El gasto real en Defensa sube m¨¢s de un 20% sobre lo previsto en los dos ¨²ltimos a?os
El conflicto en Ucrania y el compromiso de elevar el desembolso militar hasta el 2% del PIB ensanchan el habitual desv¨ªo entre lo presupuestado y lo ejecutado
El gasto en Defensa que se proyecta cada a?o en los Presupuestos Generales del Estado se queda corto. Durante los dos ¨²ltimos a?os, esta partida ha demandado de una inyecci¨®n adicional para financiar los compromisos existentes y los que se a?adieron a lo largo de estos ejercicios. La diferencia entre la previsi¨®n y la ejecuci¨®n real supera el 20% desde 2022. La invasi¨®n rusa de Ucrania y el compromiso de los pa¨ªses de la OTAN para elevar los desembolsos en gasto militar al 2% del PIB en 2030 ha acentuado la situaci¨®n. Y ello, pese a que el Tribunal de Cuentas ya ha advertido contra esta pr¨¢cti...
El gasto en Defensa que se proyecta cada a?o en los Presupuestos Generales del Estado se queda corto. Durante los dos ¨²ltimos a?os, esta partida ha demandado de una inyecci¨®n adicional para financiar los compromisos existentes y los que se a?adieron a lo largo de estos ejercicios. La diferencia entre la previsi¨®n y la ejecuci¨®n real supera el 20% desde 2022. La invasi¨®n rusa de Ucrania y el compromiso de los pa¨ªses de la OTAN para elevar los desembolsos en gasto militar al 2% del PIB en 2030 ha acentuado la situaci¨®n. Y ello, pese a que el Tribunal de Cuentas ya ha advertido contra esta pr¨¢ctica y el Tribunal Constitucional ha anulado en el pasado cr¨¦ditos presupuestarios por aprobarse por decreto para saltarse el control parlamentario.
Uno de los ejemplos m¨¢s recientes de los gastos de defensa no previstos en los Presupuestos es env¨ªo de armas a Kiev por un valor de m¨¢s de 1.000 millones de euros, que volver¨¢ a ensanchar este cap¨ªtulo contable en 2024. Esta tendencia se mantendr¨¢ en el futuro, seg¨²n los analistas consultados, tanto por el tenso contexto geopol¨ªtico (conflicto en Ucrania, guerra entre Israel y Ham¨¢s...) como por el compromiso asumido con la OTAN para que el gasto en Defensa alcance el 2% del PIB antes de que termine esta d¨¦cada.
¡°Los Gobiernos prefieren reducir al m¨ªnimo posible el gasto en Defensa durante la tramitaci¨®n de los Presupuestos, sean del signo que sean. Saben que hay oposiciones hist¨®ricas a este cap¨ªtulo y existen razones de estabilidad presupuestaria¡±, afirma F¨¦lix Arteaga, investigador principal de Seguridad y Defensa en el Real Instituto Elcano. ¡°Es un cl¨¢sico. Las desviaciones suelen superar el 30% en los peores casos¡±, corrobora Antonio Fonfr¨ªa, profesor de Econom¨ªa en la Universidad Complutense de Madrid y acad¨¦mico en la Academia de la Ciencia y las Artes Militares.
La desviaci¨®n entre el gasto previsto y el finalmente ejecutado no es ¨²nicamente reflejo de los eventuales imprevistos que puedan surgir. La insuficiente presupuestaci¨®n en materia militar es un modus operandi de todos los Ejecutivos para sortear presiones internas, esquivar a la opini¨®n p¨²blica y dedicar m¨¢s recursos, al menos sobre el papel, a otras partidas. En los ¨²ltimos tiempos, por ejemplo, ha habido tensiones entre los socios de Gobierno al aprobarse un fuerte repunte del importe destinado a Defensa en las cuentas del a?o pasado, de m¨¢s de un 26%.
Los datos confirman esta brecha que se genera a?o tras a?o. La partida asignada al Ministerio de Defensa en las cuentas de 2022 se situaba en los 10.155 millones de euros, pero finalmente la ejecuci¨®n presupuestaria fue cerca de un 30% superior, rebasando los 13.000 millones, seg¨²n los datos de liquidaci¨®n publicados por Hacienda. Para el ejercicio pasado, el Ejecutivo estim¨® 12.825 millones de gasto militar. Finalmente, los desembolsos reconocidos rondaron los 15.000 millones, cerca de un 20% m¨¢s de lo inicialmente calculado.
Algunos estudios calculan una desviaci¨®n mayor de la que resulta del alejamiento del presupuesto inicial, teniendo en cuenta todos aquellos cap¨ªtulos que elevan el gasto militar al margen de las facturas del ministerio. El Centro Del¨¤s de Estudios por la Paz, por ejemplo, estima que el pasado ejercicio el gasto destinado a Defensa super¨® los 27.000 millones de euros, y que en 2022 rebas¨® los 22.000 millones frente a los 10.155 asignados por las cuentas.
Ampliaciones de cr¨¦dito
Este a?o no hay nuevos Presupuestos ¡ªest¨¢n prorrogados los de 2023¡ª, pero todo apunta a que el tama?o del desv¨ªo entre el gasto militar estimado y el efectivo seguir¨¢ estable o hasta crecer¨¢. El Ejecutivo, de hecho, ya ha aprobado dos ampliaciones de cr¨¦dito en la primera mitad del a?o: el ya mencionado env¨ªo de armas a Ucrania, y otros 580 millones para ¡°operaciones de mantenimiento de la paz¡± en el exterior cargados al Fondo de Contingencia.
