Los beneficios como soporte
Las perspectivas se han revisado al alza, sobre todo en Europa
Aunque las Bolsas reaccionaron a la baja con cierta intensidad (p¨¦rdidas de entre el 10% y el 15%) al inicio de la guerra en Ucrania, la duraci¨®n del proceso correctivo ha sido relativamente corto: dos semanas. Pero el proceso de recuperaci¨®n ha sido pr¨¢cticamente igual de r¨¢pido. No deja de sorprender la fortaleza exhibida por las Bolsas en marzo, sobre todo si tenemos en cuenta el entorno de incertidumbre al que todav¨ªa nos enfrentamos. Es cierto que los escenarios m¨¢s extremos ¡ªco...
Aunque las Bolsas reaccionaron a la baja con cierta intensidad (p¨¦rdidas de entre el 10% y el 15%) al inicio de la guerra en Ucrania, la duraci¨®n del proceso correctivo ha sido relativamente corto: dos semanas. Pero el proceso de recuperaci¨®n ha sido pr¨¢cticamente igual de r¨¢pido. No deja de sorprender la fortaleza exhibida por las Bolsas en marzo, sobre todo si tenemos en cuenta el entorno de incertidumbre al que todav¨ªa nos enfrentamos. Es cierto que los escenarios m¨¢s extremos ¡ªconflicto mundial¡ª parece que se han evitado y, aunque China no ha mediado por la finalizaci¨®n de la guerra, ha mostrado una posici¨®n, al menos, neutral. Y no es menos veraz que los mercados ya acumulaban p¨¦rdidas en las semanas previas. Estas, por cierto, no pueden atribuirse ¡ªo solo en un porcentaje reducido¡ª a que el mercado descontase la guerra.
Queremos aprovechar para insistir en que el escenario de invasi¨®n no estaba recogido en las cotizaciones apenas unas horas antes de que se iniciara. Las cesiones de las Bolsas en las jornadas previas estaban m¨¢s vinculadas al repunte de los tipos de inter¨¦s derivado del cambio de mensaje de los bancos centrales. Pero tambi¨¦n aqu¨ª encontramos un elemento de an¨¢lisis interesante de la reciente recuperaci¨®n de los precios de las acciones: han tenido que absorber una importante alza de los tipos de inter¨¦s a largo plazo (las referencias a 10 a?os de EE UU y Alemania se han situado en el 2,45% y en el 0,55%, respectivamente). El denominador de cualquier modelo de valoraci¨®n de renta variable se ha incrementado de forma significativa (del orden de 100 puntos b¨¢sicos), con el consiguiente impacto en los precios. Y, por si fuera poco, las previsiones de crecimiento del PIB se han recortado entre un 0,5% y un 2,0% para la mayor¨ªa de econom¨ªas del mundo.
?Qu¨¦ explica entonces el balance favorable de las ¨²ltimas seis semanas en los mercados? Las perspectivas para los beneficios empresariales que, en contraste con lo que sucede para el PIB, se han revisado al alza, sobre todo en Europa (en 2022 crecer¨ªan al 12%). Dos son las claves que explican este hecho. La primera, que los beneficios, a diferencia del PIB, se miden en t¨¦rminos corrientes, es decir, tienen en cuenta la inflaci¨®n. Y aunque no todas las compa?¨ªas van a poder mantener sus m¨¢rgenes, es obvio que parte de un crecimiento de los IPC de entre el 5% y el 10% se traslada a su cifra de beneficios. La segunda, que sectores como energ¨ªa y recursos naturales, cuya ponderaci¨®n en los ¨ªndices burs¨¢tiles (entre un 10% y un 15%) es claramente superior a la del PIB (5%) van a experimentar crecimientos del beneficio por acci¨®n del orden del 40% este a?o.
David Cano y ?lvaro L¨®pez Vivas son profesores de AFI Escuela de Finanzas