Espa?a: cerrado para el turismo nacional, abierto para los europeos
En enero llegaron 274.242 viajeros extranjeros por ocio mientras que en el interior del pa¨ªs se imped¨ªa la movilidad entre comunidades
El sector tur¨ªstico sigue en un coma inducido. M¨¢s si cabe en el inicio de 2021, en el que el incremento de los contagios ¡ªen Espa?a y en Europa¡ª oblig¨® a los pa¨ªses a volver a limitar la movilidad. Unas medidas que todav¨ªa se mantienen. Pese a ello, en enero se evit¨® registrar un nuevo cero para la industria, aunque resulta parad¨®jico que se permitiera la llegada de turistas europeos mientras se prohib¨ªan los viajes entre com...
El sector tur¨ªstico sigue en un coma inducido. M¨¢s si cabe en el inicio de 2021, en el que el incremento de los contagios ¡ªen Espa?a y en Europa¡ª oblig¨® a los pa¨ªses a volver a limitar la movilidad. Unas medidas que todav¨ªa se mantienen. Pese a ello, en enero se evit¨® registrar un nuevo cero para la industria, aunque resulta parad¨®jico que se permitiera la llegada de turistas europeos mientras se prohib¨ªan los viajes entre comunidades en la mayor¨ªa de los casos. Pero ocurri¨®. Espa?a estaba cerrada para los viajeros nacionales y abierta para los europeos. Una especie de Plan Marshall que, como en la pel¨ªcula de Berlanga, pas¨® de largo, porque solo visitaron el pa¨ªs 434.362 personas (274.242 por ocio), una ca¨ªda del 89,5% respecto al mismo periodo de 2020. La gran damnificada es Canarias, que ya ha visto esfumarse el invierno, su temporada alta.
Esta contradicci¨®n se explica por qui¨¦n y c¨®mo se decretaron las restricciones. Tras el pulso desde el inicio de la pandemia entre comunidades aut¨®nomas y Gobierno central por ver qui¨¦n deb¨ªa llevar la batuta, el Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez deleg¨® esta responsabilidad en los territorios. Esto ha permitido a las autonom¨ªas cerrar su territorio perimetralmente durante un periodo de tiempo determinado y evitar los viajes entre ellas (salvo contadas excepciones como Canarias que permit¨ªa las visitas desde la Pen¨ªnsula con un test de coronavirus negativo). Pero las comunidades no tienen la potestad de negar la entrada a un visitante europeo.
En ese caso, tendr¨ªa que ser Espa?a la que notificase el cierre de fronteras, un extremo que no se ha producido a excepci¨®n de la restricci¨®n de los viajes no imprescindibles desde el Reino Unido ¡ªvigente desde el 21 de diciembre¡ª y de terceros pa¨ªses de fuera de la UE. La ¨²nica premisa para los viajeros que llegaran por avi¨®n o barco era la presentaci¨®n de una PCR negativa (aunque si viajaba por carretera este requisito no era necesario). Es decir, si un alem¨¢n llegaba al aeropuerto de Palma, no hab¨ªa una norma en Espa?a que le pudiera impedir entrar. Solo lo podr¨ªa hacer su pa¨ªs de origen, en este ejemplo si Alemania no le dejase salir de su territorio. De hecho, esto es lo que ha salvado que la contradicci¨®n no haya sido mayor, ya que el resto de pa¨ªses europeos impusieron fuertes restricciones y limitaron mucho los viajes de ocio.
La consecuencia final de este embrollo y de la situaci¨®n epidemiol¨®gica ha sido un inicio de a?o err¨¢tico para el sector tur¨ªstico. El ejercicio pasado marc¨® el suelo del turismo espa?ol, aunque 2021 tampoco ha empezado con buen pie, seg¨²n los datos publicados este martes por el INE. Por la parte del gasto, el hundimiento registrado fue algo superior incluso: los turistas desembolsaron casi 452 millones de euros, un 90,5% menos. As¨ª, parece que solo la vacuna podr¨ªa revertir la situaci¨®n. La industria conf¨ªa su futuro precisamente en el proceso de inmunizaci¨®n y suspira para que se llegue a verano con buena parte de la poblaci¨®n inmunizada.
Menos viajes de negocio, pero m¨¢s en proporci¨®n
Los viajes de negocio han sido uno de los grandes damnificados de la crisis del coronavirus. Los congresos y ferias de trabajo se han suspendido en su mayor¨ªa. Y las que se han mantenido, se realizaron de forma telem¨¢tica. Adem¨¢s, las reuniones de negocio se han reducido igualmente o sustituido por encuentros virtuales. Pese a ello, el baj¨®n de los viajes por ocio ha sido tan descomunal, que las llegadas a Espa?a por trabajo est¨¢n en m¨¢ximos en porcentaje sobre el total.
En enero, seg¨²n los datos publicados este martes por el INE, fueron al pa¨ªs por ocio 274.242 personas. Esto es, un 63% del total. As¨ª, el 37% restante viaj¨® por motivos profesionales u otros, que incluyen en parte aquellos que se desplazan con su familia y compaginan los negocios con algo de ocio, los que lo hacen por estudios u otros motivos personales o familiares. En diciembre este porcentaje fue todav¨ªa superior: entonces hubo un reparto m¨¢s igualado (59%-41%). Estos dos ¨²ltimos guarismos son el nivel m¨¢s alto para los viajes de negocio desde que hay registros desglosados por este concepto en el INE (octubre de 2015).