La movilidad social se estanca en Espa?a con la crisis
Expertos debaten en sobre la desigualdad de oportunidades en el foro organizado por el Colegio de Em¨¦ritos y La Caixa
Espa?a es un pa¨ªs con una movilidad social ¡ªmedida en este caso seg¨²n las personas que mejoran, o empeoran, su posici¨®n relativa de ingreso¡ª similar a la de la mayor¨ªa de pa¨ªses occidentales. En las comparativas internacionales, expuestas este martes por Olga Cant¨®, profesora de Econom¨ªa de la Universidad de Alcal¨¢ de Henares, en el foro sobre desigualdad que organizan el Colegio Libre de Em¨¦ritos Universitarios y La Caixa, la sociedad espa?ola se sit¨²a cerca de Francia o Alemania, con una mayor movilidad que Estados Unidos, Italia o Reino Unido. Pero bastante menos que en los pa¨ªses n¨®rdicos europeos (Dinamarca, Noruega, Finlandia), en los que menos determinante es el origen socioecon¨®mico de la familia, ¡°una de las mejores aproximaciones a la igualdad de oportunidades¡±, indic¨® Cant¨®.
Pero los ¨²ltimos datos que maneja la especialista de la universidad madrile?a, que se remontan a 2010, reflejan que ¡°la primera parte de la crisis econ¨®mico ha reducido la movilidad social en Espa?a¡±. Y, tambi¨¦n, que lo que se ha producido un ¡°aumento de la movilidad descendente [personas que retroceden a un grupo de renta inferior] y una reducci¨®n de la movilidad ascendente¡±. Si antes de la crisis, el 31% de los espa?oles se manten¨ªa en el mismo grupo de renta durante el periodo analizado, en los primeros a?os de crisis esa proporci¨®n se elev¨® al 34%. Y, si antes de la Gran Recesi¨®n, eran m¨¢s los que ascend¨ªan de grupo de renta que los que descend¨ªan, ahora las tornas han cambiado.
En el debate, el tercero del ciclo sobre desigualdad que se celebra en el Caixaforum de Madrid y modera Luis Ayala, catedr¨¢tico de la Rey Juan Carlos, se plantearon dos cuestiones cr¨ªticas: ¡°?Va a ser el bienestar de los j¨®venes de hoy peor que el que disfrutan sus padres? ?Son los ricos de hoy los hijos de los ricos del pasado?¡±. Las enunci¨® Guillermo L¨®pez Casasnovas, catedr¨¢tico de Econom¨ªa de la Universidad Pompeu Fabra. Advirti¨® aqu¨ª el tambi¨¦n consejero del Banco de Espa?a contra la tentaci¨®n de restringir el problema a una cuesti¨®n de ingresos, algo en lo que coincidi¨® Cant¨®.
¡°Aqu¨ª deber¨ªamos hablar de bienestar, y no solo es un problema de renta, ni de las pol¨ªticas p¨²blicas que se implementen, tambi¨¦n de c¨®mo funcionan en Espa?a el mercado laboral, el de la vivienda o del cr¨¦dito¡±. Un funcionamiento que penaliza a los j¨®venes, que tienen cada vez m¨¢s dif¨ªcil emanciparse. Y que, en el caso del mercado de trabajo, la profesora Cant¨® relacion¨® la precariedad con situaciones de pobreza ¡°transitoria, pero recurrente¡± que son mucho m¨¢s frecuentes en Espa?a que en otros pa¨ªses europeos, incluso que en aquellos con mayores tasas de pobreza cr¨®nica, como Portugal.
L¨®pez Casasnovas indic¨® que, ante retos como la pobreza extrema en algunos colectivos de mayores ¡ª¡°todo se enfoca a la mejora del ingreso medio del pensionista, que efectivamente ha aumentado¡±¡ª, o el de la inserci¨®n laboral de los j¨®venes, ¡°las pol¨ªtica p¨²blicas siguen a pi?¨®n fijo¡±. A preguntas del moderador, el economista abog¨® por un aumento del impuesto de sucesiones. ¡°Tendr¨ªa sentido que financiase una pol¨ªtica de dependencia m¨¢s potente¡±, indic¨®. Tambi¨¦n se mostr¨® favorable a gravar mucho m¨¢s las ganancias del capital, ¡°cuando ¨¦ste deje de destinarse a usos productivos¡±. Y m¨¢s all¨¢ del repunte de la desigualdad, mostr¨® adem¨¢s su preocupaci¨®n por ¡°una polarizaci¨®n que haga desaparecer la clase media, que es la que facilita la cohesi¨®n social¡±.
Por ¨²ltimo, el soci¨®logo V¨ªctor P¨¦rez-D¨ªaz, presidente de Analistas Socio-Pol¨ªticos y antiguo catedr¨¢tico de la Complutense, anim¨® a una perspectiva ¡°m¨¢s amplia¡±, en la que destac¨® que la participaci¨®n ciudadana ¡°activa y discerniente¡± en los asuntos colectivos para ¡°definir las pol¨ªticas p¨²blicas necesarias¡± es m¨¢s d¨¦bil que en otros pa¨ªses que brindan m¨¢s igualdad de oportunidades.
P¨¦rez-D¨ªaz abund¨® en la comparaci¨®n con Dinamarca, ¡ª¡°no la de Hamlet, sino la de nuestros sue?os¡±¡ª, que reiteradamente esgrimen acad¨¦micos y partidos pol¨ªticos como modelo. ¡°Podemos encontrar pistas muy interesantes en los recursos socioculturales que tiene cada pa¨ªs¡±, indic¨®, para concluir que esos ¡°intangibles¡± sit¨²an a la sociedad danesa en un nivel superior: activaci¨®n c¨ªvica, tiempo utilizado en espacios de debate y asociacionismo, emancipaci¨®n temprana, experiencias dignas de trabajo, grado de confianza en las instituciones, libros le¨ªdos o pr¨¢cticas art¨ªsticas.
¡°En Espa?a se ha mejorado, pero tenemos que querer m¨¢s. Y durante los ¨²ltimos 40 a?os la entrega de la resoluci¨®n de los problemas a las ¨¦lites pol¨ªticas ya la hemos ensayado¡±, plante¨® P¨¦rez-D¨ªaz. Los ponentes coincidieron en el papel esencial de la educaci¨®n en la igualdad de las oportunidades. Y reconocieron los esfuerzos hechos para elevar la escolarizaci¨®n. Pero tambi¨¦n, la necesidad de mejorar en la calidad de la ense?anza. ¡°El diablo, o Dios, est¨¢ en los detalles¡±, insisti¨® el soci¨®logo.
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