Europa busca su hueco para vender algas
Con apenas un 1% de la producci¨®n global, las empresas del continente venden el producto silvestre orientado al segmento de calidad
Con diferentes aplicaciones y usos, una huella de carbono limitada y a¨²n con margen para crecer, la producci¨®n de algas en Europa se perfila como una apuesta prometedora para la bio?econom¨ªa de la UE. La Comisi¨®n Europea quiere desbloquear el potencial del continente en un sector dominado por Asia que aporta menos del 1% de la producci¨®n total, seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles de 2016. Esta industria, que engloba la producci¨®n de macro y microalgas y productos derivados, gener¨® ventas de ent...
Con diferentes aplicaciones y usos, una huella de carbono limitada y a¨²n con margen para crecer, la producci¨®n de algas en Europa se perfila como una apuesta prometedora para la bio?econom¨ªa de la UE. La Comisi¨®n Europea quiere desbloquear el potencial del continente en un sector dominado por Asia que aporta menos del 1% de la producci¨®n total, seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles de 2016. Esta industria, que engloba la producci¨®n de macro y microalgas y productos derivados, gener¨® ventas de entre 1.100 y 1.300 millones de euros en 2020, de acuerdo con la Asociaci¨®n Europea de Biomasa de Algas (EABA, por sus siglas en ingl¨¦s).
¡°Las macroalgas son las que vemos en el mar, las que las mareas sacan a la orilla¡±, dice por tel¨¦fono Gabriel Aci¨¦n, vicepresidente de la EABA. Las microalgas son cultivadas en tierra en sistemas abiertos, como balsas o canales, o cerrados, usando fotobiorreactores. ¡°En capacidad de producci¨®n, Europa est¨¢ muy por detr¨¢s de Asia¡±, comenta. Entre 2006 y 2015, de China sali¨® el 54% de toda la producci¨®n de biomasa de algas, por delante de Indonesia, Filipinas, Corea del Sur y Jap¨®n. En cuanto a las macroalgas, China e Indonesia lideran su cultivo, mientras que Chile, seguido por China, es la m¨¢s potente en recolecci¨®n, seg¨²n el Centro Com¨²n de Investigaci¨®n de la Comisi¨®n.
Las compa?¨ªas europeas suelen ser peque?as o medianas, generalmente j¨®venes, aunque hay operadores con m¨¢s de 20 a?os de experiencia. ¡°La facturaci¨®n est¨¢ entre uno y 20 millones de euros¡±, se?ala Aci¨¦n. Hay entre 450 y 600 firmas. Francia, Irlanda y Espa?a tienen un mayor n¨²mero de empresas de macroalgas; Alemania e Italia, de microalgas.
La Patrona comenz¨® su actividad hace dos a?os y medio y colabora con pescadores de las R¨ªas Baixas que recolectan a mano algas, como wakame o kombu, que luego deshidratan o salan para uso gastron¨®mico. ¡°He trabajado siempre en acuicultura y me interesaba una especie nueva, algo que tuviese potencial, que no estuviera ya explotado¡±, cuenta Cristina Garc¨ªa, fundadora y directora general. ¡°A pesar de que ya hay empresas que llevan 20 a?os, sigue siendo una novedad y es un recurso que no necesita pienso, que ya consume los nutrientes del medio marino. Tambi¨¦n reduce el di¨®xido de carbono, mitiga el cambio clim¨¢tico, tiene muchas potencialidades¡¡±, a?ade.
Algamar es una de esas empresas que llevan m¨¢s de dos d¨¦cadas en el sector. En 1996 vieron el inter¨¦s del mundo gastron¨®mico por las macroalgas y fundaron en Pontevedra la primera empresa dedicada a su recogida y tratamiento en Espa?a. ¡°Hay otros pa¨ªses que s¨ª cultivan, por ejemplo, Jap¨®n, China, Corea¡, la mayor parte que tienen es cultivada¡±, dice Clemente Fern¨¢ndez, fundador de la compa?¨ªa. ¡°Nosotros todav¨ªa tenemos el lujo de recoger algas que da el mar directamente. Hay variedad y cantidad como para recoger alga silvestre¡±, a?ade. En Europa, al contrario de la tendencia global, la mayor parte se obtiene de esta manera.
En la actualidad, las macroalgas dominan el panorama eu?ropeo con alrededor de 50.000 toneladas y ventas de entre 700 y 800 millones de euros en 2020. Las microalgas, por su parte, rondaron las 500 toneladas, con un valor de entre 400 y 500 millones, seg¨²n la EABA.
