Si quiere saber de gesti¨®n, f¨ªjese en los cruceros
Estos buques, con 5.000 clientes y hasta 2.000 tripulantes, ponen a prueba cualquier liderazgo. El margen de error es bajo hasta llegar a puerto
El desaf¨ªo es tan grande como fuerte la competencia. Generar la mejor experiencia a una media de 5.000 clientes por buque es la expectativa de cada crucero que estos d¨ªas surcan la mar. Sus valoraciones, me gusta o stories en Instagram son decisivas para que los futuros clientes se decidan. Esta aventura implica a m¨¢s de 2.000 tripulantes y a su capit¨¢n, quien debe coordinar con total precisi¨®n cada movimiento del buque, la carga y los pasajeros, para llevarlos a buen puerto, tras siete d¨ªas de diversi¨®n a bordo de estas aut¨¦nticas ciudades flotantes.
La gesti¨®n en el mar es otra historia. Requiere de procedimientos que no admitan margen de error y soluciones inmediatas para crisis o imprevistos. Como la que recuerda el capit¨¢n de la Marina Mercante Julio Louro: ¡°Ya embarcados y antes de zarpar, comenzaron a salir extra?as burbujas del agua¡ ?eran unos individuos colocando paquetes de droga bajo el barco!
Liderar una tripulaci¨®n es un examen diario. Armonizar su diversidad, organizar los equipos de trabajo, controlar diarios y registros de navegaci¨®n son solo algunas de las tareas del capit¨¢n. Y la m¨¢s importante: supervisar la seguridad a bordo. ¡°Somos m¨¢s que un alto ejecutivo o un presidente¡±, asegura Louro. ¡°En la mar, un capit¨¢n de barco lo es todo¡±, a?ade.
As¨ª, durante la semana de media que dura un crucero, cada movimiento de la tripulaci¨®n est¨¢ alineado con la estrategia dise?ada por el m¨¢ximo responsable a bordo, el capit¨¢n, quien tiene la ¨²ltima palabra as¨ª como el respaldo del armador para aplicar sus decisiones, a veces controvertidas, para asegurar el ¨¦xito de la empresa. Coordinar una tripulaci¨®n que ronda de los 600 a 2.200 miembros, seg¨²n el tama?o del barco, no es tarea sencilla. ¡°Depende mucho del estilo de mando de cada capit¨¢n. En mi carrera siempre he optado por el equipo, pero hay quien ejerce un liderazgo autocr¨¢tico y, de ah¨ª, la comentada soledad del capit¨¢n¡±, subraya Louro.
Una larga carrera
La capitana?Alcira Salgado recuerda la dureza del medio. ¡°La mar es muy vocacional, es dura y no todo el mundo es apto para trabajar en un barco. La exigencia es especialmente elevada en los profesionales de mayor rango por la enorme responsabilidad que acarrean¡±. Para trabajar como oficial de puente es necesario el grado en N¨¢utica y Transporte Mar¨ªtimo. Adem¨¢s, han de aportar pr¨¢cticas en buque de 12 meses para oficial de puente de segunda y de 24 meses si es de primera. Con estos dos a?os de horas de mar y el m¨¢ster en N¨¢utica y Transporte Mar¨ªtimo, se alcanza el rango de capit¨¢n. Para ser jefe de m¨¢quinas habr¨¢ que cursar el grado en Tecnolog¨ªas Marinas y m¨¢ster en Ingenier¨ªa Marina.
