Agitaci¨®n en los cimientos de Sacyr

Algo se mueve en Sacyr. Y no est¨¢ claro hacia d¨®nde. Durante las dos ¨²ltimas semanas, y en varias operaciones, el empresario malague?o Jos¨¦ del Pilar Moreno Carretero ha elevado su participaci¨®n en la empresa del 5,1% al 12,8%, lo que le sit¨²a como principal accionista de la constructora, por delante de la familia Carceller (12,6%, a trav¨¦s de Disa). Este movimiento se produce en v¨ªsperas de la junta general de accionistas, que se celebra el pr¨®ximo 8 de junio previo consejo de administraci¨®n. Una circunstancia que se presume nada casual y, probablemente, muy causal, y que ha levantado bastante polvareda en el entorno de la entidad presidida por Manuel Manrique para saber por d¨®nde vienen (y van) los tiros.

Y claro, hay lecturas para todos los gustos. Desde la que invita a la tranquilidad y calma, que se trata de transmitir desde la empresa, a la que apunta a un intento de dar un nuevo (no ser¨ªa el primero) golpe de mano y cambiar la c¨²pula. Todo entra en la baraja, incluida la visi¨®n de ¡°la larga sombra¡± del anterior presidente, Luis del Rivero, defenestrado de la empresa hace ya seis a?os por el consejo, y a cuya iniciativa se debi¨® precisamente la incorporaci¨®n de Moreno Carretero al capital de la sociedad en una ampliaci¨®n en la que tambi¨¦n acudi¨® Tom¨¢s Fuertes, propietario del grupo El Pozo, y ahora otro accionista de referencia de Sacyr, con el 6,3%. Ambos respaldaron a Del Rivero en la batalla que mantuvo por el control de Repsol que, a la postre, le forz¨® a la traum¨¢tica salida.

Desde entonces han tenido una p¨¦rdida de valor burs¨¢til y, quiz¨¢ para el inversor malague?o, es el momento de buscar una oportunidad que le resarza. Una de las razones que esgrime es que la constructora muestra un gran potencial de crecimiento en Bolsa despu¨¦s de haber hecho una reestructuraci¨®n de la deuda y despejarse el futuro de Repsol en el que es un accionista de referencia. eso permite aventuirar su regreso al Ibex 35. La firma tiene un valor de 1.381 millones de euros frente a 1.448 que ten¨ªa en 2011.

En su entorno, la compra, en la que ha adquirido acciones por valor de 100 millones (aunque de momento se ha gastado nueve millones en derivados), se vende como ¡°una inversi¨®n a largo plazo y con vocaci¨®n de permanencia¡±. Una afirmaci¨®n que no aclara nada, porque tanto si es para mandar o no la frase vale.

Hay muchas visiones, entre ellas la de la larga sombra del expresidente Luis del Rivero

Su primera intenci¨®n es tener un puesto m¨¢s en el consejo de administraci¨®n, en el que ahora se sienta ¨¦l solo representando a su instrumental Beta Asociados. En Sacyr se da por seguro que no habr¨¢ ning¨²n problema para que sume otro representante, ya que, de acuerdo a la participaci¨®n que tiene, le corresponder¨ªa claramente.

Eso requerir¨ªa cambiar las condiciones actuales. El consejo se compone de 14 miembros, de los que nueve son dominicales, tres independientes, uno externo y un ejecutivo (el presidente), cuyo hijo Gonzalo Manrique ocupa un puesto de dominical pese a haber reducido su participaci¨®n a menos del 2%, lo que crea agravios comparativos. Adem¨¢s, la familia Carceller cuenta con tres, y la del que fuera primer presidente, Jos¨¦ Manuel Loureda, con dos, teniendo el 7,8%. No obstante, es muy posible que el consejo aproveche para hacer una reordenaci¨®n y dar mayor presencia a consejeros independientes en detrimento de los dominicales, al tiempo que pone en orden la proporcionalidad.

Si es as¨ª y se cumplen las predicciones de crecimiento, todo se limitar¨ªa a que quiere buscar la rentabilidad, lo que supondr¨ªa haber hecho una operaci¨®n brillante, y que quiere que se cuente con ¨¦l. Es decir, aqu¨ª paz y despu¨¦s gloria. Pero, m¨¢s all¨¢ de eso, si las intenciones van por otro camino y responden a un intento de mandar en Sacyr, las cosas cambian mucho. Hay quien no descarta que este ingeniero de Caminos que ha hecho una gran fortuna como contratista inmobiliario principalmente en Castilla La Mancha, intente el asalto a la presidencia, alentado precisamente por ese convencimiento de revalorizaci¨®n. En ese sentido, se blande la posibilidad de que propicie un acuerdo con los otros tres principales accionistas (Carceller, Fuertes y Loureda), lo que dejar¨ªa a Manrique en la cuerda floja. En total suman en torno al 40%.

Un golpe de mano deber¨ªa contar con el apoyo de las familias Carceller y Loureda

Pero esa posici¨®n de fuerza deber¨ªa pasar por el benepl¨¢cito de Demetrio Carceller, que ocupa la vicepresidencia y es un apoyo de Manrique, en quien encontr¨® un aliado en la presi¨®n sobre Del Rivero, y de la familia Loureda, que se ha mostrado neutral en este peirodo. Si no, no le salen los n¨²meros. Carceller tiene sindicadas sus acciones con el grupo Satoc¨¢n (del empresario canario Juan Miguel Sanju¨¢n, tambi¨¦n consejero), que posee algo m¨¢s del 2%. Tambi¨¦n habr¨ªa que contar con el 2,45% que controla el tambi¨¦n grupo canario Lapos¨¢n (del empresario hotelero Eustasio L¨®pez) y que adquiri¨® recienetemente al Banco Sabadell.