Thyssenkrupp lanza un SOS: ¡°Si no actuamos, la producci¨®n de acero en Alemania tal y como la conocemos dejar¨¢ de existir¡±

Thyssenkrupp es un gigante sider¨²rgico hist¨®rico y ha dado la voz de alarma: teme por el futuro de la actividad acerera en Alemania. El negocio de los grandes altos hornos y los trenes de laminaci¨®n son la ra¨ªz hist¨®rica de la compa?¨ªa, que con unos 27.000 empleados en este sector es el mayor fabricante de acero del pa¨ªs. ¡°Es necesario que Alemania y Europa mantengan la industria sider¨²rgica. El acero est¨¢ al principio de muchas cadenas de valor. Desde una perspectiva macroecon¨®mica, una industria sider¨²rgica competitiva es por tanto indispensable, tambi¨¦n por razones de resistencia y autonom¨ªa¡±. Quien lanza esta advertencia a EL PA?S durante una entrevista por videollamada, es Miguel ?ngel L¨®pez Borrego, consejero delegado de Thyssenkrupp. ¡°Si no actuamos, la producci¨®n de acero en Alemania tal y como la conocemos dejar¨¢ de existir. Por eso son necesarios cambios de gran calado¡±, subraya.

El Gobierno alem¨¢n y el Estado de Renania del Norte-Westfalia ¡ªdonde est¨¢ la sede de la empresa¡ª subvencionan con unos 2.000 millones de euros la reconversi¨®n ecol¨®gica de la acer¨ªa. Sin embargo, no es suficiente. El grupo planea reducir la producci¨®n de acero y ha decidido vender parte de su divisi¨®n sider¨²rgica a EPCG, empresa propiedad del multimillonario checo Daniel K?et¨ªnsk?. En concreto, el consejo de supervisi¨®n de Thyssenkrupp decidi¨®, en contra de los votos de los empleados, vender inicialmente el 20% de las acciones de Steel Europe, como se denomina su divisi¨®n de acero. El factor decisivo fue el doble derecho de voto del presidente del consejo de supervisi¨®n, Siegfried Russwurm. EPCG adquirir¨¢ posteriormente otro 30% y establecer¨¢ as¨ª una empresa conjunta al 50% con Thyssenkrupp en igualdad de condiciones. En el ejercicio fiscal 2022/2023 la divisi¨®n del acero gener¨® un volumen de negocio de 12.400 millones de euros y un resultado de explotaci¨®n (ebit) de 320 millones de euros.

Esta decisi¨®n se enmarca dentro de los planes de ahorro del grupo, ya que los tiempos en los que Alemania era el centro de la demanda mundial de acero quedaron atr¨¢s. A esto se suma el hecho de que ya no pueda contar con fuentes de energ¨ªa baratas como sol¨ªa ser el carb¨®n nacional. Adem¨¢s, la empresa recuerda que Thyssenkrupp es m¨¢s que acero. Se trata de un grupo industrial con muchas ¨¢reas de negocio diferentes con cerca de 100.000 empleados, por lo que quieren evitar que el negocio sider¨²rgico siga lastrando las dem¨¢s actividades.

En total, Thyssenkrupp explota cuatro altos hornos en Duisburgo. Otros dos pertenecen a H¨¹ttenwerke Krupp Mannesmann (HKM), una empresa conjunta con sus competidores Salzgitter y Vallourec. En conjunto producen anualmente en la cuenca del Ruhr unos 11,5 millones de toneladas de acero destinados en gran medida al sector automotriz. No obstante, esta industria cada vez necesita menos acero debido a que con la electromovilidad se buscan materiales m¨¢s ligeros. ¡°Thyssenkrupp est¨¢ estrechamente vinculada a la industria del autom¨®vil, por lo que cualquier cambio en la demanda tiene naturalmente un impacto muy fuerte en la utilizaci¨®n de nuestra capacidad¡±, declara el directivo nacido en Fr¨¢ncfort pero de nacionalidad espa?ola.

En los ¨²ltimos tres a?os, Thyssenkrupp s¨®lo ha vendido una media de entre 9 y 9,5 millones de toneladas de acero. La demanda es demasiado baja y los costes muy altos. Debe hacer frente a la crisis de los precios de la energ¨ªa desencadenada tras el inicio de la guerra en Ucrania y a un incremento de las importaciones de acero de Asia, por lo que la reestructuraci¨®n era una cuesti¨®n de tiempo. ¡°Con el reajuste de Thyssenkrupp Steel, que est¨¢ desarrollando actualmente el consejo, nos enfrentamos a esta nueva realidad¡±, comenta L¨®pez. ¡°El reajuste prev¨¦ reducir las capacidades de producci¨®n de 11,5 millones de toneladas a una carga de env¨ªos de hasta 9,5 millones de toneladas anuales¡±, agrega. Como consecuencia, tambi¨¦n habr¨¢ ¡°p¨¦rdidas de puestos de trabajo a¨²n no cuantificables¡±, seg¨²n anunci¨® Thyssenkrupp Steel Europe hace unas semanas y que reconoce el propio directivo. ¡°El consejo ejecutivo del acero est¨¢ elaborando un plan de negocio que se traducir¨¢ en medidas concretas de reestructuraci¨®n. ?stas se discutir¨¢n, por supuesto, con los representantes de los trabajadores¡±, contesta sin querer entrar en m¨¢s detalles.

El comit¨¦ de empresa y el sindicato IG Metall ya han declarado la guerra a L¨®pez Borrego por este asunto ante el temor de que el grupo intente salir del negocio sider¨²rgico a expensas de los trabajadores. Lo acusan tambi¨¦n de falta de transparencia en las negociaciones con K?et¨ªnsk?. Algo que ¨¦l niega. ¡°Mantenemos y mantendremos el di¨¢logo con los representantes de los trabajadores. Esto se aplica tanto a las reuniones peri¨®dicas del comit¨¦ como a las conversaciones informales¡±, declara. ¡°Respetamos todos los contratos existentes y nuestro objetivo declarado sigue siendo evitar los despidos. Siempre ha sido as¨ª en Thyssenkrupp y no queremos cambiarlo ahora¡±.

Neutralidad en emisiones

El consejero delegado insiste en la urgencia de buscar una salida. ¡°Necesitamos una soluci¨®n sostenible, no en alg¨²n momento, sino ahora. La situaci¨®n no mejorar¨¢ por s¨ª sola, al contrario¡±, alerta. ¡°Nuestro objetivo com¨²n es crear una empresa sider¨²rgica de alto rendimiento, rentable y orientada al futuro, que reduzca los costes de la descarbonizaci¨®n a un nivel m¨¢s competitivo y acelere la transformaci¨®n ecol¨®gica en el camino hacia la neutralidad de emisiones¡±.

Dentro de estos planes, el ejecutivo valora el mercado espa?ol de manera positiva debido a que re¨²ne ¡°buenas condiciones porque ah¨ª se pueden producir energ¨ªas renovables e hidr¨®geno a precios competitivos¡±. ¡°Esperamos un fuerte crecimiento porque en Espa?a se est¨¢n construyendo muchas plantas para convertir energ¨ªas renovables en otros tipos de energ¨ªa¡±. Los planes de Thyssenkrupp se enmarcan en un momento en el que la econom¨ªa alemana sigue muy debilitada. El Gobierno espera un crecimiento de un 0,3% para el a?o en curso y los empresarios alemanes reclaman todo un plan de medidas ¡ªcomo reducir la burocracia, mejorar la digitalizaci¨®n y modernizar la red de ferrocarriles para un transporte de mercanc¨ªas m¨¢s eficiente¡ª y recuerdan la importancia de que Alemania sea un pa¨ªs industrial, exportador e innovador. ¡°Hay que mejorar la productividad en Alemania. Tenemos que sentarnos con el Gobierno y debatir c¨®mo podemos hacer que la econom¨ªa sea m¨¢s productiva¡±, concluye.

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