instituciones no bancarias que se aprovechan de esa ventaja para ofrecer pr¨¦stamos en mejores condiciones y ocupar un espacio donde los bancos no pueden llegar. ¡°Pero hay m¨¢s motivos para su crecimiento, como el aumento del volumen de los fondos de inversi¨®n en una coyuntura en la que han ca¨ªdo mucho los tipos de inter¨¦s y los inversores buscan alternativas a los dep¨®sitos bancarios¡±, a?ade Maudos.
Una historia conocida
El crecimiento del shadow banking no es un fen¨®meno nuevo. De hecho, uno de los factores que desencadenaron la crisis financiera fue la creaci¨®n de un sistema parabancario, muchas veces promovido por las propias entidades tradicionales, donde la titulizaci¨®n de las hipotecas basura fue el principal exponente. ¡°El crecimiento de la banca en la sombra no viene del ¨²ltimo lustro, se remonta a mucho antes. La crisis de 2007 se inici¨® por el enorme volumen que adquiri¨® esta industria en EE UU y en Europa a trav¨¦s de los veh¨ªculos de inversi¨®n especial o conduits, que son los que hicieron quebrar la banca a ambos lados del Atl¨¢ntico¡±, recuerda Juan Ignacio Crespo, estad¨ªstico del Estado.
El t¨¦rmino de ¡°banca en la sombra¡± fue acu?ado por el economista Paul McCulley en un discurso que dio en 2007 en el simposio financiero anual celebrado en Jackson Hole (Wyoming, EE UU).La diferencia entre el panorama actual y el que hab¨ªa hace nueve a?os es que la cuota de mercado de este sistema crediticio paralelo es mucho mayor debido a los avances en la ingenier¨ªa financiera, a la presi¨®n normativa sobre las entidades tradicionales y a la incorporaci¨®n de nuevos actores al negocio crediticio.
El 88% de los activos de la banca en la sombra est¨¢n en poder de entidades radicadas en econom¨ªas desarrolladas. Sin embargo, el peso de los pa¨ªses emergentes en esta actividad se ha multiplicado por dos en solo cuatro a?os. El fort¨ªsimo aumento de la actividad bancaria paralela en China ¡ªsupone ya el 8% del shadow banking mundial¡ª es algo que se advierte como un posible factor desestabilizador. Empieza a ser habitual que gigantes empresariales chinos como Alibaba levanten enormes fondos, ofreciendo a los ahorradores tipos de inter¨¦s que los dep¨®sitos bancarios no pueden igualar. Con este dinero Alibaba financia a su vez proyectos propios o de terceros. ¡°El sistema financiero se caracteriza por la innovaci¨®n tanto en instrumentos como instituciones. El problema es que no siempre este proceso de innovaci¨®n obedece al deseo de mejorar el binomio rentabilidad/riesgo para el inversor, sino que, en no pocos casos, la ¨²nica motivaci¨®n es el arbitraje regulatorio¡±, advierte Jos¨¦ Mar¨ªa Rold¨¢n, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Banca (AEB). ¡°En la medida en que la normativa bancaria se ha endurecido de forma m¨¢s que considerable en los ¨²ltimos tiempos, el riesgo de cr¨¦dito habr¨¢ tendido a desplazarse hacia las ¨¢reas donde los peligros se regulan de forma m¨¢s laxa¡±, a?ade Rold¨¢n.
Las entidades que operan fuera del sistema financiero ordinario se caracterizan por unos patrones de comportamiento comunes. En primer lugar, realizan una transformaci¨®n de vencimientos, es decir, obtienen fondos a corto plazo para invertir en activos a largo plazo. Otro rasgo com¨²n es su elevado apalancamiento: intentan maximizar el beneficio de las inversiones pidiendo dinero prestado. Adem¨¢s, otro de sus patrones es la transferencia del riesgo de cr¨¦dito, es decir, asumen el riesgo de que una empresa incumpla con los pagos y lo pasan de la entidad que concedi¨® el cr¨¦dito a un tercero.
