Bruselas alaba la ¡°actitud constructiva¡± de Espa?a para aumentar su aportaci¨®n al presupuesto de la UE
El comisario Oettinger pide a los Estados m¨¢s fondos para llenar los huecos que dejan el Brexit y las nuevas necesidades de Defensa y ayuda al desarrollo
La UE se enfrenta a una encrucijada de dif¨ªcil resoluci¨®n. ?C¨®mo afrontar el agujero que deja en sus cuentas la salida de una de las grandes econom¨ªas de la Uni¨®n, el Reino Unido? ?Y c¨®mo cubrir las nuevas necesidades en materia de Defensa, protecci¨®n de las fronteras exteriores y ayuda al desarrollo? La Comisi¨®n Europea tiene clara la respuesta: con los Estados miembros aportando m¨¢s dinero a la bolsa com¨²n.
Para convencer a los Gobiernos de la necesidad de rascarse el bolsillo, el comisario europeo de Presupuesto, el alem¨¢n G¨¹nther Oettinger, est¨¢ viajando a las capitales de la UE. De visita en Madrid, Oettinger, alaba la actitud ¡°constructiva y pragm¨¢tica¡± del Ejecutivo de Mariano Rajoy, consciente de que las nuevas circunstancias le obligan a abandonar su papel tradicional de receptor neto y convertirse en contribuyente neto.
A Oettinger no le gusta esta dial¨¦ctica de contribuyentes frente a receptores netos, porque asegura que muchas pol¨ªticas no pueden contabilizarse solo como beneficio a un pa¨ªs concreto, sino a toda la Uni¨®n. Pese a ello, a final de cuentas los Gobiernos tendr¨¢n que explicar a sus opiniones p¨²blicas que la pertenencia a la UE les va a salir m¨¢s cara. Y frente a la actitud m¨¢s cicatera de pa¨ªses como Holanda, Finlandia, Suecia o Dinamarca ¨Cque se niegan a que el Brexit les cueste un solo c¨¦ntimo- en Madrid, al igual que en pa¨ªses como Francia y Alemania, s¨ª hay disposici¨®n a aumentar las aportaciones para el presupuesto plurianual, las cuentas que ahora empieza a dise?ar la UE para el periodo 2021-2027.
¡°Tenemos poco margen porque no podemos ni endeudarnos ni crear nuevos impuestos. As¨ª que el ¨²nico recurso es la aportaci¨®n de los Estados¡±, asegur¨® en Madrid el veterano democristiano alem¨¢n.
La aceptaci¨®n espa?ola a aportar m¨¢s fondos quiz¨¢ tiene que ver con algunas de las cifras que presenta la Comisi¨®n. Seg¨²n sus c¨¢lculos, una reducci¨®n de las ayudas agr¨ªcolas ¨Cde las que Espa?a es una de las grandes beneficiarias- de un 15% restar¨ªa 60.000 millones de euros. Peor a¨²n resulta para Espa?a el panorama de un recorte en los fondos estructurales. Porque si en las regiones m¨¢s desarrolladas se pone fin al apoyo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional y al Fondo Social Europeo, todo el norte del pa¨ªs dejar¨ªa de beneficiarse de estas cuantiosas ayudas. Y si, como se baraja en algunos escenarios, se limitan las ayudas solo a los pa¨ªses de cohesi¨®n, tambi¨¦n las regiones espa?olas m¨¢s pobres perder¨ªan esta inyecci¨®n de fondos.
Oettinger defiende que todas las regiones de la UE puedan seguir benefici¨¢ndose de estas ayudas. Pero para eso hace falta m¨¢s dinero. La Comisi¨®n admite que va a haber recortes en casi todas las partidas. El responsable de Presupuesto solo menciona dos programas que no van a sufrir: el Erasmus+ ¨Cque facilita las pr¨¢cticas profesionales en toda Europa de los j¨®venes comunitarios- y el Horizonte 2020 ¨Cel programa de investigaci¨®n e innovaci¨®n de la UE-.
El acuerdo se antoja dif¨ªcil. Sobre todo porque, a diferencia de otras decisiones, para acordar el presupuesto plurianual de la UE es necesaria la unanimidad de los 27 miembros (ya sin Reino Unido). La batalla se antoja larga, pero no demasiado. Porque antes de las elecciones al Parlamento Europeo de mayo de 2019 debe estar cerrada. Oettinger admite que cada pa¨ªs tiene prioridades y expectativas distintas, pero que al final todos van a tener un inter¨¦s com¨²n. ¡°Necesitamos un presupuesto que aborde las necesidades de los pr¨®ximos a?os¡±, asegura el comisario.
La Comisi¨®n, poni¨¦ndose la venda antes que la herida, recuerda los perjuicios que supuso el retraso de seis meses de las cuentas para el periodo 2014-2020, como las dificultades de la Administraci¨®n griega para prepararse para la crisis migratoria de 2015 o la falta de financiaci¨®n en Suecia y Austria para alojar a los reci¨¦n llegados. O que entre 25.000 y 30.000 intercambios de profesores y estudiantes no se pudieron poner en marcha por falta de fondos para el programa Erasmus+. Oettinger, ahora, trata de evitar que esto vuelva a ocurrir en 2021.
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