El FMI cifra en 5.000 millones de d¨®lares mensuales la ayuda que Ucrania necesita para mantener su econom¨ªa

El lenguaje meteorol¨®gico se ha impuesto al econ¨®mico en la presentaci¨®n este mi¨¦rcoles de la Agenda de Pol¨ªticas Globales de la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), instituci¨®n que esta semana celebra su reuni¨®n de primavera en Washington. Kristalina Georgieva ha dado un parte con lluvia de crisis energ¨¦ticas, ...

El lenguaje meteorol¨®gico se ha impuesto al econ¨®mico en la presentaci¨®n este mi¨¦rcoles de la Agenda de Pol¨ªticas Globales de la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), instituci¨®n que esta semana celebra su reuni¨®n de primavera en Washington. Kristalina Georgieva ha dado un parte con lluvia de crisis energ¨¦ticas, vientos de inflaci¨®n racheados, tempestades en los suministros y, en definitiva, la tormenta global perfecta. ¡°El mundo se enfrenta a una crisis sobre otra crisis. A la pandemia le ha seguido una guerra. Es como si nos golpeara una borrasca sin habernos recuperado de la anterior¡±, ha sentenciado ante la prensa.

Y en medio del sombr¨ªo panorama general, Georgieva se ha detenido en el ojo del hurac¨¢n. La directora gerente ha calculado en ¡°5.000 millones de d¨®lares mensuales¡± (4.600 millones de euros) la ayuda financiera que Ucrania necesita para ¡°mantener su econom¨ªa en funcionamiento¡±. ¡°La prioridad es asegurarse de que ese apoyo cubra los pr¨®ximos tres meses¡±, ha afirmado.

?Y despu¨¦s? Poco a poco, ha dicho la economista b¨²lgara, que ha prometido que el FMI trabajar¨¢ ¡°con sus socios para conseguir el dinero¡± para Kiev, al tiempo que ha alabado la gesti¨®n de sus autoridades, que han logrado en las ocho primeras semanas de guerra ¡°mantener la estabilidad macroecon¨®mica y financiera en un pa¨ªs sometido a un enorme estr¨¦s¡±. ¡°Ya estamos discutiendo con Ucrania un programa de seguimiento y recuperaci¨®n. De momento, la incertidumbre es muy alta, pero eso no deber¨ªa impedirnos comenzar a trabajar en un paquete de reconstrucci¨®n¡±.

Georgieva ha recordado los negros presagios compartidos el martes por el FMI en su informe de perspectivas: la guerra en Europa, una cat¨¢strofe que la instituci¨®n no vio venir en su ¨²ltima reuni¨®n de octubre, recortar¨¢ un punto el crecimiento global previsto ¡°para este a?o y el que viene¡±, hasta dejarlo en el 3,6%.

¡°Un total de 143 pa¨ªses han visto reducidas sus expectativas como consecuencia del conflicto¡±, que ha tra¨ªdo, seg¨²n Georgieva, ¡°adem¨¢s de un enorme sufrimiento¡± para las v¨ªctimas en Ucrania y para los ¡°pa¨ªses vecinos m¨¢s afectados¡±, ¡°la aceleraci¨®n de la inflaci¨®n y un aumento en los precios del petr¨®leo y de los alimentos que est¨¢ estrangulando las econom¨ªas familiares, as¨ª como un endurecimiento de las pol¨ªticas financieras de los pa¨ªses¡± provocado por todo lo anterior. ¡°A eso hay que sumar¡±, ha a?adido la jefa del FMI, ¡°los brutales confinamientos que ha impuesto China, que causan cuellos de botella a¨²n m¨¢s graves en las cadenas de suministro globales¡±.

A Georgieva, que ha pedido ¡°acciones por parte de los bancos centrales para mantener el pulso de la econom¨ªa¡± y reflejos a las autoridades financieras nacionales para ¡°ajustar sus pol¨ªticas sobre la marcha si es necesario¡±, tambi¨¦n le preocupa ¡°el riesgo de fragmentaci¨®n geopol¨ªtica que podr¨ªa poner en peligro los avances en materia de desarrollo de los ¨²ltimos 75 a?os¡±. Por no hablar de ¡°desaf¨ªos globales apremiantes como el cambio clim¨¢tico¡±, que han quedado aplazados por las citadas urgencias.

Por eso, considera que la cooperaci¨®n mundial en el G-20 ¡°debe continuar y continuar¨¢¡±, aunque algunos ministros Econom¨ªa hayan amenazado con boicotear reuniones del bloque de pa¨ªses desarrollados a las que asistan representantes rusos, como la prevista para este mi¨¦rcoles en Washington. Hay una larga lista de asuntos que ¡°ning¨²n pa¨ªs puede resolver por s¨ª solo¡±, dijo Georgieva. ¡°Puedo dar fe de que es m¨¢s dif¨ªcil cuando hay tensiones, pero [la cooperaci¨®n] no es imposible¡±.

La prueba de que la tormenta de la pandemia a¨²n no ha amainado del todo la ha ofrecido el propio formato de la reuni¨®n del FMI de esta semana, a¨²n predominantemente virtual. Tambi¨¦n la situaci¨®n de China, cuya previsi¨®n de crecimiento se ha recortado hasta el 4,4% por los severos confinamientos decretados por sus autoridades para detener el avance de la covid, m¨¢s de dos a?os despu¨¦s de su entrada en escena. Georgieva ha recomendado a Pek¨ªn que estimule fiscalmente el consumo ¡°ya que se enfrenta una desaceleraci¨®n provocada por las nuevas cuarentenas¡±. ¡°Lo que vemos en China es que el consumo se est¨¢ quedando corto, y que no se recupera con la fuerza necesaria¡±, ha advertido Georgieva.

Sobre Argentina, acostumbrada a los temporales econ¨®micos de aire permanente, la directora ha explicado que la inflaci¨®n es el ¡°gran riesgo¡± al que se enfrenta el pa¨ªs y ha adelantado que el dise?o de un programa econ¨®mico del FMI para este debe ser reajustado ¡°r¨¢pidamente¡± para reflejar los cambios en la econom¨ªa global provocados por la guerra en Ucrania.

Para despedir su discurso, Georgieva ha recurrido a otro lenguaje, el de la poes¨ªa, en busca de algo de esperanza entre tantas malas noticias. Lo ha hecho con los versos tal vez m¨¢s citados (e impresos sobre tazas de desayuno e imanes para la nevera) de la poeta afroamericana Maya Angelou: ¡°Toda tormenta se queda / sin lluvia¡±. ¡°Y esta tormenta¡±, ha a?adido Georgieva, ¡°no ser¨¢ una excepci¨®n¡±.