Las Administraciones P¨²blicas dispararon el gasto en el ¨²ltimo trimestre del a?o
El PIB habr¨ªa retrocedido entre octubre y diciembre de no ser por el aumento de los consumos p¨²blicos
El consumo de las Administraciones P¨²blicas se dispar¨® en el ¨²ltimo trimestre del a?o pasado como nunca. Aument¨® en unos 16.000 millones de euros, un 25% con respecto al trimestre anterior, seg¨²n cifras de la contabilidad nacional del INE. Se trata del mayor incremento de la serie en un solo trimestre en euros y en porcentaje. Ni siquiera en la pandemia se produjeron unos crecimientos trimestrales tan elevados. Si se compara el dato con el del mismo trimestre del a?o anteri...
El consumo de las Administraciones P¨²blicas se dispar¨® en el ¨²ltimo trimestre del a?o pasado como nunca. Aument¨® en unos 16.000 millones de euros, un 25% con respecto al trimestre anterior, seg¨²n cifras de la contabilidad nacional del INE. Se trata del mayor incremento de la serie en un solo trimestre en euros y en porcentaje. Ni siquiera en la pandemia se produjeron unos crecimientos trimestrales tan elevados. Si se compara el dato con el del mismo trimestre del a?o anterior, el aumento es del 9,2%. Solo en los a?os de la burbuja inmobiliaria, entre 2004 y 2008, se dieron tasas interanuales en ese entorno. Sobre todo durante la exuberancia de 2008. Este impulso del gasto p¨²blico mejor¨® el resultado del PIB trimestral en 0,38 d¨¦cimas. Sin esta contribuci¨®n, la econom¨ªa hubiera retrocedido un 0,2% entre octubre y diciembre en lugar del 0,2% que creci¨®.
Estas cifras se refieren al consumo p¨²blico, que incluye la compra de bienes y servicios intermedios y la remuneraci¨®n de la plantilla. Por ejemplo, el gasto en servicios sanitarios para mantener ambulatorios, hospitales o comprar medicamentos, as¨ª como los desembolsos corrientes en educaci¨®n ¡ªincluida la ayuda a la concertada¡ª y partidas de orden p¨²blico o Defensa. Pero no suponen, ni mucho menos, la totalidad del gasto p¨²blico: no recogen ni la inversi¨®n p¨²blica, ni los intereses, ni las transferencias. Tampoco los gastos en pensiones, las subvenciones o las prestaciones. El grueso del consumo p¨²blico, m¨¢s de la mitad, lo asumen las comunidades aut¨®nomas, encargadas de prestar los servicios de sanidad, educaci¨®n y servicios sociales.
Puede que en el ¨²ltimo trimestre de 2022 se hayan registrado algunos desembolsos necesarios para desplegar los fondos europeos que hayan sido considerados consumos intermedios. Pero en principio la mayor parte de los recursos europeos son inversiones, subvenciones o transferencias. Es decir, nada de consumo p¨²blico. Pueden haber pesado los gastos en Defensa, tambi¨¦n aquellos para apoyar a Ucrania, la subida de la factura de la luz y el gas en los edificios p¨²blicos, o mejoras en los presupuestos de Sanidad y Educaci¨®n. Adem¨¢s, est¨¢ incluida la subida salarial adicional de los funcionarios del 1,5% para 2022, que fue aprobada de forma retroactiva a finales del a?o pasado y cuyo importe ronda los 2.000 millones.
Por otra parte, la EPA ya arroj¨® en el cuarto trimestre de 2022 un aumento del empleo p¨²blico en 20.000 trabajadores que estar¨ªa contribuyendo con fuerza al consumo de las Administraciones. En la afiliaci¨®n el incremento de las plantillas p¨²blicas fue de 33.000 efectivos en el mismo trimestre. La proximidad de un periodo electoral puede estar claramente influyendo en estas cifras. Aunque el INE cambia mucho sus estimaciones del PIB de una publicaci¨®n a otra, estos datos de consumo p¨²blico son facilitados por la Intervenci¨®n P¨²blica y se antoja raro que puedan bajar.