¡°En la medida en que en la actividad de la banca en la sombra hay descalce de plazos [adquieren instrumentos con riesgo de cr¨¦dito y los financian con recursos ajenos a corto plazo], esa estructura ser¨¢ inestable ante shocks y puede dar lugar a comportamientos de p¨¢nico y al contagio a otras entidades y mercados¡±, advierte el presidente de la AEB.
El r¨¢pido crecimiento del shadow banking ha hecho que cada vez m¨¢s organismos, desde el FMI a la Reserva Federal, pasando por el Banco de Inglaterra o la Comisi¨®n Europea, muestren inter¨¦s en entender este fen¨®meno con el objetivo de desarrollar unas reglas de juego que sirvan para mitigar el riesgo sist¨¦mico que esta actividad lleva aparejada. ¡°El tema de la banca en la sombra no est¨¢ pasando inadvertido para quienes tienen que velar por la estabilidad financiera. Esto es bueno, pues no deber¨ªamos cerrarnos a los avances en el desarrollo financiero siempre y cuando el riesgo est¨¦ suficientemente controlado por supervisores y reguladores¡±, asegura Javier M¨¦ndez Llera.
Hay quienes entienden que la banca tradicional est¨¢ regulada en exceso y el legislador est¨¢ empujando a todas estas entidades, incluidos los bancos convencionales, a crear f¨®rmulas y sistemas para eludir la asfixiante normativa. ¡°No me gusta la expresi¨®n de shadow banking, creo que deber¨ªamos hablar de mercado de capitales que financian proyectos. Los que demandan dinero, ya sean empresas o particulares, tienen ahora m¨¢s opciones. En un entorno de carest¨ªa de cr¨¦dito estas instituciones incrementan la competencia. Eso es bueno¡±, se?ala Paul Moran, profesor del Instituto de Estudios Burs¨¢tiles.
Ventajas y riesgos
Incluso los m¨¢s cr¨ªticos con el auge de este sistema crediticio paralelo le reconocen algunas ventajas. Una de las lecciones de la crisis fue el peligro que conlleva una excesiva dependencia del cr¨¦dito bancario. La Gran Recesi¨®n dej¨® seco el grifo de los pr¨¦stamos, y econom¨ªas como la espa?ola todav¨ªa sufren las consecuencias. En este sentido, la banca en la sombra supone una fuente de financiaci¨®n alternativa para la econom¨ªa. ¡°No es malo que crezca el shadow banking porque complementa la labor de la banca aportando financiaci¨®n, pero el motivo de su crecimiento no puede ser solo la consecuencia de ventajas regulatorias¡±, dice Maudos.
Otro de los puntos a favor de este sistema es que se ofrecen alternativas a los ahorradores. En un entorno de tipos de inter¨¦s en m¨ªnimos hist¨®ricos, la rentabilidad de los activos tradicionales como los dep¨®sitos apenas da para cubrir la inflaci¨®n. Sin embargo, los veh¨ªculos de inversi¨®n de la banca en la sombra prometen rendimientos mucho m¨¢s elevados. ¡°Adem¨¢s, estos actores canalizan recursos hacia necesidades espec¨ªficas de manera m¨¢s eficiente, gracias a su mayor especificaci¨®n¡±, admite la Comisi¨®n Europea en su Libro Verde sobre shadow banking.
No obstante, las actividades del sistema bancario paralelo entra?an tambi¨¦n una serie de riesgos. Uno de ellos es que estas entidades est¨¢n expuestas a riesgos financieros similares a los de los bancos, pero sin los cortafuegos que gozan estos. Algunas de las pr¨¢cticas realizadas por estas entidades se nutren de la captaci¨®n de ahorro a corto plazo y, por lo tanto, si hay una crisis en el mercado, estar¨¢n expuestas a retiradas masivas y s¨²bitas de fondos por parte de los clientes. ¡°Al no estar sujetos a la regulaci¨®n bancaria tradicional, en una situaci¨®n de emergencia no pueden ¡ªal contrario que los bancos¡ª tomar pr¨¦stamos del banco central correspondiente, y no tienen depositantes tradicionales cuyos ahorros tienen cobertura de dep¨®sitos¡±, subraya en un reciente documento Laura Kodres, directora del departamento de los mercados monetarios del FMI.
