Del bonus al cheque restaurante: salarios a la carta
El tradicional sueldo fijo est¨¢ siendo desplazado en las empresas por una amplia gama de alternativas de retribuci¨®n variable y flexible
Presentar una n¨®mina como garant¨ªa de solvencia para alquilar un piso o realizar una compra a plazos podr¨ªa tener los d¨ªas contados. Y es que con los cada vez m¨¢s complejos modelos de remuneraci¨®n que se imponen en las empresas, la pregunta ¡°cu¨¢nto ganas¡± ha dejado de ser significativa. Hoy lo verdaderamente relevante es saber ¡°c¨®mo te pagan¡±. Variable, retribuci¨®n flexible, beneficios sociales o pago en especie ganan peso en el mix salarial de los profesionales de todos los niveles y sectores. Una tendencia en alza que parece encaminarse poco a poco hacia una completa personalizaci¨®n del estipendio.
Seg¨²n el ¨²ltimo bar¨®metro Retribuci¨®n Flexible de Sodexo, siete de cada 10 empresas utilizan esta modalidad como factor motivador y de retenci¨®n de sus trabajadores. ¡°En estos ¨²ltimos a?os, en los que no era posible subir sueldos, la retribuci¨®n flexible ha permitido pagar mejor sin incrementar la masa salarial de la empresa¡±, comenta Miriam Mart¨ªn, directora de Marketing y Comunicaci¨®n de Sodexo Beneficios e Incentivos. ?Los requisitos de esta modalidad? Ha de ser voluntaria y no puede superar el 30% del salario bruto del trabajador.
Cheque restaurante, cheque guarder¨ªa, tarjeta de transporte o ayudas a la formaci¨®n son algunos los productos de retribuci¨®n flexible m¨¢s demandados. Entre sus beneficios m¨¢s destacados est¨¢n que ¡°cubren necesidades de las personas, aumentan su calidad de vida y les permiten optimizar sus salarios¡±, resume Mart¨ªn. Sodexo estima que solo los vales de comida pueden suponer un ahorro para el trabajador de hasta 500 euros anuales. Con la ventaja a?adida de que estos productos cotizan a la Seguridad Social, de manera que ¡°no merman las bases de cotizaci¨®n ni afectan en t¨¦rminos de paro, indemnizaci¨®n o jubilaci¨®n¡±, contin¨²a.
Vigilantes contra los excesos
El caso de las tarjetas ¡®black¡¯ de Caja Madrid es un ejemplo de c¨®mo las pol¨ªticas de retribuci¨®n de altos directivos en las empresas no siempre responden a los objetivos por los que deber¨ªan regirse. A saber: ¡°contribuir con claridad al buen gobierno corporativo y al logro de los planes de negocio, satisfaciendo las necesidades y expectativas de directivos, consejeros, accionistas, inversores, reguladores y los distintos grupos de inter¨¦s¡±, enuncia Mario Cer¨®n, corresponsable de la Pr¨¢ctica de Remuneraci¨®n de Directivos de KPMG.
Una de las figuras a las que recurren los grandes inversores de las corporaciones para protegerse de eventuales desmanes salariales de sus propios administradores son los llamados proxy advisors. Estos asesores independientes elevan a los accionistas de las compa?¨ªas informes detallados acerca de los planes de remuneraci¨®n de sus directivos. ¡°Si el ¡®proxy advisor¡¯ estima que no se ajustan a criterios como la creaci¨®n de valor a largo plazo o que no est¨¢n vinculados de forma clara a m¨¦tricas de negocio, puede emitir un informe negativo y los planes ser rechazados o invalidados por la Junta General de Accionistas¡±, comenta Cer¨®n.