Las comunidades aut¨®nomas, la mayor parte de ellas con elecciones en mayo, son en gran medida responsables de este incremento. Mientras que en el acumulado hasta noviembre el Estado solo est¨¢ repuntando sus desembolsos totales un 0,7% ¡ªen parte por la ca¨ªda de prestaciones de ERTE¡ª, las autonom¨ªas lo est¨¢n elevando un 7,5%. Estos datos recogen todas las partidas, incluyendo tambi¨¦n prestaciones, inversiones o intereses.
Pero tambi¨¦n hay otra historia detr¨¢s de estos n¨²meros. La recaudaci¨®n tributaria se encuentra en estos momentos disparada, con un alza hasta noviembre de casi el 17%, gracias a la recuperaci¨®n de la actividad, la inflaci¨®n y, probablemente, el afloramiento de la econom¨ªa sumergida tras la pandemia. Esta mejora de los ingresos est¨¢ permitiendo que el agujero presupuestario se reconduzca con mayor velocidad de lo esperado.
Hasta noviembre de 2022, el ¨²ltimo dato disponible, el desfase presupuestario de las Administraciones ha ca¨ªdo en un 60% en comparaci¨®n con 2021. El d¨¦ficit p¨²blico se situ¨® en el 1,9% del PIB ¡ªexcluidas las entidades locales, que tienen un impacto escaso sobre el conjunto¡ª, el equivalente a algo m¨¢s de 25.000 millones de euros. Esta cifra est¨¢ muy por debajo de la previsi¨®n del Gobierno, del 5% del PIB, unos 65.000 millones de euros, pese a la importante subida del gasto vinculada a los decretos anticrisis y la subida salarial de los funcionarios.
¡°El resultado en t¨¦rminos de saldo presupuestario es espectacular¡±, comenta Diego Mart¨ªnez L¨®pez, profesor de la Universidad Pablo de Olavide e investigador de Fedea. ¡°Aunque los datos de diciembre suelen incorporar un aceler¨®n de gasto en todas las Administraciones, parece claro que el d¨¦ficit p¨²blico va a quedar sustancialmente por debajo de las previsiones. Los ingresos se vienen comportando de manera extraordinaria a lo largo del a?o pasado. Y es posible que el d¨¦ficit con el que cerraremos 2022 apenas tenga ya componente c¨ªclico; ser¨¢ el estructural, ?en torno al 4% del PIB?¡±, apunta.
Ante estos n¨²meros, es posible que el Gobierno est¨¦ aprovechando para imputar todos los gastos que pueda en 2022. Los desembolsos en Defensa, la actualizaci¨®n en 2022 del 1,5% que se aplica al sueldo de los funcionarios, las ayudas para abaratar el recibo del gas por valor de 3.000 millones que se traspasaron a la CNMC para que lo financie durante 2023, otros 2.000 millones para financiar el d¨¦ficit del sistema el¨¦ctrico... Estas partidas podr¨ªan haber sido imputadas en 2023 y quiz¨¢s lo sean en 2022. Algunas fuentes apuntan entre 5.000 y 7.000 millones en gastos que podr¨ªan estar en un a?o o en otro. Hasta marzo no se dilucidar¨¢ la cantidad. Pero cuanto m¨¢s se impute a 2022, m¨¢s podr¨¢ descender el d¨¦ficit p¨²blico en 2023 sin tener que tomar medidas. Muchos analistas esperan que este a?o sea m¨¢s complicado proseguir con la reducci¨®n del desfase de las cuentas p¨²blicas y, de esta forma, se precisar¨ªan menos esfuerzos presupuestarios en pleno a?o electoral.
Estas cifras dejan la imagen de una econom¨ªa que en el tramo final del a?o ha sido sostenida en buena parte por el gasto p¨²blico y la acumulaci¨®n de existencias por parte de las empresas, que produjeron pero no vendieron. ¡°El crecimiento del PIB espa?ol en el cuarto trimestre de 2022 result¨® enga?oso. El consumo de los hogares, clave para los peque?os negocios, cay¨® un -1,8% trimestral y la inversi¨®n en capital fijo, un -3,8% trimestral, en l¨ªnea con el empeoramiento de las expectativas y el avance de las inquietudes entre familias y empresas¡±, se?ala Francisco Vidal, economista de Cepyme.