La herencia de David ?lvarez, la ¨²ltima batalla en la guerra de los Eulen
El reparto de la propiedad entre los hijos del fundador de Eulen amenaza con recrudecer la pelea por la propiedad
La batalla de la familia ?lvarez parece no tener fin. La muerte del patriarca, David ?lvarez, hace m¨¢s de un a?o, no ha supuesto el final de la encrudecida ri?a entre los hijos, separados en dos bandos y enfrentados desde 2009 por el control de Eulen, multinacional de servicios con sede en Madrid. Al contrario: el reparto de la herencia abrir¨¢ un nuevo frente. Porque todav¨ªa no se han repartido las propiedades entre los siete v¨¢stagos ?lvarez. Pero las cuentas que cada parte hace de c¨®mo quedar¨¢ el equilibrio de poderes son bien distintas y ya han provocado una nueva demanda en los tribunales.
El grupo de los cinco hijos que se enfrentaron a su padre en vida (los llamados hijos d¨ªscolos) aseguran que con el reparto se har¨¢n con el control de Eulen, lo que persiguen desde 2010. Sin embargo, su hermana y actual presidenta de la compa?¨ªa, que comparti¨® el poder con su padre, sostiene que ella seguir¨¢ al frente y disfrutar¨¢ del control mayoritario. Para empezar, los cinco hijos rebeldes ya han interpuesto una demanda a t¨ªtulo individual en los Juzgados de lo Mercantil de Madrid contra Carlos Rodr¨ªguez Quiroga, el albacea contador-partidor de la herencia de su padre, al que acusan de parcialidad por su vinculaci¨®n con Eulen.
Nada con la familia Eulen es sencillo. Cada cap¨ªtulo de la pugna familiar acaba en los tribunales en un embrollado litigio. Sobre la herencia, la base es la interpretaci¨®n del reparto. Todav¨ªa no se ha procedido a la entrega. De manera resumida, y siempre seg¨²n fuentes cercanas a ambos grupos, la cuesti¨®n es que los cinco hijos d¨ªscolos consideran que al repartirse la leg¨ªtima (la parte de la herencia de la que no se puede privar a un hijo) les tocar¨¢ cinco s¨¦ptimas partes de un tercio de las acciones de Eulen. Y juntando todos esos pedazos con los t¨ªtulos que ya tienen, dispondr¨¢n de la mayor¨ªa de acciones. Controlar¨¢n la empresa y podr¨¢n acceder a gestionarla.
Su hermana, en cambio, recuerda que una cosa es que les toque parte de un tercio de la riqueza de su padre. Y otra, que sea un tercio de las acciones. Es decir, que si su padre dej¨® instrucciones de que la parte de los hijos d¨ªscolos se cubriera con otros bienes (viviendas o participaciones en otras empresas de la familia, por ejemplo), y la de ella se cubre preferentemente con acciones de la empresa en pugna, ella seguir¨¢ controlando Eulen.
Eso es un resumen, porque en las explicaciones pormenorizadas hay porcentajes, abogados y una herencia que sigue sin abrir.
El origen de la pugna: 2009
Los cinco hijos del bando de los d¨ªscolos fueron apartados de la gesti¨®n de Eulen hace siete a?os tras un enfrentamiento con su padre, quien en 2009 hab¨ªa soltado las riendas de la empresa a los 82 a?os, pero decidi¨® volver y apartarles a ellos en 2010. El patriarca se ali¨® entonces con otros dos de sus hijos, y en especial con Mar¨ªa Jos¨¦, con quien form¨® una sociedad (Daval) para aglutinar las acciones de ambos y controlar la empresa. Mientras, el otro grupo se hizo fuerte en otra sociedad patrimonial, El Enebro, que controla las bodegas de Vega Sicilia, entre otras cosas.
En el ¨²ltimo enfrentamiento en los tribunales con su hermana, a principios de mes, los cinco hijos revelaron c¨®mo pensaban que iba a ser el reparto de la herencia. "Una vez haya concluido el proceso de reparto de la herencia de David ?lvarez (el 47,55% de Eulen) sus cinco hijos podr¨ªan alcanzar la mayor¨ªa accionarial de la multinacional y por tanto el control pol¨ªtico de la sociedad. Dado que la herencia de David ?lvarez concede a todos sus hijos la parte leg¨ªtima, los denominados cinco hijos d¨ªscolos obtendr¨ªan el 11,3% de Eulen lo que, sumado a su paquete de acciones actual, les dar¨ªa la mayor¨ªa accionarial en Eulen", dec¨ªan en un comunicado.
La versi¨®n del entorno de la presidenta de Eulen, Mar¨ªa Jos¨¦ ?lvarez, es opuesta. "La posici¨®n mayoritaria de Mar¨ªa Jos¨¦ ?lvarez en Eulen, S.A., est¨¢ absolutamente garantizada por el testamento de su padre", defienden. "Por una parte, porque los cinco hermanos enfrentados s¨®lo tienen cinco s¨¦ptimos de un tercio y Mar¨ªa Jos¨¦, el resto, es decir, el tercio de mejora, el tercio de libre disposici¨®n, adem¨¢s de un s¨¦ptimo de la leg¨ªtima. Adem¨¢s, el testamento ordena que el haber hereditario de Mar¨ªa Jos¨¦ se pague, con preferencia a otros bienes, en participaciones de Daval y, por ¨²ltimo, y si lo anterior no fuera de por s¨ª suficiente, que lo es, permite a Mar¨ªa Jos¨¦ pagar la leg¨ªtima de sus hermanos en dinero".
Nuevo escollo: el albacea
?Qui¨¦n tiene la primera palabra en el reparto de la herencia? El contador-partidor. Es quien tiene la herencia y debe hacer inventario de bienes, liquidar, partir y repartir. Incluso aqu¨ª hay conflicto. Los hijos d¨ªscolos critican que ese papel est¨¢ en manos de un abogado que ha llevado los casos de Mar¨ªa Jos¨¦ ?lvarez. Temen por su parcialidad.?
"La mayor¨ªa accionarial de Eulen y por tanto el control de la sociedad est¨¢ ahora mismo pendiente del reparto de la herencia, cuyo albacea contador-partidor es Carlos Rodr¨ªguez Quiroga, socio director del despacho de abogados de la propia Mar¨ªa Jos¨¦ ?lvarez y de Eulen, quien a su vez tiene el control de Daval", critican desde El Enebro. Piden que "se abstenga de realizar actuaciones" hasta que se dilucide su pertinencia para el cargo. Pero temen que "proceda a realizar la particici¨®n".
"Las operaciones particionales se hallan en muy avanzado curso, de forma que se espera que probablemente en marzo quedar¨¢n ultimadas, procediendo el contador-partidor a formalizar por s¨ª solo ¡ªes decir, sin necesidad de contar con la aprobaci¨®n de los interesados en la sucesi¨®n¡ª el documento particional, elevando a p¨²blico dicho instrumento ante el Notario que ¨¦l considere conveniente", dice una portavoz del entorno de Mar¨ªa Jos¨¦ ?lvarez.
La primera palabra la tendr¨¢ el contador-partidor. es probable que la ¨²ltima, de nuevo, la tengan los tribunales.
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