Un sistema de aprendizaje para el mundo real

Partir de un problema real, fomentar el trabajo en equipo, promover el pensamiento cr¨ªtico y creativo, y aplicar el conocimiento a la pr¨¢ctica. Esta es la receta del Aprendizaje Basado en Retos (ABR), una metodolog¨ªa que est¨¢ dejando huella en la educaci¨®n, formando profesionales altamente demandados por empresas de todo el mundo. Su objetivo no se limita a la adquisici¨®n de conocimientos te¨®ricos, sino que busca que los estudiantes apliquen su formaci¨®n a la resoluci¨®n de desaf¨ªos actuales, verdaderos y que tengan impacto. ¡°Se trata de traer el mundo profesional al aula¡±, afirm¨® Victoria Bamond, rectora y directora acad¨¦mica de Schiller International University, durante un encuentro celebrado esta semana en Madrid y organizado junto a EL PA?S.

Desde su nacimiento, hace 60 a?os, esta universidad siempre se ha caracterizado por ofrecer a sus alumnos una metodolog¨ªa experiencial. Lo ha hecho con la inmersi¨®n de sus estudiantes en un mundo cada vez m¨¢s interconectado. ¡°?C¨®mo puede una instituci¨®n ser verdaderamente global? La respuesta radica en la inmersi¨®n en otras culturas y contextos internacionales¡±, a?adi¨® Bamond. De ah¨ª que las personas que estudian en alguno de sus cuatro campus ¡ªMadrid, Par¨ªs, Heidelberg (Alemania) y Tampa (Estados Unidos)¡ª puedan moverse con total libertad entre ellos. En la actualidad, el Aprendizaje Basado en Retos se presenta como una herramienta que busca dar experiencias. ¡°?C¨®mo pueden los estudiantes prepararse de manera m¨¢s efectiva para sus futuros roles profesionales? La respuesta es sencilla: trabajando¡±, resalt¨® la rectora.

Este nuevo modelo educativo ¡ªaplicado por la instituci¨®n en sus grados y posgrados¡ª dinamita el patr¨®n de aprendizaje que a¨²n perdura en muchas universidades y que se fundamenta en la acumulaci¨®n de conocimientos que luego no tienen aplicaci¨®n en el mundo laboral. ¡°Lo ideal es que el estudiante empiece a tomar decisiones y colaborar en un entorno diverso y que se acerque al m¨¢ximo al que encuentra en la empresa, porque eso le permitir¨¢ desarrollar sus habilidades y su m¨¢ximo potencial estando mejor preparado para su incorporaci¨®n al mercado laboral¡±, subray¨® Estela Quesada Zuheros, directora de Responsabilidad Social Corporativa IBM Espa?a, Portugal, Grecia e Israel.

IBM ha adoptado tambi¨¦n una metodolog¨ªa experiencial en algunos de sus programas de responsabilidad social corporativa, enfoc¨¢ndose en la formaci¨®n y educaci¨®n en tecnolog¨ªa. Con un compromiso de formar a 30 millones de personas para el a?o 2030, la firma tecnol¨®gica tambi¨¦n colabora con la Universidad Schiller, utilizando diversas herramientas y recursos para alcanzar este objetivo. ¡°Nos apoyamos en nuestra plataforma de formaci¨®n de acceso gratuito que alberga una amplia gama de contenidos en ¨¢reas como inteligencia artificial y computaci¨®n en la nube, temas que est¨¢n ganando cada vez m¨¢s relevancia y que queremos hacer accesibles a la ciudadan¨ªa, en especial a las personas que est¨¢n buscando empleo¡±, coment¨®.

En un entorno en constante evoluci¨®n, donde los cambios son cada vez m¨¢s r¨¢pidos e impredecibles, es esencial contar con profesionales multidisciplinares capaces de trabajar de manera ¨¢gil y efectiva para resolver retos espec¨ªficos. ¡°Una de las necesidades que hemos visto en Airbus es tener gente que se empape del mundo real y no solo de hard skills [conocimientos t¨¦cnicos], esas competencias y conocimientos basados en las asignaturas duras que recibieron en la universidad, sino que tienen que ser capaces de resolver un problema que ha surgido ahora, abordarlo desde distintos puntos y crear un equipo con gente de diversas formaciones¡±, asegur¨® Alejandro Buenache Vega, head of Technical Data Systems Spain en Airbus.

En Schiller International University son conscientes de ello y en sus grupos, sobre todo en posgrado, hay una mezcla generacional importante. ¡°Esto no se da mucho en otras universidades¡±, abund¨® la rectora de la instituci¨®n. ¡°Es precisamente esa diversidad lo que enriquece m¨¢s los proyectos¡±. Para un reto en concreto, por ejemplo, no solo hay una combinaci¨®n de distintas disciplinas, sino tambi¨¦n de distintas edades y de distintas nacionalidades, porque los desaf¨ªos que se suelen resolver se hacen con alumnos de los diversos cuatro centros educativos que tiene Schiller. Normalmente, este proceso es guiado por un profesor, una figura indispensable en el ¨¢mbito universitario. Sin embargo, el enfoque se enriquece con la participaci¨®n de un mentor, que brinda apoyo adicional y orientaci¨®n especializada.

Plataforma

En este caso Schiller se apoya en Elevatorfy, una plataforma de formaci¨®n en emprendimiento. ¡°Hace tiempo identificamos una oportunidad: aunque los alumnos salen muy bien formados te¨®ricamente, las empresas notaban una falta de competencias pr¨¢cticas y habilidades espec¨ªficas¡±, dijo Luis Fern¨¢ndez L¨®pez. fundador y consejero delegado de Elevatorfy. ¡°Nos enfocamos en enfrentar desaf¨ªos reales con empresas, no hipot¨¦ticos. Inician colaboraciones definiendo problemas aut¨¦nticos, como limitaciones en presupuestos. Mediante un proceso de generaci¨®n de ideas, los alumnos presentan algunas soluciones. Y finalmente, desarrollan prototipos para las empresas. Este enfoque ha generado opciones implementables y beneficiosas, cerrando la brecha entre teor¨ªa y pr¨¢ctica empresarial¡±, explica.

?lvaro Ruiz, responsable de Servicios al Cliente de Metro de Madrid, comparti¨® un reto personal con los estudiantes de Schiller. ¡°La idea era que aportaran ideas para mejorar la experiencia de viaje del cliente¡±, asegur¨® Ruiz en el encuentro. Tras diversas reuniones durante varios meses, los estudiantes de la universidad presentaron algunas soluciones a la compa?¨ªa. ¡°Les hablamos de cu¨¢nta gente coge el Metro, cu¨¢l es el perfil del usuario y toda la informaci¨®n respecto a los viajes que se realizan a diario¡±. Una de las principales conclusiones de los estudiantes fue que a la gente no le gusta esperar mucho tiempo en el and¨¦n ni en las m¨¢quinas expendedoras de billetes. Por ello, los alumnos propusieron mejorar la app de la empresa dando informaci¨®n lo m¨¢s precisa sobre los horarios de los trenes. Adem¨¢s, sugirieron que la app deber¨ªa tener una mayor integraci¨®n con otras aplicaciones de movilidad para ofrecer informaci¨®n adicional al viajero.

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