El juez absuelve a los ¡®ocho de Airbus¡¯ por falta de pruebas
"No queda suficientemente probada la participaci¨®n de los acusados", expone el fallo sobre los disturbios del 29 de septiembre de 2010 a las puertas de la factor¨ªa de Getafe
El juez ha absuelto a los ocho de Airbus. Ya en la ¨²ltima sesi¨®n del juicio, celebrada el pasado viernes, la fiscal hab¨ªa retirado la acusaci¨®n contra dos de los sindicalistas. Hoy mi¨¦rcoles el Juzgado de lo Penal n¨²mero 1 de Getafe emiti¨® una sentencia, dictada el d¨ªa anterior, que absolv¨ªa a estos dos por no pesar sobre ellos ninguna acusaci¨®n y a los seis restantes por que ¡°no queda suficientemente probada la participaci¨®n de los acusados¡±, seg¨²n explica en un comunicado del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Este caso parte de los disturbios que hubo a las puertas de la factor¨ªa de Airbus en la huelga general del 29 de septiembre de 2010. ¡°A partir de la siete horas, algunos de los algunos trabajadores de los concentrados [...] comenzaron a entorpecer el acceso [...] dirigiendo insultos a los trabajadores que no quer¨ªan hacer huelga¡±, expone la sentencia, que la Fiscal¨ªa puede recurrir. Los disturbios comenzaron cuando uno de los que no hac¨ªa huelga quiso entrar en las instalaciones y fue agredido, apunta la sentencia. Entonces intervino la polic¨ªa y se produjo un tumulto que concluy¨® con varios disparos al aire de uno de los agentes.
A partir de ah¨ª se inici¨® una investigaci¨®n que concluy¨® con la petici¨®n inicial de la Fiscal¨ªa de una pena de ocho a?os y tres meses para cada uno de los ocho acusados (Jos¨¦ Alc¨¢zar, Enrique Gil, Tom¨¢s Garc¨ªa, Rodolgo Malo, Jer¨®nimo Mart¨ªn, Ra¨²l Fern¨¢ndez, Edgar Mart¨ªn y Armando Barco) por impedir la entrada de trabajadores al centro de trabajo, por atentado y por lesiones.
Un proceso de identificaci¨®n "peculiar"
El juez pone en duda el proceso de identificaci¨®n de los autores de los hechos ¡°peculiar¡± (el entrecomillado lo escribe el propio magistrado en la sentencia): recabar informaci¨®n de los trabajadores atendidos en el botiqu¨ªn tras los disturbios. ¡°La rueda [de indentificaci¨®n] se convierte as¨ª en una especie de ¡®indagatoria general¡¯ que se aleja del tenor literal¡± de la ley, contin¨²a el fallo. ¡°Pero es que adem¨¢s los citados reconocimientos se realizan despu¨¦s de transcurridos una media de dos a?os desde los hechos¡±, subraya el magistrado.
El juez pone de relieve las contradicciones entre las declaraciones testigos y polic¨ªas que el 29 de septiembre de 2010 estuvieron a las puertas de la factor¨ªa de Airbus. Tambi¨¦n apunta que, pese a las acusaciones y declaraciones de algunos polic¨ªas, las grabaciones de seguridad muestran a varios de los acusados tratando de calmar los ¨¢nimos de otros huelguistas. Todo esto lleva al juez a concluir que hay ¡°la falta de de acreditaci¨®n de la imputaci¨®n personal de hechos concretos a cada uno de los acusados¡±.
El juicio a los ocho de Airbus, celebrado entre el 9 y el 12 de febrero en Getafe, ha sido el caso m¨¢s famoso de las m¨²ltiples acusaciones con peticiones de c¨¢rcel y multas para unos 300 sindicalistas por hechos producidos en jornadas de huelga. Ante estas acusaciones, algunas de ellas han acabado con pena de c¨¢rcel, los sindicatos pusieron en marcha hace ya tiempo la campa?a Huelga no es Delito, en la que este juicio ha sido su punto culminante.
Esto explica que ayer, nada m¨¢s conocerse la sentencia, tanto de CC OO (sindicato al que pertenecen siete de los ocho) como UGT (central del restante) la valoraran que as¨ª ¡°se restablece la verdad¡± y aprovecharan para reclamar, de nuevo, a los partidos pol¨ªticos la derogaci¨®n del art¨ªculo del c¨®digo penal (315.3) que condena con castigos de entre un a?o y nueve meses a tres a?os a quienes ¡°coaccionen a otras personas a iniciar o continuar una huelga¡±. ¡°Es un d¨ªa enorme, un d¨ªa grande para la democracia¡±, sostuvo Jos¨¦ Alc¨¢zar, uno de los acusados y el presidente del comit¨¦ intercentros de Airbus cuando sucedieron los hechos, ¡°ha merecido la pena aguantar y sufrir para demostrar¡± su inocencia.
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