¡°Como lo que se presenta inicialmente no basta para cubrir todos los gastos, se recurre a cr¨¦ditos extraordinarios, al Fondo de Contingencia [una partida presupuestaria creada para atender las emergencias] o a cr¨¦ditos del Ministerio de Industria¡±, resume Arteaga. Algunas de estas pr¨¢cticas fueron sancionadas en 2016 por el Tribunal Constitucional, que anul¨® cr¨¦ditos extraordinarios por miles de millones, alegando que hubieran tenido que aprobarse por ley y no v¨ªa decreto ley, pues se saltaron as¨ª el control parlamentario.
Respond¨ªa as¨ª a un recurso de inconstitucionalidad presentado por el PSOE y otras formaciones contra un cr¨¦dito para programas especiales de armamentos. El Tribunal de Cuentas tambi¨¦n inst¨® a modificar estos procedimientos. ¡°Se cuestion¨® este mal uso de la t¨¦cnica presupuestaria, pero esta situaci¨®n no se ha corregido: seguimos usando m¨¢s dinero del que presupuestamos¡±, a?ade el experto del Elcano.
Las misiones militares en el extranjero son particularmente caras y suponen uno de los principales responsables de los desv¨ªos presupuestarios que se producen a lo largo del a?o, junto con las compras de armamentos, explica Pere Ortega, fundador y presidente honorario del Centro Del¨¤s. Actualmente, hay 16 misiones el exterior, entre los frentes calientes del este de Europa y Oriente Medio, y ?frica (Somalia y la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, entre otros). ¡°Son costos¨ªsimas, no solo por los sueldos, sino por el desplazamiento de armamento pesado y el abastecimiento. Pero cada ejercicio se presupuesta una cifra muy inferior a lo realmente gastado y luego se hace una peque?a trampa¡±.
Ortega insiste en que hay ¡°mucho m¨¢s gasto militar de lo que es estrictamente el Ministerio de Defensa¡±, que se reparte por distintos departamentos y que, si se contabilizara donde corresponde, ofrecer¨ªa otra imagen del esfuerzo real de Espa?a en este cap¨ªtulo. ¡°Por ejemplo, las pensiones militares en la Seguridad Social o las ayudas a las industrias militares para producir armas, que salen del Ministerio de Industria. Son gastos que el Gobierno no contempla. Si lo hiciera, ya estar¨ªamos llegando al 2% del PIB de gasto en Defensa¡±, subraya.
¡°A la dotaci¨®n asignada en las correspondientes leyes de presupuestos se han venido aportando ¡ªy en algunos casos detrayendo¡ª cr¨¦ditos adicionales vinculados principalmente al Fondo de Contingencia y al cr¨¦dito que figura en el programa 464B del Ministerio de Industria relativo a la I+D militar. (...) Las variaciones han llegado a suponer hasta un tercio del presupuesto inicial¡±, puntualiza el informe El aumento del Presupuesto de Defensa en Espa?a, publicado a finales del a?o pasado por la Fundaci¨®n Alternativas.
Una situaci¨®n, a?aden los autores de este ¨²ltimo documento, que es ¡°poco adecuada¡±. Por dos razones: por un lado, ¡°la responsabilidad de la pol¨ªtica industrial y tecnol¨®gica del sector de la defensa es del Ministerio de Defensa¡±, y no de Industria; por otro, porque las operaciones que se van a realizar a un a?o vista podr¨ªan tener una aproximaci¨®n presupuestaria ¡°cercana al 90%¡± sin necesidad de tirar tanto del Fondo de Contingencia.
Compromiso del 2% del PIB
El hecho de que el gasto militar se diluya en distintos apartados tambi¨¦n crea una suerte de guerra de cifras sobre el verdadero esfuerzo militar del pa¨ªs. Si Espa?a calcul¨® un presupuesto militar para 2021 de 9.409 millones, el 0,78% del PIB, el Instituto Internacional de Estudios para la Paz de Estocolmo (Sipri) estim¨® que, para el mismo ejercicio, la cifra alcanz¨® los 16.526 millones de euros, el 1,4% del PIB, ya que lo calcula sobre distintas partidas.
Seg¨²n la OTAN, fueron 12.546 millones en ese mismo 2021, equivalentes al 1,04% de la riqueza del pa¨ªs, de acuerdo con los datos recogidos en el informe de la Fundaci¨®n Alternativas, de la que Fonfr¨ªa, de la Universidad Complutense, es coautor. ¡°Ser¨ªa m¨¢s ¨²til un Presupuesto de base cero. Es complicado, pero dar¨ªa mayor control sobre el gasto¡±, sugiere.
Espa?a asumi¨® el empe?o de elevar el gasto en Defensa hasta el 2% del PIB hace ya una d¨¦cada, y el actual Gobierno de Pedro S¨¢nchez ha vuelto a reafirmarlo dos a?os atr¨¢s en la cumbre de la Alianza Atl¨¢ntica celebrada hace dos a?os en Madrid. ¡°Lo que no hemos hecho en diez a?os lo queremos hacer en seis, y eso es un problema grave en lo presupuestario¡±, se?ala Fonfr¨ªa, que no considera realista el plan del Gobierno para alcanzar la meta que se ha fijado de cara a 2029. ¡°Si se hubiese hecho de forma paulatina se llegar¨ªa sin grandes problemas a ese 2%, pero ahora se tiene que hacer deprisa y corriendo, lo que adem¨¢s puede generar un sinf¨ªn de problemas de gesti¨®n¡±.
Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal