Los artesanos del coche del futuro son espa?oles
El presente es incierto en la industria auxiliar del autom¨®vil, pero a medio plazo hay esperanzas por el veh¨ªculo el¨¦ctrico y aut¨®nomo
El sector del autom¨®vil atraviesa una situaci¨®n cr¨ªtica, de transformaci¨®n y de dificultades. Espa?a se juega mucho en el envite. El pa¨ªs es el segundo productor europeo de veh¨ªculos tras Alemania y el cuarto fabricante de componentes, con una industria auxiliar de un millar de empresas preparadas para un proceso de fusiones y adquisiciones que va a cribar el negocio. De c¨®mo afronta el sector este momento de cambio depende un 12,5% de la econom¨ªa (PIB), seg¨²n las cuentas de la asociaci¨®n de fabricantes de autom¨®viles Anfac y de la asociaci¨®n de proveedores de automoci¨®n Sernauto. El director ...
El sector del autom¨®vil atraviesa una situaci¨®n cr¨ªtica, de transformaci¨®n y de dificultades. Espa?a se juega mucho en el envite. El pa¨ªs es el segundo productor europeo de veh¨ªculos tras Alemania y el cuarto fabricante de componentes, con una industria auxiliar de un millar de empresas preparadas para un proceso de fusiones y adquisiciones que va a cribar el negocio. De c¨®mo afronta el sector este momento de cambio depende un 12,5% de la econom¨ªa (PIB), seg¨²n las cuentas de la asociaci¨®n de fabricantes de autom¨®viles Anfac y de la asociaci¨®n de proveedores de automoci¨®n Sernauto. El director general de esta ¨²ltima, Jos¨¦ Portilla, resume as¨ª la situaci¨®n: el sector, asegura, ¡°se encuentra inmerso en una transformaci¨®n sin precedentes¡±. Sobre todos los planes manda el desarrollo del coche el¨¦ctrico y la prohibici¨®n de motores de combusti¨®n en la UE a partir de 2035.
Superado el par¨®n de la pandemia, las empresas de componentes empiezan a levantar cabeza. Las compa?¨ªas punteras ¡ªGestamp, Teknia, CIE Automotive o Grupo Antol¨ªn¡ª han remontado y vuelven a ganar dinero. En 2021, el sector en conjunto factur¨® 32.085 millones, un 6,3% m¨¢s que en el ejercicio anterior, marcado por la crisis de la covid-19. Pero no han alcanzado todav¨ªa el negocio prepandemia (37.000 millones). Pese a todo, incluso con la incertidumbre causada por la guerra en las puertas de la UE, este a?o esperan incrementar la facturaci¨®n en torno a un 10%.
¡°La industria automovil¨ªstica est¨¢ viviendo uno de los momentos m¨¢s complicados de su historia¡±, admite Ernesto Antol¨ªn, presidente del Grupo Antol¨ªn, una multinacional con presencia en 26 pa¨ªses, especializada en los componentes de interior para veh¨ªculos y con origen en un taller mec¨¢nico de Burgos en los a?os cincuenta. El grupo factur¨® 4.055 millones en 2021, un 2% m¨¢s, y conf¨ªa en la recuperaci¨®n total a corto plazo. ¡°Los analistas¡±, explica Antol¨ªn, ¡°prev¨¦n un incremento de la producci¨®n mundial de veh¨ªculos en 2022, especialmente en la segunda parte del a?o y pese a la inestabilidad generada en Europa por la guerra de Ucrania¡±.
¡°Somos optimistas con el futuro del sector¡±, coincide un portavoz de CIE Automotive, multinacional vasca que gan¨® 267,5 millones de euros en 2021, un 44% m¨¢s que en el a?o anterior. ¡°Esperamos que tras unos trimestres de coyuntura complicada, especialmente en mercados como el europeo, veamos un ciclo expansivo importante¡±.
Hay mucho sobre el tapete. ¡°Todo lo que le pasa al autom¨®vil es especialmente relevante, pues acaba modificando definitivamente las pautas dominantes del sistema industrial¡±, aseguraba un informe de CC OO en 2018. El an¨¢lisis sigue siendo v¨¢lido. En presente, lo que le pasa al autom¨®vil tiene que ver con el gran par¨®n de la pandemia, la ruptura de las cadenas de suministro, la escasez de determinados materiales y componentes como los semiconductores, los precios y la incertidumbre por la guerra de Ucrania. Pero ya antes de la pandemia, los fabricantes estaban apurados por la regulaci¨®n y la legislaci¨®n para alumbrar un tipo de veh¨ªculo m¨¢s sostenible, conectado y aut¨®nomo.
Los cambios que registra la industria son relevantes porque el autom¨®vil siempre ha tenido un efecto de arrastre sobre el resto de los sectores, en modelos organizativos y pautas productivas, y tambi¨¦n por su capacidad para imponer nuevas tendencias y h¨¢bitos al consumo. Se est¨¢n dando pasos trascendentes, como el abandono del sistema de trabajo a tiempo real y sin almacenaje ¡ªjust in time¡ª para abrazar el just in case. Se pasa del ¡°justo a tiempo¡± al ¡°por si acaso¡±, un movimiento que tendr¨¢ consecuencias en toda la cadena de fabricaci¨®n de veh¨ªculos.
Teknia, con 3.500 empleados, 21 f¨¢bricas y 10,7 millones de euros de beneficio en 2021 ¡ªcinco veces m¨¢s que en 2020¡ª, lo tiene claro. ¡°La industria se enfrenta a la consolidaci¨®n de una movilidad m¨¢s sostenible, solidificando tanto el volumen de producci¨®n como el de venta¡±, aseguran desde la compa?¨ªa. ¡°Este nuevo concepto ya est¨¢ provocando importantes cambios a lo largo de la cadena de valor del autom¨®vil¡±.
El grupo nacido hace 30 a?os en Zaldibar (Bizkaia) considera fundamental ¡°que se empiece a aportar luz y claridad regulatoria en nuestro sector, que es tractor en la econom¨ªa¡±. Teknia participa junto a Envision y Acciona en el proyecto para recuperaci¨®n y la transformaci¨®n (PERTE) de movilidad el¨¦ctrica aprobado por el Gobierno. ¡°Es importante que nos movamos en un entorno de certidumbre que permita adoptar medidas y estrategias que se puedan desarrollar en el largo plazo¡±, asegura la empresa.
Bego?a Cristeto, socia responsable de automoci¨®n, industria y qu¨ªmica de KPMG en Espa?a, explica c¨®mo en este momento la industria se pregunta d¨®nde van a estar los beneficios futuros. ¡°Porque con el cambio de h¨¢bitos del consumidor no se va a ganar tanto en la producci¨®n y venta de veh¨ªculos como en la gesti¨®n de la movilidad; es decir, la gesti¨®n de datos, de las flotas y de las infraestructuras de recarga¡±. ¡°La industria de automoci¨®n¡±, a?ade Cristeto, ¡°se tiene que posicionar en las nuevas cadenas de valor de la movilidad; si no, los que actuaban con ellos colateralmente pasar¨¢n a ser sus competidores en la captaci¨®n de los beneficios¡±. Compa?¨ªas de otros sectores como pueden ser Iberdrola, Endesa, Mapfre o Banco Santander est¨¢n ya adentr¨¢ndose en el negocio de la movilidad.
Beneficios potenciales
KPMG elabor¨® un informe para Anfac presentado en febrero de 2020 ¡ªinicio de la pandemia¡ª en el que estimaba en 100.000 millones de euros los beneficios potenciales del cambio de la industria de automoci¨®n a la de movilidad: el derecho de cada ciudadano a desplazarse como, cuando y a donde quiera. En la movilidad, el veh¨ªculo privado es un elemento m¨¢s de la ecuaci¨®n y, como en el mercado no hay conjuntos vac¨ªos, los beneficios generados por el cambio no se van a perder en el ¨¦ter.
