La recuperaci¨®n total llegar¨¢ en 2023
La pandemia ha precipitado la evoluci¨®n hacia una mayor eficiencia que se habr¨ªa demorado unos cuantos a?os
La actual crisis econ¨®mica conllevar¨¢ una compleja recuperaci¨®n y dejar¨¢ importantes secuelas en Espa?a, tales como un aumento relevante de la deuda p¨²blica y empresarial. De hecho, el endeudamiento p¨²blico rondar¨¢ el 120% del PIB en 2020 y esto implica el agotamiento del margen fiscal para afrontar nuevas crisis y la necesidad de sanear las cuentas p¨²blicas en un futuro. Ahora bien, estar¨ªamos ante un riesgo latente debido al apoyo del Banco Central Europeo y la UE que se suma a la permisividad de Bruselas hacia las finanzas nacionales en el corto plazo.
Por el contrario, el incremento de la deuda de las empresas no financieras ya supone un lastre para la actividad econ¨®mica. El colapso de los ingresos ha llevado a muchas compa?¨ªas a recurrir a ella para sobrevivir, y esta podr¨ªa superar el 80% del PIB. Luego, dado el incierto futuro para sus ingresos, el aumento de esta carga reforzar¨¢ la prudencia empresarial a la hora de gastar, contratar e invertir, especialmente cuando en ¨¢mbitos como el manufacturero el uso de la capacidad instalada rondar¨ªa el 70%.
La citada prudencia se sumar¨¢ a los da?inos efectos del resurgir de la covid-19 en una econom¨ªa de servicios como la espa?ola y cuyo PIB depend¨ªa en un 12% por el turismo hasta que lleg¨® la enfermedad. As¨ª que nuestra estructura productiva nos seguir¨¢ haciendo m¨¢s vulnerables, mientras que parte de la destrucci¨®n del empleo y tejido productivo ser¨¢ permanente.
Las empresas m¨¢s d¨¦biles est¨¢n desapareciendo y el coronavirus ha precipitado la evoluci¨®n hacia una mayor eficiencia que, bajo otras circunstancias, se habr¨ªa demorado unos a?os permitiendo la transformaci¨®n del mercado laboral y la aparici¨®n de nuevas ocupaciones. Por ejemplo, el comercio electr¨®nico en la eurozona aumentaba un 23,7% interanual en junio, la costosa gesti¨®n de los pagos en efectivo se ha reducido y las empresas han acelerado sus planes para ganar eficiencia. Resultar¨¢ dif¨ªcil la total recuperaci¨®n de las horas trabajadas, que caen a un ritmo del 24,8% interanual. Y esto condicionar¨¢ el consumo.
De momento, las cuestiones anteriores ser¨¢n ocultadas por el importante resurgir de los indicadores econ¨®micos gracias a la demanda embalsada generada durante el confinamiento y la comparativa con un periodo depresivo. Dos cuestiones que acabar¨¢n por diluirse y dar¨¢n paso a un freno acusado de las mejoras a finales de 2020 en un contexto de impredecible evoluci¨®n sanitaria, si bien el impacto econ¨®mico del control de la enfermedad ser¨¢ minimizado.
En definitiva, debemos ser prudentes con la econom¨ªa espa?ola, aunque existen motivos para situar su total recuperaci¨®n en 2023. El desarrollo de las vacunas resulta esperanzador y permite confiar en el retorno de la normalidad, mientras que la respuesta del BCE y la UE se traducir¨¢ en una pol¨ªtica fiscal y monetaria claramente expansiva a corto plazo y el impacto de la crisis en grandes socios y clientes europeos ha sido menor de lo inicialmente temido.
Francisco Vidal es el economista jefe de Intermoney.
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