Cada vez menos emergentes
Las econom¨ªas avanzadas ya no pueden dar por sentada su supervivencia en un mundo competitivo
Por primera vez desde el inicio de la crisis, el crecimiento global se extender¨¢ a todas las regiones del mundo. M¨¢s de las tres cuartas parte de las econom¨ªas nacionales registrar¨¢n tasa de variaci¨®n positiva en el valor de la producci¨®n de bienes y servicios. Algunas de las m¨¢s importantes de las econom¨ªas consideradas emergentes abandonar¨¢n el estancamiento o la recesi¨®n en la que han estado inmersas hasta el a?o pasado. Brasil, por lo que representa para los intereses de las empresas espa?olas, es la m¨¢s destacada. Ese comportamiento favorable del conjunto de esas econom¨ªas se est¨¢ reflejando no solo en los indicadores reales, sino tambi¨¦n en las variables financieras, especialmente aquellas que reflejan el apetito inversor de quienes no anticipan rendimientos muy destacados en los correspondientes a las econom¨ªas avanzadas. De no mediar episodios excepcionales, y contando con una normalizaci¨®n previsible de las pol¨ªticas monetarias de EE UU y de la eurozona, esas econom¨ªas podr¨ªan sostener esa prometedora expansi¨®n, contribuyendo al crecimiento econ¨®mico y del comercio global como lo hicieron antes de la crisis.
En realidad, esa denominaci¨®n de ¡°emergentes¡± se mantiene desfasada, desde que el Banco Mundial la acu?ara a principios de los ochenta del siglo pasado. En ese grupo, diferenciado habitualmente de las econom¨ªas en desarrollo y de las desarrolladas, se encuentran las de China e India cuya contribuci¨®n al crecimiento de la econom¨ªa global no ha dejado de crecer en el ¨²ltimo cuarto de siglo, y las BRIC, que a?aden a las anteriores, Brasil y Rusia. Son emergentes en la medida en que sus mercados de capitales son menos avanzados, con m¨¢s riesgo que los de la mayor¨ªa de las econom¨ªas convencionalmente desarrolladas, fundamentados en pol¨ªticas econ¨®micas menos cre¨ªbles. Pero esa percepci¨®n est¨¢ cambiando, como se refleja en el ¨ªndice burs¨¢til m¨¢s difundido de los mercados emergentes, el MSCI, con 21 de sus 24 integrantes con un comportamiento macroecon¨®mico mejor que el de los ¨²ltimos a?os.
Es la evoluci¨®n de los fundamentos econ¨®micos y la homologaci¨®n normativa y de procedimientos lo que diferencia el atractivo inversor de los mercados nacionales. Y algunos de los todav¨ªa agrupados como emergentes exhiben un potencial muy superior al de la mayor¨ªa de las econom¨ªas avanzadas. As¨ª se reflej¨® en sus mercados financieros en 2017 y as¨ª puede ocurrir este a?o, a pesar de las revalorizaciones experimentadas.
Uno de los aspectos m¨¢s destacados de ese grupo, que no pasan por alto los inversores, es la creciente contribuci¨®n a la expansi¨®n de la econom¨ªa global y, quiz¨¢s lo m¨¢s relevante, la participaci¨®n igualmente creciente al comercio internacional, al protagonismo en las cadenas de generaci¨®n de valor de las multinacionales, las originarias de las econom¨ªas avanzadas y las de pa¨ªses emergentes, con un peso tambi¨¦n cada d¨ªa mayor en las cadenas globales.
Si la tensi¨®n reformista en la mayor¨ªa de esas econom¨ªas se mantiene al tiempo que la correcci¨®n de algunos desequilibrios, y siguen manteniendo ritmos de inversi¨®n superiores a los observados en la mayor¨ªa de las econom¨ªas desarrolladas, incluidos las partidas m¨¢s directamente vinculadas a la econom¨ªa del conocimiento, ese car¨¢cter emergente tendr¨¢ que encontrar un recambio. Desde luego ser¨¢ el caso de China e India, pero tambi¨¦n de otras econom¨ªas asi¨¢ticas con ventajas competitivas que ya exceden al tradicional coste del factor trabajo. Y eso no solo ser¨¢ vinculante para los inversores financieros, sino para aquellos gobiernos de econom¨ªas consideradas avanzadas que cre¨ªan que la mera pertenencia a esa categor¨ªa les garantizar¨ªa la supervivencia en una escena global cada d¨ªa m¨¢s competitiva.
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