Los esp¨ªas que siguieron a cargos p¨²blicos son empleados de la Consejer¨ªa de Interior

Los seguimientos en Madrid a cargos pol¨ªticos del PP contrarios a la l¨ªnea marcada por Esperanza Aguirre -el vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo y el ex consejero de Justicia, Alfredo Prada- se hicieron desde la Consejer¨ªa de Interior del Gobierno de la Comunidad de Madrid por personal de la Direcci¨®n General de Seguridad. Los indicios recaen sobre personas ajenas al colectivo de 40 funcionarios que desempe?an las tareas oficiales. En concreto, sobre uno de los dos equipos especiales de funcionarios que han coexistido en dicha consejer¨ªa para la realizaci¨®n de tareas delicadas: uno, hist¨®ricamente al mando de Sergio Gam¨®n y otro, desde junio de 2008, bajo el control del ex polic¨ªa Marcos Pe?a.

Dicho personal dej¨® anotaciones manuscritas sobre los partes mecanografiados para identificar determinadas matr¨ªculas de coches que aparec¨ªan en los seguimientos. Los agentes escribieron a mano el n¨²mero de la matr¨ªcula y el nombre de su supuesto propietario, que confirmaron, supuestamente, acudiendo a otros servicios policiales. La letra manuscrita que figura en alguno de esos partes coincide con la de al menos una de las personas que est¨¢ empleada en ese departamento de la Comunidad de Madrid desde hace a?os, seg¨²n las conclusiones de los dos informes caligr¨¢ficos encargados por este peri¨®dico.

La caligraf¨ªa coincide

Antes de encargar los informes periciales, EL PA?S tuvo acceso a numerosos documentos originales del departamento de Seguridad de la Comunidad de Madrid (formularios de personal y partes de vacaciones o turnos), donde se recogen algunos apuntes manuscritos de funcionarios que trabajaban all¨ª. En alguno de los documentos del departamento de Seguridad de la Comunidad de Madrid con los que ha trabajado este peri¨®dico, la caligraf¨ªa coincide con la que aparece en las anotaciones manuscritas de los partes de seguimiento a pol¨ªticos, fechados entre marzo y mayo de 2008.

Los peritos a los que ha recurrido EL PA?S sacan id¨¦ntica conclusi¨®n tras analizar con diversas t¨¦cnicas y durante d¨ªas todos los documentos facilitados por este peri¨®dico y que se presentan en estas p¨¢ginas. "Los textos dubitados [las anotaciones a mano en los partes de seguimiento publicados por este peri¨®dico] han sido manuscritos por la misma persona que realiz¨® los textos y firma indubitados [documentos originales de la direci¨®n general de Seguridad que se corresponden con distintos formularios y presupuestos donde los empleados escribieron a mano diversas anotaciones]", se?alan los informes periciales.

El presidente del PP, Mariano Rajoy, y los l¨ªderes de la oposici¨®n en la Asamblea de Madrid, In¨¦s Saban¨¦s (IU) y Maru Men¨¦ndez (PSOE) hab¨ªan defendido la necesidad de ordenar informes caligr¨¢ficos para determinar la autor¨ªa de la letra que aparece en los partes de seguimiento. Pero ni el Gobierno de Esperanza Aguirre ni el juzgado que investiga estos hechos, el numero 47 de Madrid, que acumula las pesquisas iniciales de la Fiscal¨ªa de Madrid, se han interesado por la pr¨¢ctica de esta prueba para investigar de d¨®nde procedi¨® el espionaje. El consejero de Interior de la Comunidad de Madrid, Francisco Granados, lleg¨® incluso a poner en duda la autenticidad de los partes de seguimiento publicados por este peri¨®dico. Pese a que los dos espiados, Manuel Cobo y Alfredo Prada, confirmaron punto por punto que el contenido de los seguimientos se correspond¨ªa con sus actividades p¨²blicas y privadas de aquellos d¨ªas.

El autor de la letra forma parte del equipo que hasta hace unos meses trabajaba a las ¨®rdenes directas del entonces director general de Seguridad, Sergio Gam¨®n, fichado en 2007 por Esperanza Aguirre. La dirigente madrile?a conoc¨ªa bien a Gam¨®n, pues trabaj¨® en el equipo de seguridad del Senado cuando ella era presidenta de esa instituci¨®n. Una de las secretarias de Aguirre en el Senado durante aquella etapa era la esposa de Gam¨®n. Cuando en julio de 2008 fue destituido Gam¨®n de su puesto por irrumpir en un despacho de la consejer¨ªa de Justicia, casualmente de una persona que tambi¨¦n hab¨ªa sido espiada algunos meses antes, para sustraer documentaci¨®n supuestamente delicada, Aguirre orden¨® que se le buscase un cargo dentro de la misma consejer¨ªa de Interior. Le garantiz¨® as¨ª que siguiera cobrando m¨¢s de 90.000 euros anuales. Y el consejero de Interior, Francisco Granados, lo hizo con celeridad. Gam¨®n s¨®lo estuvo tres d¨ªas en el paro tras ser destituido por supuesto espionaje ilegal de una dependencia de la Comunidad de madrid.

Fractura interna

Unos meses antes de su destituci¨®n se produjeron los seguimientos a pol¨ªticos del PP. En los meses del espionaje, de los que ha quedado prueba documental a trav¨¦s de partes de seguimiento (entre marzo y mayo de 2008), se hab¨ªa desencadenado con especial virulencia la mayor batalla que se recuerda por el poder dentro del PP. Esperanza Aguirre, la presidenta de la Comunidad de Madrid, se hab¨ªa mostrado muy cr¨ªtica con la direcci¨®n del partido tras la derrota electoral y muchos de sus consejeros defend¨ªan que hab¨ªa que plantar cara a Rajoy en el congreso extraordinario de junio que se iba a celebrar en Valencia.

En ese ambiente de fractura interna en el PP se producen los seguimientos diarios al vicealcalde de Madrid, Manuel Cobo, enfrentado con Aguirre y con el propio Gobierno regional por asuntos pol¨ªticos y de pura gesti¨®n diaria de ambas instituciones. Tambi¨¦n hay seguimientos m¨¢s detallados al que entonces era un miembro del propio Gobierno de Esperanza Aguirre, el consejero de Justicia, Alfredo Prada. A Prada, seg¨²n los partes diarios de seguimiento, se le esp¨ªa en restaurantes y hoteles y se describe a las personas que le acompa?an para tratar de identificarlas, a veces utilizando otros servicios de informaci¨®n de manera ilegal para conocer quienes pod¨ªan ser los propietarios de determinados veh¨ªculos. Prada se situ¨® del lado de Rajoy en la batalla interna del PP y ahora es un cargo org¨¢nico de la direcci¨®n nacional del partido. Desde hac¨ªa meses, Prada hab¨ªa ca¨ªdo en desgracia en el Gobierno de Esperaza Aguirre. La presidenta pas¨® de tenerle en el m¨¢ximo escalaf¨®n de su Gobierno, como vicepresidente y consejero de Justicia e Interior, a dejarle s¨®lo con la cartera de Justicia.