Neoalgae comenz¨® en 2012 en Gij¨®n como asesora y consultora, pero acab¨® dando el salto a la producci¨®n. ¡°Gracias a una financiaci¨®n europea tenemos una planta de cultivo de, aproximadamente, 1.500 metros cuadrados¡±, explica por tel¨¦fono Fidel Delgado, codirector ejecutivo. Comercializan productos de diferentes usos elaborados con los principios activos que extraen de las microalgas que cosechan. ¡°El inter¨¦s que tenemos es producir m¨¢s ingredientes nutrac¨¦uticos y farmac¨¦uticos, porque entendemos que es hacia donde va el mercado¡±, asevera.
Aunque la biomasa de algas puede tener otras aplicaciones, como estimulantes agr¨ªcolas o piensos para acuicultura, y se estudia su potencial como biocarburante, su principal destino es la alimentaci¨®n, seguida de la cosm¨¦tica. Pueden ser utilizadas como ingrediente, como materia prima para gelificantes y colorantes o para usos nutrac¨¦uticos, entre otros.
¡°Como otras innovaciones, al principio son muy caras¡±, dice por videollamada J?rg Ullmann, director general de Roquette Kl?tze, una empresa alemana pionera especializada en el cultivo de diferentes microalgas. Cuenta que al principio se pod¨ªan usar principalmente como suplemento por el alto valor del mercado. ¡°Pero ahora nos hemos movido al segmento del colorante alimentario o al pienso para peces. Y el pr¨®ximo paso podr¨ªa ser usarlas como prote¨ªna alternativa¡±. La revoluci¨®n del sector, para Ullmann, es en realidad una evoluci¨®n.
¡°La competencia con pa¨ªses donde el coste de la mano de obra es muy bajo, as¨ª como sus salvaguardas, es imposible¡±, apuntan en Spireat, una compa?¨ªa italiana que produce espirulina biol¨®gica desde 2016. La industria europea hace de la especializaci¨®n y la calidad su principal arma. ¡°Sobre todo, tenemos producci¨®n de especies que ellos no producen tanto, m¨¢s delicadas, de mayor valor¡¡±, asevera el vicepresidente de la ?EABA. Fuentes de Severino Becagli, una empresa tambi¨¦n italiana dedicada al mismo producto, coinciden en que hasta el momento ha sido imposible competir con China, pero conf¨ªan en que los consumidores m¨¢s concienciados apuesten por la espirulina de calidad. ¡°Ciertamente m¨¢s cara, pero mejor en t¨¦rminos de sabor, olor y, sobre todo, propiedades nutricionales¡±, afirman.
Crecimiento del 10%
La mayor¨ªa coincide en que el sector est¨¢ en crecimiento. La EABA lo sit¨²a en torno a un 10% anual, aunque los ¨²ltimos datos disponibles indican que la producci¨®n europea, al menos hasta 2015, se hab¨ªa mantenido estable frente a un crecimiento global m¨¢s pronunciado. ¡°Ha crecido dentro de lo que es un alimento desconocido a¨²n para la gente de a pie. Queda mucho camino, pero podemos estar satisfechos de la evoluci¨®n que ha tenido¡±, se?ala Fern¨¢ndez, de Algamar. En cuanto a los beneficios, Aci¨¦n explica que, como en otros sectores, hay compa?¨ªas que desaparecen, pero que la cantidad de empresas, el volumen y el nivel de facturaci¨®n en incremento indican que son rentables.
Sin embargo, a pesar de las buenas perspectivas, quedan desaf¨ªos que superar, como la complejidad de los procesos administrativos y las barreras regulatorias. ¡°Hay poca conciencia sobre este producto y sus necesidades de producci¨®n, y as¨ª, para cada peque?o paso burocr¨¢tico, tuvimos que dedicar mucho esfuerzo para alcanzar los resultados¡±, aseguran en Spireat. Otro de los retos es el desconocimiento por parte del p¨²blico y el tama?o reducido del mercado. ¡°No solo tienes que encontrar tu modelo de negocio, sino tambi¨¦n tus propias estrategias de comunicaci¨®n¡±, aprecia Ullmann. ¡°Tuvimos que aprender a comunicar de una manera popular, para que todos entendieran por qu¨¦ las algas eran buenas o prometedoras¡±, argumenta. ¡°Y eso sostuvo nuestras ventas¡±.