La satisfacci¨®n de los empleados no es la ¨²nica raz¨®n que impulsa a las compa?¨ªas a usar la imaginaci¨®n a la hora de pagarles por su trabajo. ¡°Introducir elementos de diversificaci¨®n tiene ventajas fiscales, permite llegar a m¨¢s colectivos de trabajadores y reduce los riesgos¡±, explica Eva Patier, directora de Compensaci¨®n y Estudios Retributivos de Willis Towers Watson. El abono de un variable vinculado a resultados es la f¨®rmula preferida por accionistas e inversores, de manera que ¡°si alcanzo objetivos pago el variable y si no, no¡±, sintetiza.
Sin embargo, a pesar de los desvelos de las empresas por migrar hacia modelos alternativos de remuneraci¨®n, el salario fijo sigue siendo el factor m¨¢s valorado por los profesionales, tanto a efectos de atracci¨®n de talento como de retenci¨®n. As¨ª se desprende del estudio Talent Management & Reward, realizado por Willis Towers Watson entre 2.000 empresas y 31.000 profesionales repartidos por 29 pa¨ªses. El desconocimiento de estas f¨®rmulas flexibles o los deficientes esfuerzos de las compa?¨ªas para explicar de forma transparente a la plantilla su pol¨ªtica retributiva podr¨ªan estar detr¨¢s de esta preferencia.
Planes inconsistentes
Tambi¨¦n la inconsistencia que muestran algunas organizaciones al dise?ar sus planes de retribuci¨®n flexible. ¡°En las plantillas actuales conviven distintas generaciones con distintas necesidades. Si yo no tengo hijos, no me des cheque guarder¨ªa. O si vivo a dos manzanas de la oficina, ?para qu¨¦ quiero plaza de parking en el trabajo? Eso s¨ª, si a mis pares se lo est¨¢s ofreciendo, no me lo quites sin m¨¢s. D¨¢melo en dinero o comp¨¦nsame de otra manera¡±, expone Patier. Jos¨¦ ?ngel L¨®pez Palomo, profesor de Compensaci¨®n y Beneficios de la Universidad Distancia de Madrid (UDIMA), coincide en que el ¡°caf¨¦ para todos¡± y la aplicaci¨®n indiscriminada de pol¨ªticas retributivas que ignoran las preferencias y necesidades de los empleados no funcionan. ¡°Porque supone un coste elevado y, adem¨¢s, los trabajadores no lo valoran¡±.
La transparencia y la comunicaci¨®n jugar¨¢n un papel importante de cara a aumentar la popularidad de estos sistemas. Para Borja Garc¨ªa, m¨¢nager s¨¦nior de Page Consulting, no se trata tanto de remunerar m¨¢s como de remunerar mejor. ¡°Es importante poner en marcha un buen plan de comunicaci¨®n que resalte los beneficios de las diversas opciones, especialmente en materia de ahorro fiscal¡±. A veces, sin embargo, la complejidad de las variables convierte el paquete salarial en un galimat¨ªas para sus propios beneficiarios. La tecnolog¨ªa ayuda y hoy en algunas organizaciones ya es posible calcular el bonus, gestionar los gastos de viaje o pedir las vacaciones desde una aplicaci¨®n en el dispositivo m¨®vil del empleado.
Todo hace indicar que el futuro de la retribuci¨®n se aleja del tradicional concepto de sueldo fijo. ¡°Los empleados demandan una gesti¨®n m¨¢s diferenciada de su compensaci¨®n, quieren tener mayor protagonismo en el dise?o y composici¨®n de su paquete retributivo y decidir c¨®mo quieren que se les pague¡±, resalta L¨®pez Palomo. Sin embargo, puntualiza, el horizonte de la retribuci¨®n a la carta se antoja lejano, ya que ¡°la mayor¨ªa de las compa?¨ªas no disponen todav¨ªa de herramientas ni medios para hacerlo posible¡±. El big data y la revoluci¨®n tecnol¨®gica en curso deber¨ªan propiciar ese salto cualitativo. ¡°Porque se necesita¡±, concluye el profesor de la UDIMA, ¡°una visi¨®n de la compensaci¨®n m¨¢s global, que nos permita contemplarla como una herramienta de direcci¨®n al servicio del negocio y no ¨²nicamente como un coste¡±.
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