Para hacerse a la mar, y formar parte de este equipo, que navega ocho meses, y descansa cuatro, existen dos requisitos indispensables para toda la tripulaci¨®n: poseer la libreta de navegaci¨®n y hablar ingl¨¦s. ¡°Para tramitar la libreta se requiere aprobar un curso b¨¢sico en primeros auxilios y seguridad mar¨ªtima, que se imparte en los centros homologados de la Marina Mercante¡±, apunta Alcira Salgado, capit¨¢n de barco y profesora en la Escuela de N¨¢utica de A Coru?a. Una vez tramitada la libreta, hay que pasar un reconocimiento m¨¦dico y, dependiendo de la compa?¨ªa, pasar una entrevista en ingl¨¦s. Richard Vogel, presidente y consejero delegado de Pullmantur Cruceros, destaca que algunos tripulantes tienen que estar acreditados con una formaci¨®n extra, ¡°definida por lo que llamamos emergency role onboard, para que en el caso de evacuaci¨®n, pongan en marcha una funci¨®n clave especialmente asignada¡±.
Los barcos, vistos como empresas flotantes, con una plantilla sujeta a los diferentes convenios colectivos de cada compa?¨ªa, est¨¢n estructurados en tres departamentos: puente o cubierta (capit¨¢n y oficiales, contramaestre y marineros), m¨¢quinas (jefe, oficiales de m¨¢quinas, mec¨¢nicos¡) y fonda u hotel (ma?tres, cocineros, jefes de sala, camareros, animadores¡), y es labor del capit¨¢n procurar un excelente ambiente laboral. ¡°Son empresas a bordo donde el compa?erismo, la comunicaci¨®n, la flexibilidad, la confianza y el trabajo en equipo han de funcionar a la perfecci¨®n porque tenemos una responsabilidad con el pasaje¡±, apunta Louro.
¡°El que quiera trabajar como tripulante ha que comprender cu¨¢l es su contribuci¨®n para la satisfacci¨®n del cliente¡±, destaca el presidente de Pullmantur Cruceros. Tener la mente abierta y ser tolerante y respetuoso frente a la diversidad. ¡°En determinados puestos es fundamental la empat¨ªa, el autocontrol, la comunicaci¨®n y vocaci¨®n de servicio y, para todos, saber sonre¨ªr. Por otro lado, y debido a la propia naturaleza del trabajo, aconsejo a la tripulaci¨®n buscar momentos de desconexi¨®n¡±, agrega.
Y es que navegar y que todo funcione es una conquista diaria si tenemos en cuenta que el grueso de los oficiales, contramaestre, marineros o mozos proceden en su mayor¨ªa de culturas distintas. Profesionalidad, disciplina y respeto son pilares de estas posiciones. ¡°La reputaci¨®n de cada tripulante es decisiva dentro de las compa?¨ªas que integran el sector, donde existe una muy interesante oferta de empleo con salarios elevados¡±, asegura Santiago Ciriza, asesor jur¨ªdico del Colegio de Oficiales de la Marina Mercante Espa?ola.
El sector de los cruceros avanza con una previsi¨®n a nivel mundial de m¨¢s de 30 millones de pasajeros para 2019, seg¨²n la Cruise Lines International Association. Una cifra que se repartir¨¢, sobre todo, entre las cinco compa?¨ªas que copan el 90% de este negocio, que mueve 134.000 millones de d¨®lares en todo el mundo, genera 1,1 millones de empleos y 45.000 millones de d¨®lares en sueldos, seg¨²n esta misma agencia. Espa?a, por su parte, es el segundo pa¨ªs receptor y el cuarto emisor de Europa con 1.481 millones de euros de contribuci¨®n econ¨®mica directa y genera m¨¢s de 31.000 puestos de trabajo (2015).
Para el presidente de Pullmantur Cruceros estamos ante ¡°un sector vivo, en movimiento, donde las navieras buscamos crecer y consolidar esta opci¨®n vacacional para volver a alcanzar la m¨ªtica cifra de los 700.000 pasajeros de 2011¡±. Un sector que a d¨ªa de hoy no cubre muchas de las posiciones que genera a pesar de sus altas remuneraciones. Lo que para Santiago Ciriza se debe a varios factores, entre ellos ¡°la exigencia de una formaci¨®n de alto nivel, unas pr¨¢cticas de uno o dos a?os en la mar y, sobre todo, a que las tripulaciones pasan muchos meses alejadas de sus familias¡±.
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