Un ingreso m¨ªnimo s¨ª, pero temporal
Espa?a debe aparcar el dise?o del programa de rentas m¨ªnimas permanente y centrarse urgentemente en una espec¨ªfica para la crisis que llegue de forma ¨¢gil y r¨¢pida
Todos los organismos internacionales coinciden en que Espa?a tiene una de las tasas de pobreza infantil m¨¢s altas de los pa¨ªses industrializados, y en este sentido parece acertada la necesidad de introducir un programa permanente de ingreso m¨ªnimo contra la pobreza que complete nuestro Estado del bienestar.
Sin embargo, la crisis actual, ha acelerado los tiempos, ha ampliado los colectivos vulnerables, a la vez que ha reducido el margen fiscal, y por lo tanto Espa?a debe aparcar el dise?o del programa de rentas m¨ªnimas permanente y centrarse urgentemente en dise?ar un ingreso m¨ªnimo temporal espec¨ªfico que pueda llegar de forma ¨¢gil y r¨¢pida a aquellos colectivos m¨¢s vulnerables por la covid-19.
Hasta el momento, las medidas laborales y sociales aprobadas por el Gobierno para proteger a los colectivos afectados requieren de una evaluaci¨®n ex ante de los potenciales beneficiarios muy exhaustiva. Para los trabajadores temporales, un subsidio de desempleo excepcional (80% del Iprem, el Indicador P¨²blico de Renta de Efectos M¨²ltiples). Para las empleadas del hogar, otro subsidio extraordinario (70% de la base reguladora). Para los aut¨®nomos, una nueva prestaci¨®n por cese de actividad (70% de la base m¨ªnima de cotizaci¨®n). Para las familias vulnerables, innumerables medidas que van desde el aseguramiento de los suministros b¨¢sicos (electricidad, gas, agua y telecomunicaciones), un bono social, moratoria pago de las cuotas de hipotecas, apoyo a inquilinos, etc¨¦tera.
Esta evaluaci¨®n ex ante tan exhaustiva en un momento de urgencia como el actual presenta dos problemas que pueden restar su efectividad de forma considerable. Por un lado, requiere mucha burocracia con la consiguiente congesti¨®n (y m¨¢s en la situaci¨®n actual), provocando retrasos en la llegada de las ayudas a los beneficiarios. Por otro lado, no considera a otros colectivos vulnerables, cuyas caracter¨ªsticas no se ajustan a los requisitos solicitados. Por ejemplo, trabajadores pobres de la econom¨ªa sumergida que se encuentran fuera del radar, parados de larga duraci¨®n cuya probabilidad de encontrar un empleo es ahora m¨¢s baja que nunca o aquellos desempleados que encuentran trabajo en la temporada de verano.
En definitiva, en este momento resulta prioritario que las ayudas lleguen a los m¨¢s necesitados cuanto antes y sin dejar a nadie atr¨¢s, y para conseguirlo creo que es necesario implementar un programa de ingreso m¨ªnimo de forma temporal y con dos requisitos. Por un lado, tiene que ser un programa transparente, muy ¨¢gil en la concesi¨®n de las ayudas, pero con un estricto control ex post, en el sentido de que aquellos que perciban la prestaci¨®n sin tener derecho a ella (aprovechado el poco control ex ante) tengan la obligaci¨®n de devolverla ¨ªntegramente (para esto la Agencia Tributaria es imbatible). Por otro lado, debe tener incentivos al empleo, en el sentido de que si una persona, estando recibiendo la nueva prestaci¨®n, recibe una oferta de empleo no pierda toda prestaci¨®n, sino que pueda percibir al menos un porcentaje de la misma a la vez que el nuevo salario.
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