Absuelto el hombre al que le midieron el pene en un caso de violaci¨®n m¨²ltiple
Estaba acusado de tres agresiones sexuales.- El acusado afirm¨® que era una amante "fogoso en intenso"
La secci¨®n segunda de la Audiencia Provincial de Ja¨¦n ha absuelto al nigeriano acusado de tres violaciones y al que le midieron el pene para demostrar que los desgarros vaginales que presentaba una de las supuestas v¨ªctimas (su ex novia) se deb¨ªa al tama?o de su ¨®rgano genital.
La sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, fundamenta que las declaraciones de las v¨ªctimas no re¨²nen "los requisitos que exige la Jurisprudencia para poder dotarlas de la eficacia necesaria" y desvirtuar en consecuencia el principio de presunci¨®n de inocencia.
As¨ª, agrega que tras un an¨¢lisis de la versi¨®n de las j¨®venes se concluye que carecen de la consistencia requerida que avale la certeza de sus acusaciones, "lo que motiva la existencia de dudas razonables" sobre la forma en que se produjeron los hechos.
De igual modo, la Audiencia argumenta que el ¨²nico dato que pod¨ªa corroborar que la ex novia del acusado fue violada fue un desgarro vaginal que "puede producirse por una relaci¨®n sexual consentida como inconsentida".
En el juicio Ojiffor A. admiti¨® haber mantenido relaciones sexuales con una de las denunciantes pero matiz¨® que estas sucedieron cuando ambos eran novios. Al respecto, apunt¨® que este noviazgo fue muy "fogoso e intenso".
El procesado explic¨® que conoci¨® a esta joven en octubre de 1998 y que la relaci¨®n se interrumpi¨® en el a?o 2001. As¨ª, indic¨® que al principio les iba muy bien, pero que cuando cortaron el noviazgo ella y sus amigos buscaron complicarle la vida.
Ex novia
Por su parte, la m¨¦dico forense que examin¨® a su ex novia explic¨® que presentaba un desgarro en el fondo del saco vaginal que pudo ser compatible con una agresi¨®n sexual, si bien matiz¨® que esta opci¨®n es una hip¨®tesis y que ella nunca lleg¨® a hablar directamente o analizar personalmente a la denunciante.
Por ello, agreg¨® que ese desgarro tambi¨¦n pudo haberse producido por la introducci¨®n en la vagina de alg¨²n objeto o por haberse producido la penetraci¨®n r¨¢pidamente, sin que la vagina estuviera lo bastante lubrificada. En definitiva, subray¨® que esa lesi¨®n -que ya estaba en fase de cicatrizaci¨®n cuando ella investig¨® el caso porque la joven fue al hospital unos diez d¨ªas despu¨¦s- pudo producirse en una relaci¨®n sexual consentida o no consentida o por la introducci¨®n de alg¨²n objeto.
De igual modo, el perito propuesto por la defensa que midi¨® el pene del acusado declar¨® que esta prueba la realiz¨® con el ¨®rgano en estado de flacidez y que el resultado fue de 12,5 cent¨ªmetros, un tama?o "ligeramente superior" a la media, seg¨²n ratific¨®.
Tama?o del pene
Con respecto a la posibilidad de que el tama?o del pene fuera la causa del desgarro vaginal que presentaba una de las denunciantes, aleg¨® que esa afirmaci¨®n no se puede realizar sin haber examinado espec¨ªficamente las condiciones de la vagina, de tal modo que el tama?o pudo ser la causa del desagarro, si bien no se puede confirmar categ¨®ricamente.
As¨ª las cosas, el ministerio fiscal elev¨® a definitivas sus calificaciones y demand¨® la imposici¨®n de una pena de 20 a?os de prisi¨®n por tres delitos de agresi¨®n sexual as¨ª como el pago de una indemnizaci¨®n de 20.000 euros ya que las v¨ªctimas han mantenido durante todo este tiempo su incriminaci¨®n y porque el informe forense considera compatible el desgarro con una relaci¨®n sexual violenta.
Adem¨¢s, incidi¨® en que las v¨ªctimas no interpusieron las denuncias cuando se registraron los hechos porque ten¨ªan miedo y verg¨¹enza.
La acusaci¨®n particular mantuvo su solicitud de 36 a?os de internamiento penitenciario por tres delitos de agresi¨®n sexual adem¨¢s de 60.000 euros por el da?o moral causado y otros 2.800 euros en concepto de indemnizaci¨®n para la ex novia. Al respecto, fundament¨® que la narraci¨®n de las v¨ªctimas est¨¢ corroborada con los informes periciales y que la joven, que era entonces una ni?a de 16 a?os, dijo que no quer¨ªa tener sexo.
Finalmente, ha prevalecido la versi¨®n de la defensa que aleg¨® que no existe prueba de cargo que desvirt¨²e la presunci¨®n de inocencia y que las declaraciones de las denunciantes no ofrecen la suficiente certeza para fundamentar una condena, por lo que la Audiencia Provincial ha decretado la absoluci¨®n del procesado.
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