Los beneficios se los van a dispu?tar los grandes fabricantes ¡ªRenault, Mercedes-Benz, Nissan, Ford, Volkswagen, Seat o Stellantis¡ª, pero tambi¨¦n la industria auxiliar que elabora una amplia gama de productos y aporta m¨¢s del 75% del valor del veh¨ªculo. El campo de juego es ancho. Un veh¨ªculo con motor de combusti¨®n est¨¢ integrado, pieza arriba, pieza abajo, por 70.000 componentes ¡ªun 30% menos en el caso del veh¨ªculo el¨¦ctrico¡ª que requieren una amplia red de suministradores, de calidad contrastada, capaces de competir en tiempo y precio.
En Espa?a, esa red de m¨¢s de un millar de empresas supone el 4% en el PIB. Traducido a empleo, son 365.000 puestos de trabajo directos e indirectos. La red comparte con las grandes automovil¨ªsticas, sus mayores, una significativa vocaci¨®n exportadora. Si Espa?a exporta un 80% de los veh¨ªculos que produce, los fabricantes de componentes venden fuera un 60% de su producci¨®n.
Las empresas de componentes no juegan todas en la misma liga. Hay grandes compa?¨ªas constituidas en Espa?a que venden en todo el mundo; multinacionales que compiten en Espa?a como Bosch, Valeo o Continental, y una mir¨ªada de pymes, muchas de ellas especializadas en un solo producto. Los fabricantes est¨¢n repartidos por toda la geograf¨ªa, pero en comunidades como el Pa¨ªs Vasco su peso es fundamental. En esa comunidad hay 300 empresas relacionadas con el sector de la industria automotriz. La gran concentraci¨®n en un peque?o territorio como el Pa¨ªs Vasco solo es comparable a la de algunos l?nder alemanes. El sector se ha convertido en un puntal de la econom¨ªa vasca, junto a la energ¨ªa y la aeron¨¢utica.
Al ritmo de las multinacionales, las compa?¨ªas auxiliares han ido derivando productos hacia el nuevo veh¨ªculo el¨¦ctrico. Fabrican nuevos elementos y emplean nuevos materiales. Se est¨¢n preparando para una nueva era en el negocio sobre la base de seis d¨¦cadas que han engrasado la actividad y una apuesta decidida por la I+D+i. El sector invierte en investigaci¨®n e innovaci¨®n en torno al 3,6% de la facturaci¨®n cada a?o, muy por encima de la media empresarial en Espa?a ¡ª0,7% seg¨²n datos de la Fundaci¨®n la Caixa¡ª. En 2021, asegura Sernauto, los proveedores aumentaron la inversi¨®n destinada a I+D+i en un 8,5%, alcanzando un total de 1.164 millones de euros. Se mantiene la media de inversi¨®n del 4% en los ¨²ltimos cinco a?os.
Gestamp ¡ª8.100 millones de facturaci¨®n y 155 de beneficio en 2021¡ª es un ejemplo de por d¨®nde camina la industria. El grupo que preside Francisco Riberas est¨¢ fabricando nuevos productos espec¨ªficos para veh¨ªculos electrificados y de alto valor a?adido, como el battery-box (caja de bater¨ªas); el door ring, que integra m¨²ltiples partes en una sola pieza, y soluciones para aligerar peso en el veh¨ªculo (giga stamping, battery pack y one piece floor).
¡°La fuerte inversi¨®n en I+D+i¡±, asegura el director general de Sernauto, ¡°est¨¢ permitiendo transformar productos y procesos y seguir contribuyendo a la movilidad del futuro: m¨¢s electrificada, conectada y automatizada¡±. La transformaci¨®n va a reconfigurar el sector. Todas las empresas est¨¢n repensando los planes estrat¨¦gicos porque surgen nuevos retos y nuevas oportunidades.
