Una nueva oportunidad para la integraci¨®n de Am¨¦rica Latina
La regi¨®n tiene ventajas competitivas en industrias que ser¨¢n clave para el desarrollo de las econom¨ªas del futuro
En apenas unas semanas, la crisis de la covid-19 ha avivado el debate sobre los pilares que han dominado el comercio global desde hace medio siglo. Antes de la crisis, la liberaci¨®n del comercio gener¨® un nivel de interconexi¨®n sin precedentes, otorgando premios a los pa¨ªses que ofrec¨ªan bajos costes y alta velocidad de producci¨®n y distribuci¨®n de inventarios y mercanc¨ªas. Ir¨®nicamente, la actual disrupci¨®n del comercio mundial, superior a las crisis del SARS de 2002 y a la financiera de...
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En apenas unas semanas, la crisis de la covid-19 ha avivado el debate sobre los pilares que han dominado el comercio global desde hace medio siglo. Antes de la crisis, la liberaci¨®n del comercio gener¨® un nivel de interconexi¨®n sin precedentes, otorgando premios a los pa¨ªses que ofrec¨ªan bajos costes y alta velocidad de producci¨®n y distribuci¨®n de inventarios y mercanc¨ªas. Ir¨®nicamente, la actual disrupci¨®n del comercio mundial, superior a las crisis del SARS de 2002 y a la financiera del 2008, ha puesto en evidencia los riesgos de no premiar otras variables comerciales como la resiliencia de los pa¨ªses o la fiabilidad de las rutas internacionales.
No estamos ante una situaci¨®n coyuntural, sino m¨¢s bien ante la aceleraci¨®n de una tendencia que, aunque avanzaba implacablemente, manten¨ªa un bajo perfil en las agendas geopol¨ªticas globales. La llegada de la covid-19 ha impuesto una nueva normalidad que incluye cambios trascendentales en los patrones del comercio mundial, que probablemente en las pr¨®ximas d¨¦cadas se afianzar¨¢n como consecuencia de los efectos del cambio clim¨¢tico.
Este nuevo escenario dar¨¢ un mayor oportunismo y relevancia al near shoring, caracterizado por que las empresas obtienen bienes y servicios e intercambio de tendencias empresariales ¡ªcomo la aceleraci¨®n de la automatizaci¨®n o la adopci¨®n de nuevas tecnolog¨ªas ¡ª en pa¨ªses cercanos. Seg¨²n EY, actualmente el 52% de las empresas multinacionales del mundo estar¨ªa tomando acciones r¨¢pidas para cambiar sus cadenas de suministros y el 36% estar¨ªa acelerando sus inversiones en tecnolog¨ªas y automatizaci¨®n.
Estos cambios suponen una oportunidad inesperada para que Am¨¦rica Latina se inserte m¨¢s competitivamente en el comercio global y fortalezca las sinergias intra y extra regionales. La regi¨®n cuenta con activos importantes para aprovechar esta nueva oportunidad: una ubicaci¨®n geogr¨¢fica estrat¨¦gica, energ¨ªa, amplios recursos naturales como minerales, agua y tierra f¨¦rtil, y un importante bono demogr¨¢fico, con j¨®venes creativos de alto esp¨ªritu emprendedor.
Hasta ahora, la integraci¨®n de Am¨¦rica Latina se ha dado en t¨¦rminos normativos, m¨¢s que econ¨®micos y productivos. Si bien la adopci¨®n de tratados comerciales entre pa¨ªses y con el resto de mundo ha reducido los aranceles, siguen existiendo grandes barreras no arancelarias que ralentizan los procesos comerciales, reducen los incentivos para que las empresas se inserten en cadenas de valor relevantes y promuevan relaciones comerciales bilaterales.
La pregunta es: ?C¨®mo materializamos estas ventajas competitivas para que la regi¨®n se beneficie de los cambios que resultar¨¢n de la crisis actual? Primero, es necesario invertir en log¨ªstica funcional que nos permita desarrollar corredores log¨ªsticos de integraci¨®n con carreteras, puertos y aeropuertos, que nos otorguen versatilidad para la movilizaci¨®n de mercanc¨ªa dentro de la regi¨®n y hacia los principales mercados mundiales.
Tambi¨¦n ser¨¢ necesario fortalecer a las pymes exportadoras mediante transferencias de conocimiento, oportunidades de financiaci¨®n y encadenamientos con grandes empresas ancla, que les permitan mejorar la calidad y alcanzar certificaciones internacionales. En paralelo, la regi¨®n necesita integrar m¨¢s transversal y agresivamente los procesos de transformaci¨®n digital para mejorar la conectividad, aumentar la productividad de las empresas, mejorar la calidad de los servicios p¨²blicos y aprovechar los beneficios del creciente comercio electr¨®nico. Y por ¨²ltimo, debemos desarrollar ciudades m¨¢s inclusivas y resilientes, convirti¨¦ndolas en anclas de inversiones productivas para generar empleos de calidad, y que sean capaces de liderar las respuestas a los desaf¨ªos del cambio clim¨¢tico.
Estos esfuerzos deben ir de la mano de una gesti¨®n integral de fronteras que mejore la operatividad y optimice la gesti¨®n de riesgos, facilite los flujos de comercio intrarregionales y genere espacios de desarrollo econ¨®mico local como punto de partida para construir visiones de desarrollo econ¨®mico binacionales.
Am¨¦rica Latina ya tiene ventajas competitivas en industrias que ser¨¢n clave para el desarrollo de las econom¨ªas del futuro. Por ejemplo, la agroindustria ofrece seguridad alimentaria al proveer productos b¨¢sicos y de mayor valor a?adido con alta demanda en mercados desarrollados, como las super foods. De hecho, seg¨²n la FAO, en el 2028 Am¨¦rica Latina ser¨¢ responsable del 25% de las exportaciones de productos agr¨ªcolas y pesqueros, luego de un crecimiento de sus cultivos que ser¨¢ un 7% mayor que la media anual global.
Frente a probables nuevas pandemias, la industria farmac¨¦utica, con un 9% de crecimiento anual, es una de las m¨¢s insertadas en cadenas regionales de valor. El sector energ¨¦tico tambi¨¦n podr¨ªa alcanzar mayores niveles de competitividad si se enfocara en generar un mayor valor a?adido en los productos. Am¨¦rica Latina cuenta con el 23% de las reservas mundiales de petr¨®leo y una abundante capacidad para desarrollar energ¨ªas renovables, ya que alberga un tercio de las reservas de agua del mundo. La industria minera, con importantes yacimientos de materias primas esenciales para las industrias tecnol¨®gicas ¡ªcomo el 39% del cobre y 61% del litio mundial¡ª tambi¨¦n representa una buena oportunidad.
Una mayor participaci¨®n de la regi¨®n en el comercio mundial s¨®lo ser¨¢ posible si logramos generar cadenas regionales de valor que permitan insertarnos en las globales. A pesar de la heterogeneidad y de las diferencias, la integraci¨®n de Am¨¦rica Latina sigue siendo una de las mejores oportunidades para superar esta crisis y de dar el salto cualitativo que necesitamos para superar buena parte de nuestras brechas de desarrollo.
V¨ªctor Rico Frontaura es secretario general de CAF ¨C Banco de Desarrollo de Am¨¦rica Latina.
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