Puigcerc¨®s, un pol¨ªtico carism¨¢tico que aspira ser candidato en las catalanas
El nuevo presidente de ERC, que releva a Josep Llu¨ªs Carod Rovira en este cargo, es un pol¨ªtico carism¨¢tico que acaba de conseguir su objetivo de controlar las riendas de ERC y que aspira, en los pr¨®ximos meses, a ser tambi¨¦n el candidato de esta formaci¨®n a la presidencia de la Generalitat.
Puigcerc¨®s, enfrentado desde hace tiempo al hasta ahora presidente de ERC por el control del partido, naci¨® en Ripoll en 1966 y, por tanto, es de la generaci¨®n pol¨ªtica posterior a la de Carod. A¨²n as¨ª, el nuevo l¨ªder de ERC, que ya controla desde hace a?os el aparato del partido, est¨¢ en pol¨ªtica desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas, puesto que empez¨® a militar en las juventudes de ERC en 1987, cuando ERC atravesaba un momento de crisis.
Ese a?o Puigcerc¨®s, con fama de tener car¨¢cter fuerte y un gran sentido del humor, aunque con menos dotes de oratoria que Carod, se convierte en secretario general de las JERC, y entra en la ejecutiva republicana, un ¨®rgano que no ha abandonado desde entonces. Concejal en Ripoll (Girona) de 1987 a 1991 y diputado en el Parlament entre 1992 y el 2000, ese a?o se convierte en diputado en el Congreso, donde entablar¨¢ relaci¨®n con los dirigentes de los partidos espa?oles, gan¨¢ndose fama de buen diputado en la oposici¨®n al Gobierno del PP.
Mala relaci¨®n con Carod
A Puigcerc¨®s se le atribuye el m¨¦rito de haber negociado, junto con el actual presidente de la Generalitat, Jos¨¦ Montilla, con el que mantiene una buena relaci¨®n, la creaci¨®n del primer gobierno de izquierdas en la Generalitat tras m¨¢s de veinte a?os de gobierno de CiU.
La iniciativa de Carod, a poco tiempo de crearse el primer tripartito, de verse en Perpi?¨¢n con dirigentes de ETA, que Puigcerc¨®s desconoc¨ªa, hizo todav¨ªa m¨¢s dif¨ªciles las relaciones entre ambos, y desde entonces sus diferencias son casi irreconciliables. Entre tanto, Puigcerc¨®s continu¨® como jefe de filas de ERC en el Congreso tras las elecciones de 2004, pero antes de acabar la legislatura desembarc¨® en Catalu?a para formar t¨¢ndem con Carod en las elecciones catalanas y es desde hace un a?o, de nuevo, diputado en el Parlament.
Tras renovar el pacto tripartito, Carod se converti¨® en vicepreidente del gobierno catal¨¢n, y Puigcerc¨®s conseller de Gobernaci¨®n. Pero al poco tiempo sus enfrentamientos privados pasaron al ¨¢mbito p¨²blico, y la pelea por el control de ERC ha marcado la imagen p¨²blica de la formaci¨®n republicana en el ¨²ltimo a?o.
En un principio, Carod se mostr¨® dispuesto a enfrentarse con Puigcerc¨®s en las elecciones por la presidencia de ERC, pero finalmente se retir¨® alegando que lo hac¨ªa para facilitar la renovaci¨®n en el partido. A¨²n as¨ª, dos hombres de confianza de Carod, el presidente del Parlament, Ernest Benach, y su n¨²mero dos en el departamento de la Vicepresidencia, Rafel Niub¨®, montaron una candidatura para plantar batalla a Puigcerc¨®s.
Tras las elecciones de este s¨¢bado, en las que Puigcerc¨®s ha mostrado m¨¢s fuerza en las urnas que el sector liderado por Carod, al nuevo presidente de ERC le queda otro reto: medirse con Carod, esta vez directamente con ¨¦l, para pugnar por la candidatura de la presidencia a la Generalitat en el 2010.
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