La realidad empuja. Las empresas de componentes han visto reducidos sus m¨¢rgenes, en gran parte por la dificultad de trasladar los sobrecostes por la subida de precios de las materias primas y la energ¨ªa. Los fabricantes de componentes esperan la comprensi¨®n de las grandes multinacionales para sellar una relaci¨®n ¡°equilibrada y colaborativa¡±, pensando en los beneficios a largo plazo. Pero no va a ser f¨¢cil. Est¨¢ en marcha una reorganizaci¨®n de los grandes grupos de fabricantes, surgen nuevos competidores y se van a quedar por el camino las compa?¨ªas que no se adapten.
Fusiones a la vista
¡°Estamos viendo ya y vamos a seguir viendo un proceso de consolidaci¨®n importante en el sector¡±, aseguran en CIE Automotive. ¡°La pandemia, la ca¨ªda de vol¨²menes por semiconductores, la inflaci¨®n general¡, todos estos elementos han pasado una factura demasiado alta a muchos proveedores que, desgraciadamente, no van a sobrevivir¡±. La mayor¨ªa de las empresas coincide: la cuota de mercado se va a concentrar en un menor n¨²mero de proveedores. Ser¨¢n los m¨¢s flexibles y los m¨¢s fuertes desde el punto de vista financiero. Nadie quiere quedarse fuera de juego. ¡°Los procesos de consolidaci¨®n¡±, sostiene Ernesto Antol¨ªn, ¡°llevan tiempo produci¨¦ndose porque al final esta industria es intensiva en capital y requiere de fuertes inversiones en tecnolog¨ªa e innovaci¨®n para estar a la vanguardia. La incertidumbre actual puede ser un elemento m¨¢s que anime el proceso [de fusiones]¡±.
Todos dicen estar preparados. Gestamp ¡°est¨¢ desde hace ya tiempo en el proceso de fusiones, adquisiciones y joint ventures¡±, asegura su portavoz. El grupo compr¨® en 2021 la compa?¨ªa Edscha (proveedor de bisagras), en 2011 adquiri¨® ThyssenKrupp Metal Forming y en la actualidad prepara novedades en Jap¨®n y en China. Teknia, por su parte, tambi¨¦n toma posiciones. ¡°Estamos en un proceso de compra de una empresa que nos va a aportar un extra de volumen de ventas importante¡±, adelanta la compa?¨ªa. ¡°Adem¨¢s, estamos tambi¨¦n estudiando la posibilidad de incorporar una segunda compa?¨ªa del mismo nivel¡±, concluye. El desarrollo del veh¨ªculo el¨¦ctrico marca los tiempos.
Un puzle con miles de chips
Un coche es un puzle de 70.000 piezas. Todas son importantes, pero algunas son imprescindibles. Los microchips, miles de pequeñas estructuras de material semiconductor, de apenas milímetros cuadrados, constituyen el sistema nervioso del vehículo. Sin ellos, un coche es una caja muerta. La quiebra en la cadena de suministro ha ahogado el sector.
Con la pandemia, los fabricantes paralizaron la compra de microchips. No los necesitaban. El puñado de empresas productoras de chips buscó alternativas para vender. El problema saltó cuando la automoción reanudó los pedidos: estaba al final de la cola. Un desastre de difícil arreglo porque el mercado de semiconductores es un oligopolio: TSMC domina el mercado junto a otros gigantes como Nvidia, ATI Technologies o Xilinx.
Empresas y Estados —España ha aprobado un PERTE de microelectrónica y semiconductores— intentan paliar la escasez. No es fácil. El mercado de los chips es intensivo en capital. Levantar una fábrica cuesta entre 7.000 y 10.000 millones y para ser rentable tiene que trabajar a plena capacidad. La escasez se va a mantener. Mientras tanto, los fabricantes se apañan. ¿Cómo? Colocando los chips —escasos— en los vehículos de alta gama, los más rentables. Esa es la razón de que los retrasos en las entregas afecten sobre todo a los vehículos más baratos. Es la ley del mercado.