Otro riesgo sist¨¦mico es el elevado apalancamiento de estas entidades, ya que permiten que se pueda utilizar varias veces una misma garant¨ªa de pago como aval de los pr¨¦stamos. Adem¨¢s, la menor regulaci¨®n y supervisi¨®n de este sistema bancario paralelo respecto del resto del sector financiero es un incentivo que puede llevar a las entidades tradicionales a desplazar determinadas operaciones hacia terrenos no regulados. ¡°Los riesgos del shadow banking son la falta de control por parte de las autoridades, una asunci¨®n de riesgos excesiva y la falta de emparejamiento en los vencimientos de activos y pasivos: la rentabilidad muchas veces consiste en financiarse a corto para invertir a largo plazo. Este esquema termin¨® provocando su estrangulamiento en 2007 al aparecer los primeros problemas con la valoraci¨®n de las hipotecas basura¡±, indica Juan Ignacio Crespo.
Efecto domin¨®
En un principio podr¨ªa pensarse que en caso de quiebra de una entidad bancaria en la sombra el recuento de da?os se limitar¨ªa a los ahorradores que le confiaron su dinero. Sin embargo, las actividades de este sistema paralelo est¨¢n a menudo estrechamente relacionadas con las del sector bancario ordinario. Por lo tanto, las hipot¨¦ticas quiebras pueden tener importantes efectos de contagio que, en la ¨²ltima fase de la cadena, terminar¨ªan afectando a la econom¨ªa real. En momentos de crisis, los riesgos asumidos ¡°en la sombra¡± pueden transmitirse de forma sencilla y r¨¢pida ¡°a la luz¡± mediante los pr¨¦stamos que la banca tradicional hace a las entidades paralelas. Otra posible v¨ªa de contagio es que, si un banco en la sombra entra en p¨¢nico, podr¨ªa verse obligado a ventas masivas de activos para satisfacer las necesidades de liquidez de los inversores con la consiguiente repercusi¨®n en los precios de los activos financieros y reales. Esto acabar¨ªa provocando un agujero a los balances de las entidades convencionales.
¡°La financiaci¨®n no bancaria no constituye en s¨ª misma un problema, sino que, por el contrario, ha jugado, juega y puede jugar un papel muy importante en la financiaci¨®n de la econom¨ªa real. Sin embargo, si esta actividad se realiza a corto plazo, con recursos ajenos y apalancada, esa estructura es inestable y debe ser vigilada con extrema cautela¡±, concluye Jos¨¦ Mar¨ªa Rold¨¢n.
Hay un aforismo que asegura que la ¨²nica diferencia entre un medicamento y el veneno est¨¢ en la dosis. Por eso, cada vez hay m¨¢s voces que advierten de que, si el imparable crecimiento del shadow banking no se supervisa, podr¨ªa acabar siendo el germen de la pr¨®xima crisis financiera. ¡°Espero que no sea as¨ª porque tenemos muy reciente la experiencia de 2007 y se han tomado medidas muy importantes para evitar que se repita. Pero para impedir que acabe siendo el germen de la pr¨®xima crisis, es necesario exigir colchones de solvencia y liquidez a estas entidades, tal y como se les ha impuesto a los bancos convencionales¡±, afirma Joaqu¨ªn Maudos. Este experto est¨¢ preocupado por las ¡°consecuencias¡± que puedan tener muy reducidos tipos de inter¨¦s sobre el riesgo creciente que asumen los inversores a trav¨¦s de la banca en la sombra, y que pueden ser el origen de nuevas burbujas financieras. ¡°Por eso es tan importante la regulaci¨®n. Pero insisto, no demonicemos a la banca en la sombra porque aporta financiaci¨®n al sector real de la econom¨ªa, y se ha revelado muy importante cuando la banca ha cerrado el grifo del cr¨¦dito¡±.
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