Los trabajadores de Boeing ponen fin a la huelga tras lograr un alza salarial del 44% en cuatro a?os
La secretaria de Trabajo del Gobierno de Joe Biden ha actuado como mediadora para desatascar las negociaciones
Justo en la v¨ªspera de las elecciones presidenciales de Estados Unidos, una sala sindical de la Asociaci¨®n Internacional de Maquinistas y Trabajadores Aeroespaciales presenci¨® este lunes una votaci¨®n decisiva para los trabajadores de Boeing. Tras siete semanas de huelga, los empleados aceptaron la nueva propuesta laboral, que adem¨¢s de una subida de sueldos del 43,65% en cuatro a?os, contempla otras concesiones laborales. La huelga ha terminado. La crisis de Boeing, todav¨ªa no.
Alrededor del 59% de los miembros del sindicato que representa a los cerca de 33.000 trabajadores en huelga votaron a favor del acuerdo, que incluye mayores cotizaciones para la jubilaci¨®n, bonus, mejoras en seguridad laboral, en planes de incapacidad laboral y en cobertura sanitaria. La secretaria de Trabajo del Gobierno de Joe Biden, Julie Su, desempe?¨® un papel clave para ayudar a la empresa y a los trabajadores a alcanzar un acuerdo, seg¨²n el sindicato.
La subida salarial ser¨¢ del 13% en el primer a?o, del 9% en el segundo y el tercero y del 7% en el cuarto, seg¨²n el nuevo acuerdo mejorado. Eso supone un punto m¨¢s cada a?o que el acuerdo alcanzado inicialmente, que implicaba una subida de sueldos de casi el 40%, y que fue rechazado en una votaci¨®n por los trabajadores.
¡°Los trabajadores saben lo que es que una empresa se extralimite y se lleve m¨¢s de lo que es justo¡±, han se?alado a trav¨¦s de un comunicado Jon Holden y Brandon Bryant, los l¨ªderes sindicales. ¡°Con esta huelga y la victoria resultante, los trabajadores de primera l¨ªnea de Boeing han puesto de su parte para empezar a reequilibrar la balanza a favor de la clase media y, al hacerlo, esperamos inspirar a otros trabajadores de nuestra industria y de otros sectores para que sigan defendiendo la justicia en el trabajo¡±, a?adieron.
Los trabajadores pueden empezar a regresar a las f¨¢bricas de Washington, Oreg¨®n y California que estaban paralizadas a partir del mi¨¦rcoles.
Boeing lanz¨® la semana pasada una enorme ampliaci¨®n de capital con la que capt¨® unos 23.000 millones de d¨®lares para dar ox¨ªgeno a sus maltrechas finanzas, evitando que su calificaci¨®n caiga al nivel de bono basura. La empresa sufri¨® p¨¦rdidas de 6.174 millones de d¨®lares en el tercer trimestre, en l¨ªnea con lo que hab¨ªa anticipado al anunciar un plan de ajuste que inclu¨ªa un recorte de plantilla del 10%.
Ortberg decidi¨® hacer borr¨®n y cuenta nueva con cargos extraordinarios tanto en la divisi¨®n de Aviones Comerciales (unos 3.000 millones de d¨®lares por los programas de sus aviones 777-9, 777-8 y 767) como en la de Defensa, Espacio y Seguridad (unos 2.000 millones de d¨®lares en los programas T-7A, KC-46A, Commercial Crew y MQ-25).
El nuevo presidente y consejero delegado de Boeing, Kelly Ortberg, traslad¨® un mensaje de confianza en el futuro al presentar los resultados: ¡°Tenemos mucho trabajo por hacer, tenemos un plan y el cambio ya est¨¢ en marcha. Este es un gran barco que tardar¨¢ alg¨²n tiempo en virar, pero cuando lo haga, tendr¨¢ la capacidad de volver a ser grande¡±.
El directivo expuso tambi¨¦n sus prioridades: primero, un cambio cultural fundamental en la empresa; segundo, estabilizar el negocio; tercero, mejorar la disciplina de ejecuci¨®n en los nuevos compromisos de toda la empresa, y cuarto, ¡°construir un nuevo futuro para Boeing¡±.
Poner fin a la huelga era la condici¨®n necesaria para empezar a avanzar en ese camino. Aunque Ortberg ha tenido que hacer concesiones importantes a los trabajadores, ahora puede poner en marcha sus planes.
El conflicto laboral era el ¨²ltimo de los contratiempos de un a?o negro para Boeing, que empez¨® con un extra?o accidente en enero en que un avi¨®n de Alaska Airlines perdi¨® en pleno vuelo un panel que tapaba un hueco destinado a puerta de emergencia en otras configuraciones del modelo, un 737 Max. Eso oblig¨® a la empresa a ralentizar la producci¨®n para solucionar problemas en su proceso de fabricaci¨®n. El anterior presidente y consejero delegado, Dave Calhoum, anunci¨® su dimisi¨®n en marzo.
El siniestro de Alaska Airlines puso de nuevo a Boeing y su modelo 737 Max en el ojo del hurac¨¢n despu¨¦s de que en 2019 se le retirara el permiso de vuelo a ra¨ªz de dos accidentes fatales que le costaron la vida a m¨¢s de 300 personas en otra variante diferente. En octubre de 2018 se estrell¨® en el Mar de Java, en Indonesia, el vuelo 610 de la compa?¨ªa de bajo coste Lion Air operado por un 737 Max 8; pocos meses despu¨¦s, en marzo de 2019, fallecieron 157 personas en el vuelo 302 de Ethiopian Airlines en el mayor desastre a¨¦reo de ese a?o, tambi¨¦n en un 737-8. Desde aquellos accidentes, la compa?¨ªa no ha conseguido enderezar el rumbo y acumula p¨¦rdidas de unos 31.800 millones de d¨®lares entre 2019 y el tercer trimestre de este a?o.